relatos eroticos

Soy Mercedes, tengo 46 años, estoy casada con Ale hace 25 años tenemos 3 hijos ya grandes, nuestros mejores amigos son Susana y Martin, nos conocemos hace más de 40 años los 4, amigos de la niñez.

Hace tres semanas decidimos tomarnos un fin de semana, los cuatro sin los hijos ni nadie, un fin de semana en pareja, elegimos Mar del Plata, nos queda cerca conocemos mucho y tiene de todo.

Apenas salimos, y los que tienen ya unos años de casados lo comprenderán mejor, comenzaron las pequeñas discusiones, de cuanta ropa, a que hora salimos y todo lo que ello implica. Como siempre Martin me da la razón más a mí que a su esposa, y viceversa Ale siempre conciente lo que Susi pide, ella cansada ya de un principio se le ocurrió decir, porque no vas vos (Martin) con Merce y yo viajo con Ale, así discutimos menos. Era una frase hecha solo tirada al vuelo, lo que paso es que Merce la tomó al voleo y se prendió, eso, porque no vamos con las parejas cambiadas así el viaje es más divertido y Gus me da todos los gustos, Susana asintió, por supuesto con Ale ni una discusión hasta el mar.

Salimos los cuatro en el auto de Martin, él y yo adelante y Susi y Alejandro en el asiento trasero.

Les cuento que fue un viaje de novela, todo lo que pedíamos se hacia realidad, hasta la boludez máxima la teníamos a los pies, comida, bebida, parar para mirar cualquier cosa, ni una sola discusión, y menos un reproche.

Cuando llegamos, a comer primero después el hotel, la comida fue en el puerto, El viejo Pop, buena comida, muy buena bebida, todos de un humor impresionante, pedí postre y Martin no solo me lo consintió, sino que me lo dio de comer en la boca, poca sobremesa y otra vez todos al auto, cuando me voy a subir atrás, Susana me aparta y me dice tu lugar es adelante con tu pareja.

Llegamos al hotel, y como si lo hubiésemos planeado, Martin y yo del brazo y Ale y Susana también, entramos y algo raro nos pasó, Martin lleno la tarjeta de entrada con su nombre y el mío y Ale hizo lo mismo con mi amiga, nos dirigimos al 3er piso donde nos dieron habitaciones contiguas, nos miramos y Martin dijo, Merce vamos a cambiarnos para ir al casino, en media hora estamos todos listos, Coco tomo su bolso y le pidió a Ale que le abriera la puerta que se hacia tarde.

Todos nos miramos pero entramos a las habitaciones con parejas cruzadas, era cambiarse para ir al casino, nada más pero con todo el erotismo que eso significaba. Estabamos haciendo una historia de aquellas, sin proponernos nada, estaba resultando muy sensual, en ese momento si me decían de coger, me bajaba los pantalones y me la ponían ahí, nunca se me imaginaria que fuera alguien diferente a mi marido.

Entro en la habitación, Martin me pregunta si me voy a bañar, por su puesto que si le contesto, dale hacelo rápido que tenemos solo media hora. Saco alguna ropita del bolso, y me dice si tenia algo más llamativo como para dar un poquito de celos, por supuesto y saque una mini negra que no usaba desde hacia varios años, pero me quedaba de primera, y una blusita del mismo color, la tanguita era al tono y por supuesto un corpiño de encaje negro también, medias y zapatos al tono de taco aguja.

Todo pasó sin más cuando nos vemos en el hall del hotel. Susana estaba sentada en un sillón con Alejandro, tenia puesto un vestido súper ajustado gris, medias al tono, y Ale la tenia abrazada como si fueran realmente esposos y hasta diría, recién casados.

Nos metimos todos en el auto, como siempre parejas cruzadas. Llegamos al casino, y cuando entramos, ahí como siempre, nosotras por un lado y ellos por el otro, eso no cambio para nada, a ninguna nos llama mucho el juego y monos con ellos que se enloquecen, estén con quien estén.

Nos pedimos unas copas, y sentadas en el salón nos pusimos a conversar, el primer tema es lo bien que lo habíamos pasado en todo el viaje, la sensualidad de la entrada al hotel, y las dos coincidimos cuando empezamos a contarnos como fue la entrada en la habitación y el baño y cambio de ropa. Yo le comente que Martin solo me sugirió la ropa, como par dar celos, ella me comentó casi lo mismo, y que era la primera vez que salía de fin de semana y en el momento de bañarse y cambiarse no la jodiera su pareja con que se pusiera en bolas delante de él, se bañaran juntos y un polvito rápido o que le chupara la pija antes de salir, cosa que hacen todos, y lo único que logran es ponernos nerviosas. Las dos coincidimos que era espectacular la situación por esos motivos, el tema era como seguía.

Susi me dijo, que no nos gastáramos en pensar, ellos decidirían y nos joderián un rato pero que su virilidad no les permitiría ir más allá, yo pensé lo mismo, y decidimos dejarnos llevar, y que la resolución del problema fuera de ellos.

Pasaron unas dos horas, jugamos un poco, ganamos menos, pero al momento de buscarlos y encontrarlos eran dos chicos con juguete nuevo, habían ganado y parecía que mucho por sus ojos, y a esos ojos los conocíamos muy bien.

Salimos sin saber cuan bien les había ido, seguíamos del brazo y con parejas cambiadas por supuesto, nos pusimos a caminar cuando al momento que noto que Martin me toma de la cintura Ale esta haciendo lo mismo con Susana. Paseamos por la rambla un buen rato, luego fuimos a tomar algo por el centro y ya a las tres de la mañana pusimos rumbo al hotel.

Entramos y cuando estábamos en el ascensor, notamos que ninguno de los dos soltaba prenda de cuando terminaba el juego, y tasa tasa cada uno para su casa.

Cuando estamos en el pasillo y frente a las habitaciones Martin le dice a mi esposo, mira que voy a hacer de cuenta que no le vas a perdonar nada a mi mujer, y te aconsejo que pienses los mismo, que mañana no haya reproches, de porque le tocaste acá, de porque no le perdonaste el culo que ni a mi me lo da, lo mejor es entrar y tomar lo más que puedas para que sea parejo y sin reproches, que te parece, vos conoces a tu mujer y yo a la mía, se lo mal que lo vas a pasar, está Susi con sueño, cansada, le duele la cabeza igual que a la tuya, lo que uno consiga es solo lo que uno es capaz de conseguir, a ver si somos tan amables como ellas dijeron hoy con las parejas cambiadas.

Ellos pensaron en ese momento, o mejor dicho lo planearon que las dos terminábamos la joda en ese momento, pero no ocurrió así, tome las llaves que tenia Martin en la mano abri la habitación y guiñándole un ojo a Susana le dije que se esforzara porque su compañero casual de habitación no se quedara dormido en menos de media hora, dicho esto y del brazo del marido de mi amiga, entre en la habitación.

Ya dentro de la misma, poco sabia yo que hacer, por supuesto mi primera reacción fue entrar al baño, me refresque un poco la cara, me quite la pollerita y la blusa, me quede con los tacos y salí para ver que pasaba, Martin ya estaba en la cama y cuando me acerco noto que debajo de la sabana estaba completamente desnudo porque sus calzoncillos estaban tirados junto a la cama, solo atine a comenzar a quitarme las medias, a medida que lo hacia de su entrepierna comenzó a crecer un penacho, Martin se estaba calentando conmigo y de que manera, ya a esta altura era un echo que íbamos a coger, y de que manera, el tipo me desnudaba la poca ropa que me quedaba con los ojos, cuando me quito el corpiño, su expresión fue sobre mis pezones, que por ese entonces estaban duros y grandes como dos carozos de aceituna como dice Ale.

Entro a la cama solo con la tanguita y cuando quiero taparme con la sabana, me dice que lo deje contemplar un poquito, comienza a recorrerme el cuerpo con los ojos y con sus dedos, cuando llega a mi cintura, empieza primero por un lado luego por el otro a bajar la bombachita, y cada tanto pasa su mano por mi pubis, acariciándolo siquiera, muy suave, eso me excita, me hace levantar un poquito mi cintura par notar unos dedos diferentes en mi concha. La tanga ya no esta, nos abrazamos nos besamos, parecíamos novios, un beso de lengua que no sentía desde lo 20, la pija de Martin al palo y me la friega por todos lados, y yo que lo dejo, que calentura, me pone boca abajo, quiero sentir mi pija en ese culo, es el sueño de todos, el culo de Merce, me confiesa que es un comentario que tiene años.

Bueno ya lo tenia subido, yo boca abajo, y noto que intenta metérmela por el culo, despacio Martin, primero hacerme acabar a mi y después aceitamos y te dejo meterlo.

Dicho me dio vuelta, y en el medio de la vuelta, su pija queda frente a mis ojos, no tenia nada que envidiarle a mi marido, la tomo con una mano, y me la meto en la boca, despacito primero, luego sacarla, y terminar con la leguita afuera rozándole la cabecita, otra vez adentro y dos o tres bombas, una linda meme para mi mejor amigo, estaba al palo, lo note y de una la espalda en la sabana, subite Marin y acabame, fue decirlo y se me vino como bombero, casi me acaba afuera, estaba desesperado, en ese momento los dos escuchamos los gemidos de Su esposa en la otra habitación, parece que mi marido estaba tan caliente con ella como el conmigo.

Por la mañana temprano, escuchamos la puerta, Martin se levanta y abre la puerta era Alejandro preguntando como la pasamos, la imagen que vio era alucinante, su mejor amigo tras la puerta en bolas y con la pija al palo, yo con los pelos hechos un enjambre tirada en la cama boca abajo con las piernitas abiertas, como si hubiera pasado la mejor de las cogidas de mi vida, lo cual no estuvo muy lejos.

Segundo dia

Eran como las 10 de la mañana, entreabro los ojos y veo a Martin con una toalla en su cintura abriendo la puerta de la habitación, en el pasillo Ale mi marido tratando de mirar dentro la pieza, Martin lo toma del brazo y lo invita a pasar, imagínense la situación, yo totalmente en bolas tirada en la cama, destrozada, yo y la cama, ni fuerzas para levantar una pestaña, semitapada por las sabanas, tenia solo la cintura oculta, medio de costado mi marido podía verme al igual que nuestro amigo, el culo, las piernitas abiertas, tal cual me las había dejado Martin después de haber lamido mi colita desde las 8 de la mañana, los pelos, una maraña y los brazos extendidos sobre la cama. los dos con los ojos puestos en mi, recorriéndome de lado a lado, me di vuelta y ni los miré solo quería dormir un ratito mas. Martin le propone darse una ducha, conmigo por supuesto y después ir los cuatro a desayunar al salón del hotel.

Media hora más tarde, los cuatro llegábamos juntos a la mesa, mi amiga con unas ojeras como si la hubieran cogido entre diez, y es mas o menos lo que le paso, se noto que mi marido no le dejo un agujero sin perforar, la pobre no se podía estar en pie. Nos pusimos a tomar el café todos muy cachondos y contentos, en un momento Ale saca de su bolsillo una tanguita blanca diminuta y mostrándosela a Martin le pregunta si se la puede guardar de recuerdo, por supuesto que si le dice y a su vez muestra la mía, una leopardina nuevita que me había regalado mi marido para ese viaje, bueno los dos contentos con sus trofeos se pusieron a comentar de cualquier cosa menos de lo que había pasado la noche anterior como si fuera lo más común del mundo. Para nosotras había sido una de las noches más emocionantes de nuestras vidas, cojernos dos tipos sin miedos y sin culpas, cambiar de monta sin prejuicios, y sin que después como siempre te rompan las pelotas para volver, o cuando joden, de cómo lo pasaste, si fueron lo mejor, si nuestros maridos lo hacen parecido, o etc. Etc.

Salimos a caminar muy tranquilos, siempre con las parejas cruzadas, como si nada, despacito llegamos como a las 14.30 al puerto, un almuerzo frugal, y de vuelta al centro.

Por la peatonal caminando los cuatro, muy distendidos, como si fuera así de toda la vida, hicimos compras, nadie rompió las bolas con nada, ni una discusión, era tocar el cielo con las manos, de paseo con nuestros maridos sin discusiones ni reproches, gastar a dos manos, yo pedía Martin compraba, Su quería, mi marido gastaba y todo nos parecía bien.

Llegó la noche y nos encaminamos al hotel, cada uno con su pareja ocasional, cuando entramos a la habitación, Martin rápidamente se mete en el baño para darse una ducha, yo comienzo a elegir la ropa, no tardo mucho ya casi lo tenia decidido todo, muy sensual y provocativa, ese era mi look para esa noche, termino y mi amigo que no sale, se hace tarde, no quiero perderme nada de esta noche, entro al baño, se está duchando todavía, y decido desvestirme, corro la cortina y me meto en la bañera, imagínense El al palo, dejame que te ayude así no perdemos tiempo, y me froto el jabón en las manos y comienzo a enjabonarle la pija, los huevos, le tiro la pielcita para atrás, bien enjabonado todo el miembro, lo empujo un poquito para atrás y comienzo a enjuagarlo, cuando esta listo, me arrodillo, lo miro a los ojos y le digo, si me prometes quedarte tranquilo, lo lustramos un poquito, no es muy común este vocabulario en mi, Martin agarrado de las manijas solo atina a mirar, un besito en la puntita, otro más , un poquito de lenguota en la cabecita, ahora se la aprieto con los labios, un poquito adentro, la muerdo suavemente, y otra vez afuera, así una y otra vez, le clavo la mirada en sus ojos y toda adentro, dos, tres, cuatro y a la quinta, un borbotón de leche me inunda la boca, salpica mi cara cuando la saco y un enjuague urgente para mis pelos, cuanta leche había juntado desde la mañana. Nos terminamos de lavar, nos ayudamos a vestir y las 10 estábamos en el hall del hotel esperando a nuestras respectivas parejas.

Pasaron diez, veinte, treinta minutos y decidimos ir en busca de los dos, llegamos a la habitación, y como Martin pidió las llaves, pudimos entrar sin llamar, los dos ya se habían vestido para salir, pero parece que cuando Susii se fue a peinar, Alejandro quiso hacer lo mismo parándose detrás, nos imaginamos como se la abra apoyado, que ninguno de los dos pudo rechazar el impulso, y estaban los dos abotonados frente al espejo, ella con la falda levantada hasta la cintura y mi marido poniéndosela como perrito por detrás, que vamos a decir, si 30 minutos antes habíamos hecho algo parecido con mi amigo. Se terminan de vestir y arreglar y salimos.

Primero una buena comida, muy buena por cierto, después al casino, otra muy buena noche no tanto por el resultado económico, que fue magro, pero un par de veteranos nos pusieron fuera de si, tratando insistentemente de levantarnos a las dos, que por casualidad estábamos como diosas, una más sensual que la otra, yo con un vestidito no tan corto, pero que dejaban ver las piernas que tengo, y que además me levanta aun más el culito parado que poseo, como siempre medias negras y unos zapatos de taco aguja. Susana por su parte una pollerita muy corta, tiene también muy lindas piernas, un poco flacas pero muy buenas al fin, medias negras también, zapatos de piel y una blusita transparente con un corpiño de encaje transparente que dejaba ver sus pezones que son oscuritos y se ve que estaba o muy caliente o con frío porque resaltaban bastante de su busto.

Por fin como a eso de las 3 de la mañana decidimos irnos al hotel, nada cambio yo con Martin a nuestra habitación y Ale y Susi a la suya después de quedarse los dos en el bar a tomar algo.

Cuando estamos en la habitación con Martin, nos empezamos a besar, jugueteamos como adolescentes, o sea me metió mano por todos lados, cuando ya estábamos desnudos y muy calientes nos metemos en la cama, él de espaldas en la cama, lo destapo y me propongo hacerle una meme de aquellas, se la tomo con mi mano, comienzo una pajita lenta, me toma del cuello dulcemente y con un poco de rigor hace que me la introduzca en la boca, aunque ganas no me faltaban, cuando ya la tengo hasta la garganta, otra vez la puerta, pero esta vez abren, son la otra parejita, sigan como están nos dicen, yo les hago caso pero igualmente levantó la mirada para ver que se proponen, Su se arrodilla, empieza a desabrochar la bragueta de mi marido, cuando lo logra, introduce su mano y comienza a buscar su pija, la encuentra, la saca ya al palo, a diferencia mía no la besa, unos lenguetazos lentos y acompasados, parece que dan efecto en su compañero, mi marido da unos gemiditos de placer, sigue con lo mismo, conociendo a mi esposo, ya a esa altura la quería meter hasta la garganta, pero se contiene, ella sigue, lengüetazo y besito en la punta, le quita el cinturón y el último botón, baja su pantalón y su calzoncillo, ahora juega con sus huevos, le quita completamente los pantalones y el bóxer, abre las piernas de el y comienza a un juego frenético de sus manos, siempre con la pija de mi marido en la boca, con las piernas y el culito, noto que hasta llega a meter un poquito de sus dedos en el culo de Ale, cosa que nunca se me había ocurrido, como ven estaba mas pendiente de mi amiga y mi esposo que de la poronga de mi pareja ocasional que tenia en mi boca. Ale hace que ella se incorpore comienza a desnudarla sin dejar de besar cada parte de ella que queda al descubierto, hooo, como me esta calentando mi marido con otra y no se imaginan como estaba Martin viendo tan caliente a su mujer.

Cuando están los dos completamente desnudos, yo ya estaba abrazada por detrás de mi compañero, los dos tirados en la cama contemplando el espectáculo de nuestros respectivos.

Martin muy dulcemente pasa su mano para atrás y comienza a jugar con los labios de mi concha, para que tenga más comodidad y para mi mayor placer, no nos engañemos, abro mis piernitas, y cuando esto no es suficiente para que meta dos o tres deditos en mi concha paso una de las piernas por arriba de su cintura.

De mientras Su y Ale ya están en la cama contigua, esas de una plaza, por si uno lleva los chicos, los dos abrazados a los besos, en un momento ella se levanta, y ubicándose en posición inversa, se acuesta sobre el, estábamos por presenciar un 69, acomoda su entrepierna en la boca de mi marido, que ya sacaba la lengua cuando faltaban por lo menos 20 cm. para que llegara a su boca, Susana se recoge el pelo y con la otra mano quiere terminar una meme que había comenzado hacia un rato. No me pregunten como, minutos después estábamos con Martin en posición similar, un ratito bastante largo, luego me incorporo y me acuesto sobre él, con las piernas como jockey, y comienzo a cabalgarlo, ellos en la misma posición, era que jugara con mis pechos y Ale con los de ella, mi esposo besaba sus pezones los mordía y lo mismo hacia Martin conmigo, cada gesto se copiaba, cada gemido tenia un eco en la otra cama, todas las caricias se repetían era todo una copia fiel y cada vez mas excitante, media hora después, yo debajo de Martin y Susi de mi marido, era como un valet acuático, con un ritmo parejo y sensual, mis ojos en los de mi marido y los de Susana en el suyo, estaba yo acabando con otro pero con la cabeza en mi marido y Su acababa con mi Alejandro pero con los sentidos en su marido.

Acabamos mirándonos pareja con pareja, éramos un espejo, y el orgasmo fue de cuatro entre quejidos, gemidos, y jadeos,………….nos quedamos las parejas abrazadas hasta recuperar el aliento y se pasaron Su y Ale a nuestra cama, los cuatro desnudos en las mismas sabanas, no teníamos ya fuerzas para nada, así me quede dormida en los brazos de mi amigo y mi esposo haciendo cucharita con mi mejor amiga.

Me llamo Agustín y voy a contar lo que sucedió esta es la historia , mi mujer la llamaremos Rosa ,llevamos muchos años de casados y la monotonía llegó hasta el sexo además la edad también pasaba un poco de factura ,pues ya teníamos unos cuantos años yo 53 y mi Rosa 49 ,un día nos avisan que se había muerto la mujer de uno de la cuadrilla ,nos íbamos a reunir algunos después de años sin vernos y allí estábamos todos no faltó ninguno ,después del funeral ,fuimos a tomar unos vinos ,bueno cada uno lo que le apetecía ,estubimos bastante tiempo y poco a poco la gente se iba despidiendo ,ya quedábamos pocos y después de unos cuantos tragos ,un poco chispas ,al final me quedé con uno el cual llamaremos Jesús ,la verdad que es muy apreciado por mi mujer y por mí ,le digo a tí algo te pasa te veo un poco fuera de ti ,me dice pues claro que después de tanto tiempo sin vernos ,pues tengo algunas cosas que contarte y la verdad es que no me atrevía a contartelo,y yo le digo creo que tenemos confianza para contarnos tanto tu a mi como yo a ti así que ya me estás contando sea lo que sea ,bueno pero será un secreto entre tú y yo ,no se tienen que enterar y tú mujer ni la mía ,bueno vale secreto entre tú y yo.La verdad es que tienes una mujer muy guapa ,sabes que siempre os decía que me tenìa que haber casado con tu mujer (entre risas)si siempre lo decías ,pues después de tanto tiempo sin veros ,no se pero me acordaba mucho de vosotros y no se si por eso ,te cuento que después de tanto tiempo sin estar con vosotros ,me ha pasado y más de una vez ,le digo yo bueno ¿me vas a contar lo que pasó)

Claro espero que no te enfades ,sea lo que sea no me enfadarè,.Esto es lo que me ha pasado,por la noche en la cama durmiendo pero soñando ,parecía real soñe que estaba con tu mujer ,y como digo parecía real estábamos como te digo la palabra yo le digo follando ,pues sí pareía real ,pero fíjate si parecía real que me desperté y me había corrido,me levanté sin que se diera cuenta mi mujer y metí el canzoncillo en la labadora y me lavé bien ,me ha pasado más de una vez ,espero que no te enfades ,y yo le digo en ese sueño mi mujer gozaba ,si igual que yo,espero que no se lo cuentes ,quedará entre tu y yo nos despedimos y quedamos para otro día .

Llegué a casa y mi mujerme preguntó sobre el funeral ,le dije que bien y que estube con Jesus y que ya la contaría en la cama ,cenamos y nos fuimos a la cama ,le prometí a mi amigo que no se lo contaría a mi mujer ,la digo a mi mujer sabes que uno de la cuadrilla me ha contado una cosa increible ,pero no se si contártela ,yo tenía la pollla que me iba a explotar ,ella se dió cuenta y me dijo que que me pasaba ,ven la quité las bragas y se la metí y mientras iba poco a poco ,empecé a contarla que uno de la cuadrilla me dijo ,estabamos un poquito chispas pues después del funeral bebimos unos pocos vinos ,pues que soñó contigo y que era real lo que soñó,y me dice mi mujer ,pues que soñó ,pues que estaba follando contigo y que te gustaba ,y que se despertó con una corrida ,y tubo que salir corriendo a labarse ,me dice mi mujer entre gemidos pequeños gemidos ¿,quién es el que se ha corrido conmigo ?,como digo entre gemidos cada vez más fuertes la tenía donde quería quién es ,me voy a correr cariño y me gustaría saber quién es dime alguno haber si aciertas ,no se me dice bueno ,te digo tres nombres ,uno joven otro de nuestra edad y otro mayor que nosotros bueno cariño estoy a punto de correrme ,como tardes un poco ,me corro y no te digo quién de esos tres me gustaría que fuera ,bueno sonLuis ,el mayor 60 años Jorge de nuestra edad y Jesús de 36 años ,me voy a correr me corro me corro , me gustaría que fuera Jesús ,pues correte con Jesús ,te gustaría en la vida real follar con él ,pues claro ,quieres que hagamos un plan ,vale bueno mañana sábado le digo le llamo por teéfono que pase por casa ,le digo que es para ver un partido ,que te parece ,me parece bien.

A esa hora llaman a la puerta y es nuestro amigo venía con unas cervezas ,mi mujer llevaba una falta ,y nos sentamos para ver el partido al entrar le dió unos besos a mi mujer ,empezó el partido y mi mujer preguntando que como le iba la vida ,y Jesús decía me va muy bien tengo trabajo ,tengo mujer y tengo amigos buenos como vosotros,en un momento le digo Jesús cuenta a mi mujer lo que me has contado a mi , mi mujer se pone delante de él y le dice ,Bueno pues que he soñado contigo y mi mujer le dice te gustaría que fuese realidad ,me encantaría ,mi mujer se puso enfrente de Jesús se abrió de piernas le cojió las manos y se las metió para que la quitara las bragas se las quitó y de rodillas la metió la lengua ,antes de que sigas me gustaría que fuese como tú había soñado ,vale ,yo estaba como una moto mi mujer se levantó pues muestro amigo la puso sentada en la mesa se la metió y mientras se la metía la quitó la camisa y el sujetador y se quedó solo con la falda ,yo veía a mi mujer que estaba en la gloria gemía como nunca ,Jesús dice me voy a correr ,la metía la lengua en la voca mi mujer no podía más y yo gozaba me estaba pajeando y nos corrimos los tres ,espero que sigamos follando ya contaré como nos ha ido .Seguimos follando pero ya os contaré como hemos seguido.

Hola, me llamo ana , desde pequeña siempre he sido muy avanzada en cuerpo y mente, me crecieron rapido los pechos y destacaba mucho en clase aun siendo bajita, soy morena aunque me tinte de rubia en cuanto mi madre me dejo y eh seguido asi, esta historia va sobre mi primera experiencia liberal.

Siempre he ligado mucho y me a gustado provocar y jugar con el sexo opuesto, tras perder la virginidad con mi primer novio formal a los 18… entramos en una ola de sexo sin control, quedabamos todos los dias y follabamos hasta que nos dolian nuestras partes, empezamos a probar cosas nuevas, como juguetes, condones de distintos tipos, posturas, grabarnos en video etc…

Tras el primer año y cumplir los 18 los padres de mi novio me invitaron a ir de vacaciones con la familia a vera, para mi era un sueño y la oportunidad de salir de mi pueblecito cordobes por primera vez.

Llego el dia y de camino a vera, sentada al lado de mi novio ibamos chateando por el watsap para que sus padres no escuchasen nuestra conversacion… y me apetecio poner cachondo a mi novio sin mas… le mande un mensaje preguntandole, que que le apetecia hacerme en vera, que podia hacerme cualquier cosa, el muy jugueton me sugirio ideas muy tentadoras como masturbarnos en la playa o incluso follar dentro del agua con la gente alrededor y que me tenia una sorpresa, cualquier idea me excitaba para mi que no sabia aun el mundo que me quedaba por conocer.

Tras llegar al apartamento descubri que los padres de mi novio habian pillado solo dos habitaciones, una para ellos y otra para mi novio su hermana y yo… por lo que nuestras posibilidades de desfogar se volvieron nulas, decidimos salir a dar una vuelta por vera y al menos divertirnos y quien sabe quizas acabar follando detras de algun matorral…

Vera no es muy grande, practicamente solo tiene una calle de pubs, por lo tanto siendo de noche estaban llenos.

Entramos en el primer pubs que vimos y tras pedirnos una copa observamos que el rango de edad era totalmente descompensado… eramos los mas jovenes con diferencia y encima pareciamos no encajar por nuestra heterosexualidad, habia mucho hombres, gays y los heteros parecian ir en grupo en tornos a las pocas chicas que habia, las chicas parecian todas ir en pareja y extrañamente provocativas, llevaban vestidos semitransparente en los que a algunas se les intuia todo o incluso se podian apreciar los pezones en ellas, yo iba mucho mas coqueta, llevaba un vestido ceñido rojo con un sujetador que alzaba mi pecho (tengo una talla 100C) poniendomelas en una V perfecta y el corto del vestido casi dejaba ver mi culo del cual intento siempre presumir con un mini tanga que llevaba, puesto que queria ser la mas despampanante del lugar… aun que me quede muy corta.

Llevabamos un ratito en el pub y mi chico fue a hacer pis, en cuestion de segundos se me hacerco un chico de al menos 2 metros de alto, musculado como un toro y con un brazo como mi cuerpo, se sento en el taburete donde se sentaba mi novio y me dijo lo guapa que iba,que se llamaba Marcos, le conteste que gracias mientras que yo le dije mi nombre, continuo hablandome con una clara intencion de ligar conmigo, con absuluto descaro mirando mi pecho y mis piernas hasta donde dejaba ver el vestido, mi tono blanquito de piel tubo que demostrarle mi sonrojo lo que parecio darle mas ganas de entrarme y sin preguntarme le pidio al camarero dos chupitos con un poco de amor, me extraño ese tipo de chupito pero que iba a saber yo que no habia salido de cordoba nunca…

Mis ojos solo iban de sus brazos a sus pectorales marcados aun con una camisa que parecia apunto de reventar y su cara… estaba embobada observandolo cuando el camarero puso los chupitos, me bebi el mio rapido sin ni siquiera pararme a observar de que estaba echo, aun que parecia ser tequila con algo amargo y conteste que tenia 18 años conforme me pregunto la edad en lo que me vio beberme el chupito.

– Es la primera vez que veo a una chica tan joven en un local como este

+ Que le pasa a este local? Conteste

– Bueno ya sabes, los tipicos locales de vera, aqui entras en calor… conoces gente segun tus gustos sexuales… y acabas en casa o en club de al lado

+ Pues como en todos los pubs no? Jajaj

+ Que tiene de especial el club de al lado?

– bueno ya sabes… te he visto con tu chico, no habeis venido a probar la expecialidad de vera?

Me sonroje al escucharle hablar de mi chico puesto que no me habia acordado de el mientras hablaba con el, me volvi a poner roja como un tomate y conteste sin prestarle mucha atencion que no sabia a que expecialidad se referia mientras intentaba encontrar a mi chico con la mirada donde se situaba el baño.

– vera es una ciudad nudista y liberal, el hotel de hay aqui al lado en de ese tipo, y el club que te digo es un local swinger, la gente viene a estos pubs antes de entrar al club… para conocer gente y entrar en calor

Mi cara debia ser un poema, estaba sonrojada, un extraño calor me ardia en el cuerpo y notaba mi boca seca y pastosa, no sabia que decir ni hacer , me notaba incluso un poco mareada, de golpe el chico me solto un comentario que me hizo prestar toda mi atencion en el cuando dijo que le encantaba el tanga rojo que llevaba.

Mire hacia mis piernas y observe que ya no estaban cerradas entre si impidiendo que se me viese todo, sino que sus rodillas habian entrado entre las mias y estaba abriendo mis piernas de par en par, lo que hacia que mi vestido estuviese lo suficientemente subido como para que me pudiese observar perfectamente, tanto el como todo el local, intente cerrar las piernas, pero no tenia fuerzas en ellas y menos aun con sus piernas en medio, asi que me baje el vestido rapido, mirando alrededor por si alguien mas lo habia visto o incluso mi novio me veia en esa situacion. El chico se puso de pie entre mis piernas separadas lamio un papelito que saco del bolsillo, me agarro de la cadera y me beso, el beso fue tremendo, note toda su lengua humeda dentro de mi, dejando un extraño sabor amargo desagradable pero a la vez la fuerza del beso me tenia onubilada, notaba sus manos bajar hasta mis nalgas mientras las mias estaban impasibles en sus hombros, tocaba lo duros que eran sus musculos mientras el me subia el vestido por encima de la cadera, no era capaz de pensar en nada que no fuese esa lengua en mi boca a la vez que el ya tocaba mis nalgas desnudas y jugueteaba con mi tanga.

Dejo de besarme dejando un hilillo de babas entre nuestras dos bocas cuando cai en la cuenta de que mi tanga estaba por mis rodillas y el, bajandomelo sin que yo le opusiese ninguna resistencia hasta quitarmelo por completo.

De repente la cordura volvio a mi, empece a mirar de un lado a otro, nadie parecia fijarse en que estaba sentada con el vestido por la cadera y sin ropa interior, sin embargo yo si pude observar que habia chicas besandose con varios chicos, que las camisetas semitransparentes se habian convertido en piel desnuda a la vista de todos y a una chica tumbada en un sofa totalmente desnuda abierta de piernas mientras un chico le metia los dedos con fuerza ocasionando unos gemidos que podrian oirse en los pubs cercanos.

Que estaba pasando? Mi cuerpo ardia, no controlaba nada y sentia mi coño totalmente humedo con la situacion, mis vista iba de un ligar a otro cuando pude ver que mi novio estaba sentado en la barra, unos asientos mas adelante hablando con una morena despampanante llena de tatuajes mientras ambos me miraban sonrientes, al verlos senti una verguenza terrible, que habia hecho? , no me dio tiempo a pensar en nada mas cuando la morena le planto un beso a mi novio sin que este hiciese nada para evitarlo, me levante de golpe de la silla con intenciones asesinas lo que hizo que me introdujese hasta el fondo el dedo de Marcos, no me habia dado cuenta que me estaba tocando mi coño mientras yo flipaba con el panorama.

Al sentir ese enorme dedo dentro de mi tube que agarrarme fuerte a el para no caerme puesto que mis piernas eran un completo flan, mis manos aruñaban los gruesos brazos de ese mounstruo mientras mi mirada seguia fija en mi novio que ahora me miraba directamente mientras la chica le besaba el cuello.

Mi cuerpo ardia, no sabia que pensar no podia contener el placer, ni siquiera sabia si podria liberarme de los brazos que me apresaban, el sonido de mis gemidos hacia que la gente empezase a mirarme pero no podia evitarlo, movia ese dedo dentro de mi haciendome extremecerme a cada cambio de velocidad, con su otra mano me agarro una pierna y me la levanto todo lo alto que mi flexibidad cedio, la gente que estaba sentada detras de mi podria ver todo mi culo desnudo y los que estuviesen delante observaban abiertamente como estaba marturbada y no solo eso… sino que estaba chillando, mis gemidos pasaron a chillidos que no podia evitar cuando de golpe note unas ganas inmensas de hacer pipi y sin poder evitarlo lo note todo salir… parecia una catarata que a cada embestida de ese grueso dedo dejaba salir un orgasmo brutal terminando con que mis piernas dejasen de funcionar y acabase en los brazos de ese desconocido que acababa de darme el mayor orgasmo de mi vida.

Me sento en la silla, me bajo el vestido y con un codo apollado sobre la barra intentaba recuperar el aire mientras miraba a mi novio que tenia su vista fija en mi… y me sonreia.

Mi novio y la chica se acercaron a donde estabamos nosotros mientras charlaban y reian, yo estaba muerta de verguenza, todo el local me habia visto correrme… el suelo estaba lleno de mis fluidos y a mi novio parecia no importarle lo que acababa de pasar mientras k marcos aun tenia una mano en mi pierna y me acariciaba como al que le dan la enhorabuena por su trabajo.

Fer(mi novio)- estas bien ana? Parece que lo has pasado muy bien

Me volvi a sonrojar… o quizas ya estaba sonrojada de continuo, no le conteste sino que volvi la cara y me quede mirando hacia el suelo,

Carla- hola guapisima, yo soy Carla encantada

Me dio dos besos mientras yo la miraba con una mirada asesina que debio de notar con lo que dijo – soy la novia de este cabezon señalando a Marcos, mi mirada se fijo en Marcos y este me miro sonriendote mientras seguia acariciandome, esta vez con su mano cerca de mi nalga.

Marcos- supongo que tenemos que explicarte cosillas… tu novio se puso en contacto con nosotros por una pagina de contactos swinger y nos hablo de vosotros como pareja… que llevabais poco juntos pero que estabais probando cositas y queria ver hasta donde podiais llegar y eso y la verdad que a nosotros el reto y la apuesta nos parecio bien.

Que reto y que apuesta le solte tajante mirando a Fer.

Carla: fer reto a marcos a que no era capaz de hacer que te desinibieras hasta el punto de entrar a un local swinger. Y se aposto una cosa que ya te contare…

Cogi mi bolso de encima de la barra y sali enfadada, caminando hacia la calle, iba con tacones pero me habian vuelto las fuerzas, Fer me paro en la calle y me dijo que que pasaba, que no habia nada de malo, que no estaba celoso, a lo que yo le conteste que yo si, que esto no era lo que yo queria ni tenia pensado, me heche a llorar tras verlo mirarme con esa cara con la que me mira cuando me dice que me ama, y le pido perdon desconsolada que no sabia como habia podido perder los papeles de esa forma, que todos me habian visto, que era una guarra… el me cogio de la mejilla y me dijo:

Fer- era exactamente lo que queria que hicieras, te conozco y se que nunca te hubieses abierto asique le dije a marcos que te diese un poco de alguna droga que ellos tomen y sea de fiar.

Le pegue un guantazo y le dije que porque habia echo eso, a lo que respondio, quiero verte disfrutar, alzo mas el tono, quiero verte correrte a diario, seguia alzando el tono mientras me arrinconaba contra la pared, me agarro la cabeza con una mano y pego su boca a mi oreja:

Fer- quiero ver siempre a la guarra que va sin bragas, que tiene el coño chorreandotras correrse con un desconocido en mitad de un pub, quiero que seas mi zorra y no me digas nunca que no a nada.

Tras esto me dio un beso, me agarro del cuello, me dio la vuelta y me puso contra la pared.

Senti como me subia el vestido,y dejaba mi culo a la vista en mitad de un callejon entre dos pubs donde la gente pasaba y olia a pis posiblemente de los borrachos.

Note como se sacaba la polla y me la metio de un golpe, al entrar la enorme polla de 18cm de mi novio dentro de mi sin preliminares ni nada aparte de un grosor considerable me hizo soltar un chillido que fue amortiguado por la mano de mi novio.

Mientras me follaba me hacia preguntas, que yo casi no escuchaba… solo sentia un enorme placer, me habia corrido como una loca, pero un dedo no es lo mismo que la enorme polla de mi novio, y menos con la excitacion que ya traia, mi coño lo dejaba entrar perfectamente, lo tengo muy cerradito segun mi novio pero estaba inmensamente mojada.

– te gusta?

+ me encanta

-te a gustado lo de hoy?

+ ….

– que si te a gustado lo de hoy? (Tras aumentar el ritmo de las embestidas)

+ sii

-vas a ser mi zorrita

+siii

-prometemelo

+te lo prometo

-vas a hacer siempre lo que yo te pidaa

+siii ( empiezo a gemir descontroladamente y estoy apunto del orgasmo)

-estonces vas a follarte esta noche a Marcos y no pararas hasta que el quede totalmente satisfecho

+ eso nooo ( sigo gimiendo, y me quedan algunos segundos para correrme, pero el se detiene, me agarra del pelo y me dice, no vas a hacer todo lo que te pida? Me lo has prometido

– vale lo hare, pero no pares

Tras varios segundos de embestidas acabo corriendome, totalmente extasiada me apoyo contra la pared, me toco el coño mirando si mi novio se a corrido dentro y observo que aunque esta muy empapado no es su semen sino mi corrida y me pongonde rodillas para chuparsela con intenciones de hacer que se corra, pero el se la guarda en el pantalon y me dice, si quieres mi leche antes tienes que cumplir tu promesa.

Vuelvo a sonrojarme y a darme cuenta de la situacion en la que estaba, porque queria que hiciese eso? Como iba a conseguirlo? Y lo peor de todo… por que me estaba excitando tantisimo la idea?

Fer me cogio de la mano y me llevo dentro del pub de nuevo, pero en la entrada nos encontramos con Marcos y Carla y nos dicen que pensaban que nos habiamos ido, a lo que Fer le contesta, no, estaba hablando, ana estaba muy nerviosa pero dice que contigo Marcos se atreve a cualquier cosa, miro enfada a mi novio por ser tan tajante y dejarme asi delante de dos desconocidos, y veo a Marcos mirarme sonriente, aparto la mirada rapidamente de la verguenza y me fijo en carla que me mira, se hacerca a mi y me da un beso con lengua.

Vuelvo a arder por dentro… siempre eh querido besar a una chica… pero estan siendo demasiadas cosas de golpe… esta esto bien? Pienso

Se rompe el silencio con unas risas de los chicos y empiezan a hablar entre ellos

Fer- bueno que plan llevais?

Marcos- os hace que entremos en el club? Asi probais otra cosita nueva

Yo- no sera demasiado para el primer dia?

Carla- no te preocupes, el club es como este pubs, abra mas gente y eso pero es todo muy respetuoso, nadie te va a obligar a hacer nada que tu no quieras o desees, me dice con cara picarona

Tras un rato de charla deciden ir para el club, lo veo a 200 metros… y aun asi lo veo muy cerca… pongo de escusa los tacones para ir mas despacio… siento unos nervios terribles y me pongo a pensar en silencio mientras ellos hablan por el camino sobre cosas del club.

Lo voy a hacer? Miro a marcos y pienso… joder es que esta tan bueno… pero y si luego fer me deja? O y si no hago algo bien? Me tiemblan las piernas…

Llegamos a la entrada del club donde nos atiende una chica mayor, ve a marcos y habla con el, nos explica que normalmente son 40 euros por pareja con 2 bebidas para cada uno pero que por ser amigos de marcos y la primera vez …que nos invitan.

Entramos y esta todo bastante oscuro, aunque parece una discoteca normal y corriente con alrededor de 20 personas, con barras de stripper pero salvo eso nada fuera de lo cumun, no enseñan mas salas donde vemos sofas con teles en las que se visualizan peliculas porno donde hay un par de parejas jugando entre ellas practicamente desnudas, subimos unas escaleras donde hay una cama roja con barrotes donde nos dicen que es la habitacion para jugar con los chicos que vengan solos, y junto a ella hay un gloryhold que es un pasillo donde hay agujeros donde puedo ver varias pollas de diferentes tamaños atreves de ellos pero no veo de quienes son, los chicos se rien aunque a mi solo me pone mas nerviosa.

Tras esto nos enseña una sala grande donde hay varias camas de diferente tamaños donde podemos ver a varias parejas follando sin pudor alguno, algunas se fijan en nosotos mientras continuan follando y nos invitan a unirnos, con lo que mi novio me mira ilusionado y le respondo con la cara que no de coña…

Nos vamos a la barra a pedir y me pido una vozka rojo con fanta de limon y le digo ironicamente a Marcos que se pida otros dos chupitos de esos que sino no me veia soltandome ahi… me mira sonriente y carla me coge de la mano y me dice… vamos al baño que me hago pis.

La sigo y entramos en el baño, me pongo a hacer pis mientras carla me mira el coño eh intento taparmelo con las manos disimuladamente.

Carla- le va a encantar a Marcos el triangulito de pelitos que tienes en el coño, los labios si los tienes totalmente depilados no?

Yo muerta de verguenza le digo que si… y aprovecho para preguntarle si no le da miedo o celos que Marcos haga algo conmigo, con lo que me responde que no, que son totalmente liberales, que ella disfruta viendolo disfrutar y que si yo la dejo… ella tambien quiere follarse a fer… a lo que le respondo que nose aun… que yo sigo siendo muy celosa y me da corte…y miedo…

Ella sonrie se hacerca a mi mientras aun sigo en la taza y me besa, pasa su lengua por mi cuello y mi oreja y me dice… no te preocupes, tu solo disfruta hoy, no hare nada que tu no quieras que haga, y ahora voy a hacer una cosa asique relajate.

Empieza a darme mordisquitos en el cuello y besarmelo mientras con sus manos me sube el vestido lentamente hasta quitarmelo por completo y dejarme solo con el sujetador rojo, coge su bolso y saca dos pastillas, se las mete en la boca y me besa metiendome una en la boca y tragandomela deseosa de que lo que eso sea me haga perder los nervios y el miedo a lo que pudiese llegar a pasar…

Me quita el sujetador con una mano mientras me besa y pasa su lengua por mi nariz y frente… aun no a hecho efecto la droga pero estoy completamente excitada, mis manos rozan sus piernas aunque no me atrevo a mas por lo que ella toma la iniciativa y se quita su vestido de lentejuelas y lo tira al suelo observando que no tiene ropa interior, poniendo frente a mi dos perfectas tetas operadas con unos pezones puntiagudos marroncitos, no podemos ser mas distintas, ella morena con un cuerpo bronceado y yo completamente blanquita, se abalanza sobre mi y empieza a comerme las tetas, centrandose en el pircing que tengo en mi pezon derecho y jugueteando con el, lo que siempre me a puesto muy cerda pero esta vez estaba siendo con una mujer, mis manos se posan en tetas mientras que las suyas en mi coño y me mete dos dedos sin hacerme daño alguno aun teniendo dos enormes uñas postizas

Joder estas empapada me dice.

Bueno es que acabo de hacer pis y no me eh labado aun…

Cariño esto no es pis esto es que estas cachonda como una mona…pero no te preocupes que yo te dare lo que quieres…

Sin previo aviso me agarro de las piernas me levanto hasta el borde de la taza y se puso de rodillas hundiendo su cara en mi coño dandome un placer inmenso… llevaban varias semanas sin comerme el coño por no haber podido ver a mi novio y ella lo estaba haciendo mucho mejor que el, no dure ni dos minutos cuando un orgasmo brutal hizo me corriese en su boca sontando dos chorritos de squirt que no parecio molestarle seguir lamiendo…

Se levanto y me dio la mano para ayudarme a levantarme con los tacones cogi el sujetador para ponermelo pero carla me dijo que no, que no me preocuoase que nos ibamos a poner otras cositas, yo obedeci… nose si por el placer del orgasmo o el efecto de la droga pero estaba feliz y me apetecia fiesta… y despues de que me coman el coño siemore me apetece que me penetren… asique ahora estaba muy cachonda.

Carla me llevo a unas taquillas en el baño donde dejamos nuestra ropa, estabamos ambas completamente desnudas salvo por los tacones, entraban chicas en el baño a cambiarse o a hacer pis pero no nos prestaban atencion, carla saco un modelito de un embase de plastico y me lo dio para que me lo pusiese y ella otro parecido, tubo que ayudarme para ponermelo pero tras esto pude obserbar que era un encaje negro que transparentaba mis pezones y dejaba mi culo y mi coño completamente al aire, el de carla el encaje bordeaba sus tetas dejandolas completamente visibles al igual que su coño y culo completamente rasurados.

Que nos ponemos debajo le pregunte, sonriente me dijo que nada pero que me apoyase contra la pared que iba a ponerme una cosa, no sabia a que se referia pero mi cuerpo ya obedecia sin mas… me apoye contra la pared y saque el cuelete siguiendo lo que ella me ordenaba, la note pasar sus dedos por mi coño de nuevo y tras esto dirigirlos a mi culete, alarmada mire hacia atras y me dijo que me calmase que no me iba a doler, empece a notar algo frio entrando en mi culo, que no me dolio aunque no termino de ser agradable.

Cuando termino me mire en el espejo y vi que me habia metido una joya anal y carla le dio a un botoncito y empezo a vibrar y ponerse de colorines como si fuese un jueguete de feria, ella se metio otro y conforme lo hizo me agarro de la mano y me dirigio a la puerta, conforme salimos pude ver que el local se habia llenado, habia muchisima gente, vestida desnuda, folland, nos dirigimos hacia la zona de la discoteca donde la gente bailaba y estaban nuestros chicos, al vernos se quedaron boquiabiertos mirandonos de arriba a bajo, le di un beso a fer y cogi mi copa para bebermela casi de un trago, tenia mucha sed y estaba muy caliente… note a Marcos mirarme y tontorrona le guille un ojo a lo que el sonrio, carla se saco el jueguetito del culo y se lo enseño a los chicos.

Carla- mirad chicos, ana y yo llevamos esto metido, y estos son los mandos que lo manejan, con este boton cambiais la luz, con este la vibracion y con este hareis y que se alargue y acorte follandonos el culito, mi cara fue un cuadro… mi culo era virgen y si cuando el juguete estaba pequeñito ya molestaba… cuando se alargase?

Fer- carla como has conseguido que ana te deje que se lo metas por el culito? Ami no me deja nada, aun es virgen

Carla- una chica tiene sus truquitos

Yo- bueno tecnicamente con el juguetito ya no soy virgen

Marcos- tecnicamente si, pero no te preocuoes que hoy le daremos solucion.

Me volvi a sonrojar y pasar un poco de miedo… pero algo en mi cuerpo me tenia muy cachonda, me apetecia tocarme ahi mismo, estaba siendo un desafio contenerme.

Carla le dio los manditos a los chicos, me dio la mano y nos subio a un podio a bailar, al principio me dio corte bailar asi de desnuda puesto que la gente nos miraba estando en el podio, pero tras varios minutos y tener a carla bailando al lado me hizo deshinibirme y darlo todo, bailaba junto a Carla me agachaba enseñando mi coño y mi culo a todos los que quisiesen mirar, hacien twerking, ya era yo la que buscaba los besos de Carla, rozaba sus perfectas tetas y me atrevia a lamerlas, con su pezon en la boca note como el la joya anal empezo a alargarse y a vibrar intensamente y sin querer le mordir el pezon soltando ella un pequeño chillido.

Le pedi perdon pero mas que enfadada parecia cachonda y me dijo, ponte de rodillas ahora mismo, dubitativa le hice caso y subio y apoyo su pierna contra

La barra de baile dejando su coño totalmente expuesto antes mi cara, eia sus labios oscuros sobresaliendo brillantes por la humedad con las luces de los focos y podia ver el juguete del culo moviendose con la vibracion.

Sin pensarmelo dos veces me arme de valor y meti mi boca de lleno, metiendo sus labios en mi boca y saboreandolo completamente, el sabor era extraño pero para nada desagradable, carla me agarro del pelo y dirigio mi boca a su clitoris aprentando fuertemente mi cabeza contra el, pegaba fuertes lametones tal y como a mi me gusta y de golpe note salir sus fluidos por toda mi boca bajando hasta mis tetas, me recompuse y la gente empezo a aplaudirnos lo que me dio un golpe de verguenza que rapidamente se rectifico con un aumento de potencia del juguete y un estiramiento aun mayor que me dificulto hasta bajar del podio.

Volvimos con los chicos sudadas, mojadas, cachondas y ellos charlando tranquilamente, me pedi una copa la cual me duro otro par de tragos…

El cuerpo me temblaba, el coño me ardia y el juguete del culo no me daba placer oara llegar al orgasmo pero me mantenia en un constante sin vivir, no podia contenerme mas… mire a marcos, sus brazos brillaban con su sudor, sus tatuajes me erizaban la piel, solo de imaginarmelo agarrandome el cuello y haciendome suya…

Estaba mirando como bailaban otras chicas en el podio cuando me acerque a el le agarre la cara y le di un beso, ya no me importaba nada, estaba fuera de mi, queria que me follase ahi mismo, me acerque a su oreja y le dije, follame.

Me dio la vuelta y me puso mirando a fer mientras lamia mi cuello y rozaba mis tetas y me dijo, si quieres que te folle… antes tienes que decirle a fer que puede follarse a carla.

Intente contenerme… no queria que eso pasase me daba miedo… pero marcos seguia tocandome… apretaba su paquete contra mi culo simulando como me follaria mientras lamia mis orejas derritiendome por completo… cuando sin poder remediarlo pegue un grito diciendo fer follate a carla por favor el cual pudieron escuchar bastante gente aun con la musica… carla cogio a fer y se lo llevo a las habitaciones de arriba mientras k marcos me dio la vuelta y empezona besarme mientras me cogio en brazos, era una muñeca en su brazos.

Mientras me subia cogida en sus brazos hacia las habitaciones de arriba yo intentaba rozar mi coño contra su pantalon fuera de mi y me llevo a la habitaciln de los barrotes, donde dentro de ella habia una cama totalmente bordeada de barrotes donde dentro de ella solo estabamos el y yo pero alrededor habia incontables tios metiendo manos y las pollas atraves de los barrotes intentando cazar algo, pero habia un par de metros de distancia que permitian que si estabas en medio de la cama nadie pudiese tocarte.

Conforme llegamos me tumbo en la cama y mientras el de pie se quitaba la camiseta y los zapatos.

Marcos- tienes que saber un par de cosas

Yo -dime

Marcos-al principio te va a doler… pero prometo que te va a gustar

Dijo tras terminar de quitarse los calzoncillos y poner frente a mi el pene mas enorme que eh visto en mi vida, era como mi brazo y grueso como un brazo de tubo, colgaba sin terminar de estar empalmada, con lo que se escucharon comentarios de los tios de alrededor diciendo, joder este se la carga, la va a reventar, entre otros que se intentaban que me acercase a ellos para tocarme o chuparsela.

Yo estaba asustada a la vez que infinitamente cachonda, mi cuerpo deseaba follar con ese hombre y que me reventase asi que me arme de valor y sacando mi chuleria le dije con cara de guarra mientras me ponia a 4 patas poniendo su polla muu cerca de mi cara y mirandole a los ojos, y que es lo segundo que tengo que saber???

A lo que me agarro del pelo con una mano, su polla con la otra y me dijo? No me gusta que me digan que no a nada, ni que pare bajo ninguna circunstancia, estamos?

Abri mi boca , saque la lengua y le fije que si con la cabeza , con lo que consegui que de un golpe por fin su polla entrase en mi boca aunque no me entro ni la mitad, estoy acostumbrada a hacer garganta profunda con la polla de mi novio pero esta era mas gruesa y me resultaba mas dificil que atravesase mi garganta y ni que decir tiene que habia mas longitud que tragar…

Aunque el me daba buenos estacazos y me apretaba para que entrase no podia, saco su polla llena de babas, me agarro del pelo y me llevo hasta el borde de la cama donde estaban los barrotes, me señalo una polla la mitad que la suya y me dijo metete esa entera en la boca, tienes k adaptar la garganta, yo me quede tiesa y pregunte… que?

A lo que el respondio con un fuerte azote en el culo que lo señalo para toda la noche, y dijo que hagas lo que te digo zorra, sin poder pararme a pensar lo hice me la meti en la boca , la lubrique y empece a introducirmela al fondo de la garganta hasta notar los pelos del desconocido en mi nariz, el cual me agarro la cabeza y empezo a follarme la garganta sin compasion mientras marcos empezo a jugar con mi coño, metiendome a 4 patas un dedo seguido de otro y con el mando del jueguete cambiaba las vibraciones.

El desconocido empezo a berrear y note como se vaciaba sin permiso dentro de mi garganta sin poder hacer nada para evitarlo, tras sacarla intente recobrar en aliento para recriminarle que hiciese eso cuando otrp tio ocupo su puesto, me agarro del pelo y me la metio en la boca, la tenia bastante pequeña con lo que pude subir la mirada y observar que era un hombre muy mayor, de unos 60 años, no duro ni 30 segundos cuando se corrio en mi boca, al tenerla tan pequeña no llego a la garganta y conforme la saco intente escupirlo todo, no me dio tiempo a terminar de escupirlo cuando marcos me cogio en brazos me puso boca arriba en la camay mi cabeza en el borde, coloco su polla en mi boca y me dijo, coge aire y saca la lengua, obedeci sin rechistar mientras notaba las manos de los desconocidos tocar toda mi parte izquierda llegando hasta el coño, tras varios intentos de penetrar mi garganta acabo consiguiendolo, metiendo cada vez mas a fondo sacandola cada 30 segundos mas o menos para que respirase y volviendola a meter hasta k termine notando sus huevos en mi nariz con lo que supe que estaba toda dentro, lo que me puso muy cerda, puse las manos en las nalgas duras de marcos y le indique que me follase la garganta fuerte lo que hizo durante varios minutos intermitentes para que pudiese respirar.

Termino tumbandose en la cama, con esa polla mastodontica mirando al cielo y me dijo, metetela en el coño, a lo que accedi como si a un bebe le diesen un caramelo, me sente encima de el, roce su polla con mi coño pensando que no estaria humeda… dandome cuenta de que estaba incluso mas humeda que el que la tenia llena de babas, me agarro el culo con las dos manos y me saco el jueguete de un golpe, me lo enseño y me dijo, esto molesta ya, pude observar que se habia convertido en un tamaño considerable de unos 14-15 cm dentro de mi culo, sin mediar palabra lo dirigio a mi boca y me lo metio hasta el fondo, y me dijo, como lo sueltes en algun momento tendras un castigo y ahora metete mi polla.

Coge su enorme polla y la dirigi hacia mi coño, la situe en la entrada y empece a hacer presion a la vez que hacia movimientos con el culo para intentar dilatar mi coñito, marcos me agarraba las tetas con las dos manos mientras le pegaba fuertes lametones y mordia mis pezones, meti por fin la cabeza de su polla dentro de mi coño lo que me hizo sentir un placer enormey segui jugando con ella poco a poco, cuando note las manos de marcos agarrando fuerte mi culo, y me dijo, ana, te acuerdas que te dije que te iba a doler? Recuerda que luego viene el placer…

Dicho esto me agarro aun mas fuerte y subio su pelvis fuerte metiendome su polla de un golpe hasta el fondo, notando como se habria paso por todo mi cuerpo, sin poder remediarlo solte un chillido con el que se me cayo el juguete de la boca, lo cogi corriendo y me lo meti en la boca intentado que no se diese cuenta, pero antes de hacerlo saco su polla y volvio a meterla dando otro estacazo, lo meti en la boca y cai rendida en su pecho dejandome hacer, fue aumentando el ritmo, sin pausa, empezo a taladrarme, mis ojos estaban en blanco, notaba que se me caia la baba a trabes del juguete, mis manos se agarraban a los brazos de marcos y los orgasmos no cesaban, mi cuerpo estaba a su disposicion comletamente hasta que termine notando un inmenso chorro caliente al fondo de mi, se quedo jadeando cansado de la inmensa follada que acaba de darme sin descanso y yo tumbada sobre el con la polla aun dentro, empezo a desempalmarse lo que me hizo reaccionar, me incorpore, me puse recta sobre el y empece a cabargarlo como mejor sabia, me la metia y me la sacaba casi por completo, lo escuchaba gemir de placer, yo habia perdido la cuents de las veces que me habia corrido, ya lo tenia muy sensible pero aun asi me apetecia darle placer a marcos asique continue dando lo mejor de mi.

Marcos me agarro del cuello y me pregunto que queria que se corriese con lo que le respondi con la cabeza que si sin poder hacerlo con la boca por el juguete, me saco el jueguete de la boca y me dijo, solo me puedo correr dos veces, y la segunda corrida va dentro de tu culo.

Mis ojos se abrieron de par en par, como iba a entrar eso en mi culo? Si me habia costado por el coño y mi culo aun era virgen

Aumente el ritmo de mis embestidas, metiendome todo lo que podia su polla por el coño intentando que se corriese para evitar que lo intentase con mi culo, pero me agarro del cuello y me dijo, tienes dos opciones, yo te la voy a meter en el culo de un estacazo, puedes dilatarte el culo con los tios que tienes alrededor o meterte mi polla directamente, que eliges?

No me apetecia nada follarme a esos desconocidos aunque la posibilidad de la dilatacion era muy tentadora, pero iba a perder la virginidad de mi culo con un cualquiera? Ni de coña

Me toque el culo aun con la polla de marcos dentro de mi coño e intente dilatarmelo con los dedos, entraban facilmente gracias a llevar toda la noche el juguete, y tenia el culo super lubricado de todos los orgasmos que habia tenidos, de hecho toda la cama estaba empapada, aun asi toda lubricacion era poca… asique saque la polla de marcos y meti mis dedos en mi coño, enseguida salio toda la leche de su corrida, la cogi con los dedos y la lleve a mi culo ante la vista de marcos y todos los que estaba alrededor cogi el jueguete y presione dentro de mi culo para introducir la leche de marcos todo lo posible ya que su polla llegaria muy a fondo, asique ahi estaba yo, masturbandome delante de mas de 10 tios tras un pequeño y sorprendente orgasmo anal , puse mis manos agarradas a los barrotes poniendo mis tetas entre ellas para que cualquiera pudiese chuparlas y tocarlas, necesitaba toda la excitacion que pudiese, mire a marcos , le puse mi culito en bandeja a 4 patas y le dije, es todo tuyo, marcos no duro ni un segundo en ponerse en posicion, hacerco su polla a mi entrada virginal y de un golpe metio la cabeza de su polla, lo que me hizo soltar un enorme chillido que atrajo a mas gente a mirar lo que pasaba alli, marcos hacia presion intentando meterla sin exito mientras yo estaba siendo sobada y pollas masturbandose delante de mi intentando acercarlas a mi boca, marcos enfadado les dijo a los tios, oye necesito lubicracion, correros en ella k use vuestra leche, algunos pasaron de el y siguienron sobando pero otro ni se lo pensaron y empezaron a correrse donde pillaban en mis manos, pelo, tetas , cara, marcos recogia leche de donde pillaba sin que le diese asco alguno y se untaba la polla , se coloco en posicion y dijo, ya viene rubia, y de un golpe la note entrar hasta el fondo, solte otro chillido monumental y varias risas de la gente, y marcos sin comoasion ninguna empezo a follarme como un loco, hacia tanta presion sobre mi que mi cabeza ya estaba entre los barrotrs y los tios se corrian en mi cara, mis gemidos eran inevitables asique no podia cerrar la boca y los chorros de leche entraban sin ton ni son, que resbalaban por mi boca, marcos aumento el ritmo y la fuerza y yo casi desmayada era incapaz de hacer nada, algunos chicos metian sun pollas en mi boca, me escupian o insultaban, algunos incluso se limpiaban la polla con mi pelo, la ultima polla que entro en mi boca era de un tamaño considerable, me follaba la garganta metiendo el semen de los otros hombres , cuando le mire la cara me di cuenta que era fer, duro unos instantes antes de correrse al fondo de mi garganta, marcos unos segundos mas tarde pego sus ultimos estacados, los mas fuertes terminando por correrse dentro de mi culo, sacandola de un golpe , lo que me hizo sentir una extraña sensacion de vacio tras la cual un cansancion monumental me hizo caer desmayada…

Me desperte al dia siguiente en una cama desconocida junto a fer, carla y marcos nos habian dejado un apartamento suyo y me habia traido aqui despues de ducharme… fer y yo hablamos durante todo el dia y decidimos que esa experiencia… tenia que volver a repetirse por el placer de ambos… asi que decidimos entrar en el mundo swinger, esta fue mi primera experiencia, pero no la ultima, espero que sigas leyendo mi relatos. Un beso. Anitandaluza

Martha mi esposa tiene 37 años mide 1,65 pesa 62 con unos pechos bien formados blancona cola bien firme.
Somos una pareja que vive 10 años juntos no tenemos hijos, llevamos una relacion abierta , mi esposa tiene amantes con mi consentimiento
Un dia le llama su novio qie vivia en otra ciudad, para decirle que le dieron vacaciones en su trabajo por dos semanas y qie venia a pasarlo en nuestra casa.
Llego el dia que tenia qie llegar mi esposa muy alegre se ducha, depila su hermosa vagina mientras yo la observo como elije su tanga color blanco con encajes brasier igual blancos una bluza escotada mostrando sus enormes pechos un pantalon bien ajustado resaltando su figura y su enorme cola, unas botas con tacones altos.
Sslimos en nuestro auto a recogerlo del aeropuerto mi esposa se baja para resivirlo con un abrazo y un beso apasionado mientras yo observo desde mi auto me saluda porque ya nos conociamos el era su primer marido msyor que ella con 10 años, mi esposa se sento en la parte trasera del auto con su ex esposo no paraban de besarse y tocsrse todo yo estava muy exitado biendolos de rato en rato, fuimos a cenar los tres juntos ellos agarrados de la mano y yo al lado como un amigo mas de ellos acave de imediato de cenar y les dije que le esperare en el auto.
Mi esposs se quedo un rato mas bebieron vino yo le observaba desde afuera a mi esposa muy contenta y romanticos eso me exitava demaciado ver a mi esposa con el hombre que la iso mujer por primera vez.
Tardaron demasiado luego les lleve a pasiar por la ciudad, ya en la noche nos fuimos a bailar a un local donde yo me sente y ellos bailaban bien cachondos luego decidimos retirarnos a nuestra casa y ahi vino lo mas interesante, nuestra casa tenemos varios cuartos y un pasillo donde conecta a la sala y comedor, ese dia yo le deje que disfrutaran los dos me fui a otro cuarto de al lado el ocupo mi lugar en nuestro dormitorio y cama matronial.
Apenas entramos y ella se lanza sobre su ex el la carga asta el dormitorio me pide permiso para entrar yo le digo que siga adelante toda tuya esta semana dejan la puerta abierta para que yo observe empiesan a besarse le saca rapidamente la blusa ella le enpiesa a desabrochar su pantalon toca su verga que estava bien dura empieza a mamarcela la tenia grande ella decia que nunca olvidava la verga que la desvirgino cambiaron de posicion el empieza a besar su vagina ella bien exitada le pide que le aga el amor como siempre se lo asia cuando vivian juntos..
Luego el ssle un momento a tomar agua pasa por el pasillo desnudo con la verga bien parada mi mujer aprovecha para salir a donde estava yo en tanga pechos al aire y sus tacones quee me gustava que no se saque al momento de coger, yo me estava masturvando con el espectaculo ella entra donde estava yo y empieza a chupar mi verga un rato y me dice que esta noche dormire con mi novio asta que el retorna y se la lleva otra vez.
Ya bien exitados en la cama le pone sus piernas al hombro y empiesa penetrarle mi esposa grita de plaser estavan un buen rato luego le pone de custro asta que ella le pide que le de por atras eso me impresiono porque ami no me deja que le de por el culo estubieron un rato adta que el termino se acostaron abrazados de cucharita mi a mi esposs sstisfecha,
Yo me acoste a dormir y de un rato vuelvo a escuchar como cogian otra vez, estuvieron cogiendo toda la noche ya al medio dia se despertaron y yo les prepare el almuerzo.
Mi esposa me da un beso y me da las grasias por todo continuara….

Aún no me podía creer que me lo hubiera pedido. Antes de aquella ocasión todo eso hubiera sido inconcebible, a pesar de lo mucho que te deseaba, de las muchas veces que te imaginé desnuda, y de tantas formas posibles como un hombre podría imaginarse a una mujer tan hermosa como tú.

Su petición era razonable: querían tener un hijo y no podían lograrlo, necesitaban a alguien de confianza, alguien a quien amaran y que él los amara. La respuesta a la pregunta era lógica y había apuntado a mí.

Llegué a su casa a la hora acordada, nervioso, pues no sabía como funcionaría todo, Jorge estaba ahí, a un lado de ti. Traté de no mirarte mucho, a pesar de lucir tan hermosa: enfundada en aquel vestido floreado con el que tantas veces te había pensado. Te saludé con un casto beso en la mejilla. Era evidente que todos estábamos nerviosos, supongo que era algo natural ¿Cómo podríamos no estarlo?

– Bueno primo, gracias por venir, yo los voy a dejar solos, tengo cosas que hacer en la oficina. Quedas en tu casa – me dijo mi primo, antes de tomar su mochila y salir, no sin antes girarse y mirarme por última vez antes de irse – nuevamente: gracias; sabemos que es un gran favor – no supe qué decir, pero no tuve tiempo de pensarlo pues Jorge se marchó.

Al estar solos, nuestras miradas se encontraron. El nerviosismo que imperaba en nuestra inusual situación, nos hizo quedarnos quietos, observando al otro y sin saber qué decir o hacer.

– ¿Te ofrezco un vaso de agua?

– Sí, por favor.

Me quedé parado mientras me dabas la espalda y caminabas a la cocina, miré tu trasero tan respingado, pensando que en poco tiempo lo vería desnudo, frente a mí. Regresaste y mi vista se fijó en tu escote, mirando la sensual forma en que la línea entre tus senos se mostraba con un poco de descaro. Levantaste las cejas al ver en donde se posaba mi mirada. Nuestros ojos se encontraron y sonreímos. Dejé el vaso de agua en la mesa, sin haber bebido de él. No podía más, la tensión era demasiada.

Te tomé por la cintura y te besé. Rodeaste mi cuello con tus brazos y metiste tu lengua en mi boca. Te tomé del culo y te cargué, llevándote así a la cama, la misma que compartías con mi primo. Nos dejamos caer sin dejar de besarnos, abrazaste mi cintura con tus piernas mientras mis manos apretaban tus senos, los mismos que tantas veces había deseado.

Me levanté y me quité la camisa. Te sacaste el vestido dejando a mi vista un hermoso conjunto de lencería negra. Intentaste quitártelo, pero te lo impedí.

– Aún no.

Quedé completamente desnudo y me abalancé sobre ti, besando tu cuello recorriendo nuevamente tu cuerpo con mis manos, mientras tus dedos bajaban por mi espalda, recorrían mi cadera y luego se apoderaban de mi miembro. Un gemido escapó de mi boca cuando lo tomaste. Nos miramos de nuevo, el deseo refulgía en tu mirada, a la vez que mi glande tocaba tu entrada.

Empujé con suavidad. Abriste la boca y un gemido resonó a través de ella. Comencé a cogerte. Me abrazaste con ansiedad, tratando de que nuestros cuerpos estuvieran más juntos, mientras mi pene se deslizaba en tu interior, abriendo tus labios que lo besaban con cariño. El ritmo se fue de mi control y te cogía con desesperación. Al fin mi sueño se cumplía, al fin te hacía mía.

Me abrazaste del cuello, me llevaste a tus labios y nos besamos. Movías tus caderas con ansiedad, gimiendo con fuerza; mientras bajaba mi boca a tus senos, los besaba y los mordía; pasando mi lengua por tus pezones, escuchando el sonido tan sensual de tus gemidos; hasta estallar en tu interior al mismo tiempo que gritabas y tu cuerpo de contorsionaba, sintiendo el clímax del placer entre tus piernas. Nos besamos por un largo rato sin que me permitieras salir de tu cuerpo, sabiendo que aquello era solamente el inicio de una larga y muy excitante tarde.

No hizo falta mucho más. Bueno, en esta ocasión, lo cierto es que yo llevaba tiempo buscando un moro al que comerle la polla. Puse un anuncio en una de esas páginas de encuentros sexuales esporádicos y no tuve más que esperar. Solo hay que gastar la combinación de palabras adecuadas para llamar la atención de uno de esos empotradores norteafricanos. Y así fue, sólo tuve que añadir «sumiso» a la palabra «puta» para que me lloviesen las proposiciones. Pero por unas u otras cosas nunca me había animado a quedar con ninguno.

Aquel día era diferente. Puede que mi calentura, acumulada durante varias semanas, hubiera logrado dar al traste con la prudencia que me caracterizaba en estas cosas. Y es que al fin y al cabo, nunca sabes quién está al otro lado de la pantalla cuando contactas con hombres a través de estas vías. Pero la idea de polla mora llenándome la boca, pudo más esta vez.

Y es que, seamos sinceros, ¿a qué chupa pollas sumiso no le pone un buen moraco? Masculinos, con su fuerte hedor corporal, vello púbico amortiguándote la cara cuando tratas de ensartarte su nabo hasta la campanilla, etc. En pocas palabras, HOMBRES. Y no sé vosotros, pero a mí las pollas circuncidadas me pierden, y TODOS los moros la traen así de fábrica.

Es así como decidí agregar a mis contactos al último marroquí que me había enviado correo adjuntándome su teléfono. Bastó poco más de un día de charla telefónica para tenerlo en el bote. Por supuesto, y haciendo gala de mis dotes de seducción, me aseguré de recalcar lo zorra que yo era y lo mucho que iba a besarle los pies y a beberme su meado si así él lo deseaba. Ya veis, lo de «puta» y «sumiso» del anuncio no eran solo palabras vacías.

Fue así como me propuso enrolarme en su furgoneta para ir a comerle el cipote en cualquier callejuela oscura del polígono industrial del pueblo. Dicho y hecho, salí nervioso de casa. Y es que ¡joder, era mi primer moro! Llegué donde habíamos quedado, una ligera brisa me acarició la cara, estaba oscuro, y de vez en cuando me sorprendían los faros de algún coche. Mi nerviosismo iba en aumento, y segundo tras segundo me preguntaba si no me había equivocado y debía dar media vuelta rumbo a casa. Era una zona poca transitada, por lo que cada vez que veía unos faros me sobresaltaba. Finalmente vi aparecer una furgoneta y me incorporé un poco a la calzada para que pudiese verme y recogerme.

Al subir a la furgoneta mi calentura fue en aumento. Era un habitáculo destartalado, con una parte trasera llena de aperos de labranza y con el característico olor que desprenden las furgonetas que se utilizan para ir a trabajar al campo, una mezcla de sudor de macho, tierra, productos agrícolas y polvo. No lo podía creer, iba a comerle el cipote a un rudo jornalero marroquí en la furgoneta que gastaba para ir a trabajar a diario, cosa que, teniendo en cuenta lo zorra que soy, me resultó bastante excitante, puesto que ese sucio empotrador norteafricano no pensaba hacerme sentir especial en absoluto, ya que aquí el especial era él; era a él a quien había que satisfacer y mi boca era uno más de los agujeros que estaban disponibles para cumplir con ese cometido. Como buen sumiso me entusiasmó ese planteamiento.

Apenas podía mirarle a la cara, me embargaba la vergüenza, aunque atiné a soltar un tímido hola, al que el moraco respondió con lo que pareció más un gruñido que una palabra. Cuando apenas habíamos recorrido unos 40 metros aparcó y detuvo el motor. Él se encontraba delante de mí, notablemente ladeado y apoyado contra la puerta del asiento del piloto, tenía las piernas abiertas como para mostrarme cuál era el lugar que yo debía ocupar. Yo estaba muy cohibido, cosa que pareció divertirle, intenté hablar un poco, pero él no parecía estar por la labor, puesto que de inmediato me insertó el dedo índice en la boca, a lo que yo respondí haciéndole una mamada dactilar, anticipando lo que pensaba hacerle luego en la polla. Por fin pude fijarme bien en su cara. Barba negra ni corta ni larga, era guapo, de aspecto rudo e irreflexivo. Debía tener unos 35 años, era fuerte y con una pequeña barriga. Y llevaba gorra, la típica de promoción de la Caja Rural, lo que no hizo sino aumentar mi excitación, puesto que lo hacía parecer más campestre todavía. Noté que su dedo no estaba todo lo limpio que podría haberlo estado, lo que contribuyó a ponerme todavía más cachondo. No puedo ser más puta, ya lo sé.

Para estar más cómodos decidimos trasladarnos al asiento de atrás, donde tenía vía libre hacia su nabo moreno, ya que la palanca de cambio ya no supondría ningún tipo de obstáculo entre conductor y copiloto

Ya allí se quitó el sucio pantalón de chándal con parches en las rodillas que llevaba y se lo dejó puesto hasta los tobillos. El calzoncillo era de tipo slip, blanco y estaba ciertamente amarillento y acartonado, sobre todo en la zona que hacía contacto con su glande. Inmediatamente me incliné para lamer todo aquel mejunje, lo que hice en repetidas ocasiones, de arriba abajo y de abajo a arriba. Su sabor era saladísimo, producto de decenas de gotas de orina acumuladas a lo largo del tiempo que aquello llevaba sin pasar por la lavadora. Era delicioso. La humedad que mi saliva le proporcionaba empezó a juntarse con la que aquella polla producía. De repente, y sin quitarse el calzoncillo liberó todo su nardo, echando el calzoncillo a un lado. Por fin pude verle la polla al moro. No era muy larga, aproximadamente unos 17cm, pero sí que era bastante gorda, como un calabacín. El tronco era bastante oscuro mientras que su glande era morado pálido, y a pesar de que estaba embadurnado en mi saliva, tenía ese toque seco y ajado de las pollas circuncidadas. Esa clase de sequedad que a los hombres circuncidados les produce el roce constante del glande con la ropa interior. Era ligeramente curvada, y una mata de tupido pelo negro asomaba por el calzoncillo. Acto seguido se sacó también los huevos por abajo. Enormes, suaves y peludos. La boca se me hizo agua, el festín de polla podía comenzar.

Me andé sin miramientos, y como ya le había estado recorriendo el tronco con la lengua a través del calzoncillo, me metí el glande directamente en la boca, arrancándole un gemido ahogado a mi macho magrebí. Al principio yo llevé la iniciativa, mientras él se dejaba hacer. Luego, no obstante, inició un leve mete-saca, que confluyó con mi sube y baja, de manera que cada vez que ambas trayectorias se encontraban me tocaba la campanilla con el capullo. Estaba en el cielo. Ese moro estaba usándome sin ningún tipo de miramientos. Y lo mejor era que eso me encantaba. Mi deber era darle gusto, mi propio placer no importaba. El placer psicológico que obtenía satisfaciéndole a él era más que suficiente, de hecho lo prefería al placer erógeno obtenido al estimular manualmente mis propios genitales. Las zorras sumisas somos así. Y el macho cabrón que tenemos delante suele saberlo.

De repente me sacó el nabo de la boca. Estaba reluciente, curvo y grueso, y me azotó la cara y la lengua. Cambiamos de posición. Me acostó hacia arriba en el asiento, y quitándose por completo el pantalón y el calzoncillo, sentó su culo peludo en mi pecho, y me puso la polla en la cara, situando sus rodillas a cada lado de mi cuello y apoyándolas en el asiento. Desde esa posición empezó a follarme la boca como si no hubiese un mañana, mientras enrollaba el calzoncillo meado, húmedo y salado y me lo ponía en la nariz. La experiencia estaba siendo sensorialmente completa, ya que mi tacto, gusto y olfato estaban completamente ocupados en el marroquí.

Llegado el momento el moraco incrementó el ritmo con el que me penetraba la boca. La corrida era inminente e intuí que no me iba a avisar, lo que no era un inconveniente. Yo estaba a su disposición, no era más que un agujero, y un macho de ese calibre no tenía la obligación de avisarme, se corría y punto. Y así fue, sin parar de embestirme la cara y soltando toda clase de improperios en árabe, el moro me inundó la boca. Por supuesto, y como no podía ser de otra manera, me la tragué toda.

La fragancia que había quedado en el ambiente era brutal. Semen, sudor, culo y polla. Y el espectáculo, lejos de concluir, prosiguió con la que fue la práctica más humillante. Todavía sentado sobre mí, empezó a mearme en la boca. Por supuesto tragué como una cerda, y apenas se derramaron un par de gotas. La boca me sabía a tantos y tan distintos fluidos masculinos que yo estaba casi en éxtasis. El moraco debió notarlo, ya que decidió contribuir metiéndome el calzoncillo en la boca para que exprimiese el sabroso jugo resultante de la mezcla entre mi saliva, su orina seca y su líquido preseminal. Acto seguido se sacó los calcetines e hizo el mismo recorrido, primero me los pasó por la nariz y luego me los metió en la boca. El sabor a pies sudados y mugre era intenso, y me puso tan cachondo que decidí acudir directamente a la fuente, así que le propuse que él volviese a sentarse para poder chuparle los pies, lo que hice durante más de un cuarto de hora, lo suficiente para que su polla se hubiese recuperado desde la primera corrida y se produjese una segunda mamada. Esta vez abrió mucho las piernas y le hice una mamada clásica, arrodillado en el hueco de las alfombrillas y con mis manos apoyadas en sus rodillas. Se la chupaba con ganas mientras le miraba a los ojos. Tardó poquísimo en correrse, y de nuevo lo hizo sin avisar y sin sacarme la polla de la boca. Me lo tragué todo, incluido las gotas que se exprimió del tronco del nabo.

La sesión parecía llegar a su fin, ya que me invitó amablemente a bajarme de la furgoneta, no sin antes haberme metido los huevos en la boca un buen rato y haberme dado orina de moro para beber por segunda vez. Y así lo hice, bajé, él se pasó a la parte de delante y ocupó el asiento del conductor, listo para arrancar y largarse de allí. Antes, no obstante, bajó un poco la ventanilla para despedirse de mí, lo que hizo introduciéndome un par de dedos en la boca para que se los chupase, mientras sonreía como un cabrón que sabe que ejerce un control completo sobre su putita sumisa. Después de lo que fue más de un minuto me sacó los dedos de la boca, me dio un suave bofetón y se fue con aquella sonrisa de cabrón.

Y lo mejor de esta historia es que me ha pasado de verdad.

Polla negra

Darla Clayton se quedó mirando el trozo de papel que sobresalía de entre sus dedos… Después de un largo momento de reflexión, levantó el auricular de su teléfono y, con una mano temblorosa, marcó el 1-700-DDR-FMBU.

‘¡Debo estar loca!’ murmuró para sí misma mientras nerviosamente golpeaba con su pie el suelo alfombrado.

Después de diez timbres, estaba a punto de colgar cuando una voz lúgubre en el otro extremo de la línea dijo suavemente:

– «Soy Tom Smit, ¿en qué puedo ayudarlo?»

Por un momento, congelada de miedo, Darla se quedó allí en silencio mientras se preguntaba si debería colgar y olvidar todo el asunto.

Ella acababa de decidirse a colgar cuando la voz de repente dijo con fuerza:

– «¡Puedo oírte respirar… Contéstame!»

Sorprendida por este giro de los acontecimientos, Darla respiró hondo y balbuceó:

– «¿E-eres el hombre que puso el anuncio en el periódico?»

– «¿A qué anuncio te refieres?», le respondió suavemente con ese vozarrón que se escuchaba.

– «Ya sabes… El anuncio que está en el Metro», dijo Darla.

– «Debe haber mil anuncios en el Metro… Tendrás que ser más esplicita», le comentó de nuevo el hombre con voz suave.

Ella se estaba encontrando cada vez más incómoda por la dirección en la que iba la conversación, pero en lugar de colgar, murmuró:

– “Es el anuncio que puso un hombre negro.»

– «¿Qué decía el anuncio del hombre negro?» preguntó.

– «Estoy muy avergonzada… Tal vez debería olvidarme de esto y colgar», respondió Darla en voz baja.

– «Si lo hicieras entonces no podrías joder con mis 25 cm. de polla negra, ¿verdad?», le explico.

¡Así que era él!… Involuntariamente, la vagina de Darla soltó un chorro de flujo y empapó sus bragas blancas de algodón mientras imaginaba como sería el gran pene del negro que estaba al teléfono.

– «Ya que aún estás al teléfono, te diré que tengo claro por qué me llamaste… «Dime, ¿cuál es tu nombre y cuántos años tienes?» «, dijo con voz un poco más áspera.

Sorprendida de nuevo por su avance, ella decidió responder:

– «Me llamo Darla y tengo cuarenta y seis años.»

– «¿Estás casada?», le preguntó.

– «Sí… Llevo veintidós años casada», respondió ella,

– «¿Alguna vez has follado con un hombre negro?», le preguntó.

– «No… Nunca he estado con nadie más que con mi marido», respondió rápidamente,

– «¿No te satisface?», preguntó la voz.

– «Bueno, er, sí… Supongo que sí, pero sólo quería averiguarlo… Ya sabes … Q..Quería saber q..qué pasaría si me jodiera una polla t..tan grande cómo la de un caballo», respondió tartamudeando.

– «¿Estás segura de ello?»

Con todas sus defensas bajadas y su vagina con una necesidad desesperada de atención, ella respondió con un gemido:

– «¡Oooh, sí… Quiero probar una enorme polla negra!»

– «Eres como cualquier otra perra blanca de lasmuchas que conozco… Quieres venir a estar conmigo por la gran polla negra que tengo», respondió un poco orgulloso.

Después de varios minutos más de conversación íntima, Tom Post le dio a Darla su dirección e instrucciones sobre cómo llegar allí.

Cuando finalmente Darla volvió a colocar el teléfono en su sitió de carga, se puso la mano debajo del vestido y se tocó hasta que tuvo un orgasmo impresionante.

Después de caer al suelo hecha un montón, murmuró en voz alta:

‘¡El viernes a las cinco… Qué ganas tengo que llegue ese día!’

Y llegó el día de la cita… Darla pasó por delante de la dirección de la calle Montsant tres o cuatro veces antes de reunir el coraje suficiente para detenerse y aparcar su coche… ¡Era ahora o nunca!… ¡Si ella no lo hace ahora, probablemente nunca lo hará!

Después de revisar su maquillaje por última vez en el espejo retrovisor, respiró hondo y se dirigió al interior del edificio.

Su mente estaba acelerada cuando el ascensor se acercó a la planta doce y se preguntó si estaba cometiendo el error de su vida… Después de todo había sido una esposa buena y fiel durante todos estos años, pero la tentación de la fruta prohibida era tan grande que parecía no poder evitarlo.

Ella estaba literalmente temblando como una hoja mientras estaba de pie, congelada, frente a la puerta del apartamento, pero después de tomar su decisión, extendió la mano y tocó el timbre de la puerta y esperó a que le abriera.

– «Adelante… Está abierto», dijo una voz apagada desde el interior del apartamento.

Con cuidado, Darla empujó la puerta para abrirla y metió la cabeza dentro… El apartamento le pareció precioso… Tenía alfombras y costosos muebles clásicos llenaban la enorme sala de estar.

Entró mientras aún pensaba en girarse y huir, pero sabía que había dado ya un paso muy grande cómo para irse ahora… Ella se sobresaltó cuando escuchó la voz profunda decirle:

– «Así que eres Darla… Por favor entra y siéntete como en tu casa.»

‘Dios mío, qué alto es!… ¡Por lo menos debe medir más de 1,90 m. de altura y su cuerpo, desnudo de cintura para arriba, parece estar esculpido en granito!… Sus músculos se ondulan con el más mínimo movimiento’, pensó al verlo.

Tom la cogió del brazo y la llevó al gran sofá que estaba apoyado en la pared este de la sala de estar.

– «¿Quieres una bebida?… Creo que te sentará bien», le preguntó gentilmente.

– «Sí… P-por favor», respondió ella con timidez.

Un minuto después volvió con dos whiskys escoceses.

– «¿Tuviste algún problema para encontrar mi casa?», le preguntó mientras se sentaba a su lado.

– «No… Fue fácil de encontrar», respondió ella antes de tomar un sorbo de su bebida.

Tras unos momentos silencio, él le dijo:

– «¿Puedo hacerte una pregunta personal?»

– «Claro», respondió ella, un poco menos nerviosa.

Dejó que su mano se deslizara sobre su hombro mientras continuaba:

– «¿Está mojado tu coño?… ¿Sientes la necesidad de ser follada de forma fuerte y rápida por una gran polla negra?»

Darla apoyó la cabeza hacia atrás mientras su mano vagaba muy suavemente por la parte delantera de su blusa hasta sus pechos, que esperaban ser palpados de la forma que quisiera.

Ella giró la cabeza para mirarlo y suspiró:

– «¡Nunca he estado más preparada en toda mi vida!»

Su enorme mano ahuecó sus pechos llenos a través de su frágil blusa mientras él miraba sus profundos ojos azules… ¡Tom era un hombre guapo, con ojos negros como el carbón, una cabeza afeitada y una sonrisa que hizo que su corazón simplemente se derritiera.

Jugó con sus pechos durante mucho tiempo antes de decirle:

– «¡Es hora de chuparme la polla!

Tom, dejo su bebida y se puso de pie rápidamente, situándose delante de ella para permitirle un fácil acceso a sus holgados pantalones de pijama de satén… Y siguió dándole órdenes:

– «Bájame los pantalones»

Darla agarró la banda elástica de la cintura desus pantalones, con ambas manos, y después de mirarle a sus ojos, se los bajó sobre sus muslos musculosos.

Su corazón casi se paró cuando vió la increíble polla que tenía ante ella… Colgaba larga como una serpiente negra… Lentamente extendió la mano dejando que sus dedos rozaran esa músculosa y gruesa polla mientras jadeaba:

– «¡E-es muy bonita y muy grande y gorda!»

Al tocarla se contrajo un poco, pero rápidamente ganó longitud y circunferencia… A pesar de que estaba lejos de estar tiesa, ya debía tener al menos 20 cm de larga y ser tan gruesa como su muñeca.

Con el corazón latiendo con fuerza en su pecho, se inclinó hacia delante y besó repetidas veces la cabeza antes de metérselatodo lo que pudo en su caliente boca.

– «Oooh, síiii… Me encanta que una perra blanca me chupe mi polla», suspiro Tom.

Darla, con cuarenta y seis años, madre blanca de dos hijos, estaba ahora de rodillas, con la boca abierta, chupando con avidez su primera polla negra.

Tom pensó, al mirarla, que era como alimentar a un bebé hambriento con un biberón (=su enorme polla).

Mientras su boca mamaba su polla, ella tomó suavemente sus dos enormes testículos en su mano izquierda mientras sostenía la monstruosa polla con su mano derecha.

Su coño gordo latía incontrolado en sus bragas empapadas por el flujo que segregaca contínuamente en previsión de la jodida que sabía que iba a ser inminente.

Sintiendo la necesidad de exponerse, Darla abrió su parte superior de su blusa, permitiendo que sus grandes ​​pechos salieran al exterior y su vagina estaba segregando sin parar flujo.

Sin decir una palabra, Tom comenzó a disparar chorros de semen dentro de su boca… Ella jadeó mientras tragaba el esperma caliente que se iba deslizando por su garganta.

– «¡Muy bien…Sigué así… Trágatelo todo… Y luego me limpias la polla!», le ordenó.

Luego, la hizo ponerse de pie y la besó profundamente en los labios antes de susurrarle en su oído:

– «¡Voy a desnudarte para poder follarte!»

Por un momento fugaz, Darla se preocupó por lo que Tom pudiera pensar sobre su cuerpo maduro… Aunque estaba en muy buena forma era bastante obvio que el tiempo y la gravedad le habían pasado factura.

– «Espero que no quedes decepcionado cuando me dejes desnuda», dijo en voz baja mientras dejaba caer su blusa y su falda al suelo.

No debería haberse preocupado porque Tom con una mirada a la ama de casa vestida con bragas y sujetador tuvo más que suficiente para devolver la enorme polla de Tom a la erección completa.

Al ver su apuro, Tom se apresuró a quitarle toda su ropa interior dejándola allí de pie con sus grandes tetas y su peludo coño disponible para sus ojos hambrientos.

Antes de que ella tuviera tiempo de reaccionar, las manos de Tom estaban en todas partes… Tocó y acarició cada centímetro cuadrado de su voluptuoso cuerpo.

Ella se estremeció cuando el dedo medio de Tom violó bruscamente su babeante raja mientras ella miraba con avidez a su enorme pollón negro.

– «Por favor, jódeme!», le rogó.

– «Por supuesto que voy a joderte»

A pesar de que ella estaba algo gruesa, Tom la manejaba como si fuera una muñeca de trapo.

Con sus poderosas manos, la cogió del brazo y la arrojó sobre el respaldo del sillón… Golpeó sus piernas para que ella las abriera al máximo para permitir el acceso a su mojado coño y le dijo:

– «Está bien, perra, prepárate porque yo te voy a follar como lo que eres, una perra.»

Sus piernas tiemblan dobladas por todo esto… Y eso que ni siquiera la había tocado todavía… Darla se agarró los brazos del sillón con fuerza y ​​gimió mientras él pasaba la cabeza de su gran polla arriba y abajo a lo largo de su coño abierto para lubricarla con sus jugos.

– «Dios mío», murmuró entre dientes.

– «Tienes el coño más grande que he visto en mi vida.», le dijo.

– «¿E..estas decepcionado?» preguntó nerviosa, preocupada de que él no le pudiera gustar su coño.

– «¿Decepcionado?… A ver que te parece esto si crees que estoy decepcionado», le dijo.

Y de inmediato, con un fuerte golpe de sus caderas, embistió su gran polla negra en su coño hambriento,clavándole 15 cm en su interior.

Cómo respuesta, ella arqueó su espalda permitiendo que sus tetas quedaran libres y oscilasen como campanas.

Tom siguió dando golpes de cadera mientras la tenía bien sujeta y su gran polla penetraba cada vez más en su ahora dilatado coño.

Muy pronto su coño se convulsionó con fuerza teniendo una corrida de proporciones brutales dentro de ella!

– «Aaah!… Me estoy jodidamente corriendo», jadeó.

Darla, nunca se había sentido tan llena y feliz como estaba ahora… A pesar de que encadenaba una ola de orgasmos continuados, sintió una paz interior por el agotamiento que tenía.

Se encontraba totalmente entregada a la monstruosa polla negra que en ese preciso momento la estaba conduciéndo a otra gran corrida… Había perdido la cuenta de las veces que se había corrido.

Sintió cómo Tom aceleraba sus golpes de polla y apretaba con fuerza sus pechos y pellizcaba sus pezones… No pudo aguantar más y explotó en una gran corrida dentro de su coño, mientras su coño se contraía, una y otra ve,z alrededor de su enorme polla.

Después de que Darla estuvo vestida y lista para irse, no pudo evitar arrodillarse y coger de nuevo la gran polla negra de Tom y metérsela en la boca… Tom se corrio otra vez en su boca, que quedó finalmente llena otra vez de semen.

Más tarde ella le preguntó dulcemente:

– «¿Cuándo puedo volver?»

– «Cuando quieras, cielo… Si quieres, te espero el proximo viernes a la misma hora, pero sino puedes esperar me llamas y te vienes… Ten en cuenta que cada vez te voy a exigir más», respondió con una sonrisa.

F I N

Hola José Miguel, tal como pediste te cuento con todo detalle como conocí y me follé a aquel majestuoso negro zumbón…

Le llamo negro zumbón porque me zumbaba de puta madre el coño… Era incansable el muy jodido…

Era famoso en la empresa, en el barrio e incluso fuera de él…

No puedo reproducir los sobrenombres que las mujeres le dieron durante años, porque traicionaría su secreto, nuestro secreto…

Nuestras sesiones de sexo fueron únicamente tres a lo largo de aquellos años en que nos conocimos…

No te creas José miguel que fue visto y no visto…

Nuestro primer encaje sexual fue al cabo de 12 años…

Los otros dos redondearían aquel primer encuentro de grato recuerdo y no desmerecieron ambos en nada al inicial…

Era mayor que yo…

Era alto, fuerte, dulce, romántico y con una tremenda polla…, no larga pero si gruesísima…

Para que lo sitúes…, solo te diré que en República Dominicana una persona tan blanquita como yo, llamaba mucho la atención y podría haber estado con cientos de amantes de color del ébano…, pero yo solo lo quería a él…

Desde que nos conocimos hace ahora más de una treintena de años, nuestros ojos coquetearon sanamente sin malicia…

Por cierto…, un inciso…, me siento identificada con el personaje Cielo de tu último relato…, y un poco con el de Mileva…

Sigamos con el zumbón…

Me confesaría años después que se sintió atraído hacia mí desde el primer minuto…, al igual que recíprocamente yo me sentí atraída hacia él…

En mi interior sabía que algún día nuestros sexos se unirían en placer íntimo de calidad inigualable…, vamos…, que me lo follaría o como se dice por allí…, me lo comería…

Sus simples conversaciones de amistad me hacían mojarme al imaginarlo dentro de mí…, o simplemente imaginar acariciandolo con mis manos blanquísimas por su enorme cuerpo de color oscuro y deseable…, me ponia calentísima…

El destino nos unió laboralmente y todo hacia augurar un encuentro intimo en cuestión de tiempo…, aunque ninguno de los dos declarábamos abiertamente nuestro deseo…

La relación laboral dio paso a una amistad sólida y ambos tuvimos relación con las otras familias…

No pasábamos de allí…, ojos de deseo educado…, pero ni una sola mueca…

Un día aposto y ganó…

Intuyó la posibilidad y me invitó a pasar la velada con el…

Se arriesgaba a una negativa…

La verdad es que mi inicial no…, se tornó enseguida en sí…, por deseo expreso de mi sexo que avanzaba en su humedad…

Alquiló una habitación de hotel y llenó de provisiones, pasaríamos una jornada inolvidable de pasión y sexo…, y reparar posteriormente nuestro profundo ejercicio con buena comida y bebida…

Su inicial envalentonamiento se cambió a nervios y desajuste morcillón a la vista de los primeros compases de la velada sexual…

Mi enorme negro estaba de pie sin reaccionar…, sumido en una inacción que le tenía rígido, paralizado y sin reflejos…

Lo abracé a placer…

Acaricié sus enormes y fuertes brazos…

Empecé a soltarle botones de su camisa blanca…

Su tórax negro, brillante sin vello alguno era un enorme lienzo para plasmar mis caricias…

Reacciono tímidamente besando mi boca…

Aquel beso de saliva espesa le fue devuelto con pasión…

Mi sexo chorreaba ya…

Sentados en la cama, abrazados y besándonos todo empezaba a fluir…

Mi salud había tenido un altibajo en el pasado reciente y el temía hacerme daño con su fortaleza física, dada mi escasa altura y delicado cuerpo femenino…

Aquella tremenda delicadeza de no querer hacerme daño me hizo arrastrar mucha más intensa humedad en mi cueva deseosa… Soy a veces muy romantica…

Nos empezamos a desnudar despacio…

Aún tenía mi vestido puesto cuando sus enormes manos me acariciaban mis piernas enteras despacio…, desde las pantorrillas a los muslos…, haciendo subir sinuosamente mi vestido…

Nuestras bocas volvieron a unirse…

Me besaba todo en mi…, boca, cuello, lóbulos…

Me tumbó armoniosamente en la cama y quiso pasar sus dedos negros por encima de mi braguita húmeda…

Mi sexo retumbaba de placer y rezumaba humedad…

Ya desposeida de mi parte superior…, sus manos atisbaron a empezar a tocarme mis henchidos senos con pezones endurecidos…

Mis manos irremediablemente querían ir hacia su enorme sexo…, el elástico duro de su bóxer empezaba a revelarse pero la final lo vencí…

Llegué finalmente a aquel tremendo pene aún morcilloso…, de unos 18 centímetros de largo pero enormemente grueso… Jamás había visto una polla así de gorda…, con al menos siete u ocho centímetros de diámetro…

Terminé de quitarle el bóxer mientras aquellaenorme negra morcilla se balanceaba delante de mi cara…

Lo hicé recostar y comencé a tomar una gloriosa paleta de chocolate…, cual helado caliente chupaba y chupaba…

Aquella butifarra oscura crecía mientras mi boca y mi lengua la devoraban…

Di cuenta también de sus enormes testículos tan grandes como bolas de béisbol provocativas…, dándoles besos itinerantes entre lamida y lamida de aquel soberbio glande luminoso y brillante que iba rezumando también líquidos pre seminales…

Aquel enorme negro empezaba a disfrutar de veras a tenor de aquellos profundos suspiros y gemidos…

Cogía mis manos con sus enormes manos y las guiaba en aquel recorrido arriba y abajo a través de aquel enorme mástil oscuro cada vez más duro y grande…

Sus ojos cerrados no ocultaba el placer de aquellos momentos especiales para él y para mí…, pues mi cueva rebosaba humedad que iba traspasando a mis braguitas de algodón que estaban totalmente húmedas en buena parte de su superficie…

Por fin le dije que quería sentirlo…, que me acaríciese entera…

Necesitaba sentir aquella boca caliente por todo mi cuerpo…

Necesitaba sentir el roce de aquella piel de ébano rozando mi piel contrastadamente blanquita…

Me recosté…, y me terminó de desnudar despacio…, muy despacio…

Me acaricio… toda en mí…

Me besó tierna y apasionadamente…

Me sentía única cuando no pudé dejar de pedirle que me probase… Quería sentir su boca en mi sexo ardiente y deseoso…

Se acopló en la posición idónea y sin ninguna prisa…, lamio, comió, beso y metió dentro de mí…, alternativamente lengua, dedos o incluso su nariz…

Mi cuerpo no aguanta más y tuve quizás el orgasmo más clamoroso de mi vida…, al fin y al cabo lo llevaba esperando casi una docena de años…

Para agradecerme aquel soberbio orgasmo que le dí en su preciosa caja de dientes hermosos…, subió a besarme con la boca impregnada de todo aquel humedal viscoso y ligeramente salado…, aunque absolutamente delicioso…

Saboreé la esencia de su boca junto a mis aromas íntimos…, no desconocidos para mí, ya que me gusta lamer mis dedos cuando me masturbo casi todas las noches…

Necesitaba aquellas dos libras de carne dura y gruesa dentro de mí…

Se la pedi…

El respetuosa y educadamente temía hacerme daño al incrustar tan desproporcionada gruesa polla en mi aparentemente pequeña cueva en comparación…

Pausadamente cogió su herramienta y la preparó en mi puerta húmeda…

Aquel enorme glande viscoso me rozaba y me preparaba para explotar nuevamente dada la tensión sexual que tenia…

Me advirtió que si me hacía daño que se lo dijese que pararía de inmediato…

Presionó y clavó suavemente su enorme glande después de moverlo a ambos lados de mi vagina e impregnase mucho más de aquellas lubricaciones naturales.

Mientras lentamente aquel enorme bate de béisbol entraba en mí, me besaba cariñosamente…

Mi vagina deseosa acomodaba dentro de ella sin dolor alguno…, aquel enorme huésped desproporcionado para lo que yo acostumbraba por entonces…

Recuerdo nítidamente aquel momento de gozo único con el primer y único negro de mi vida…

Cuando terminó de acoplarse y empezó tímidamente a iniciar el cortejo sexual intimo…, yo ya me corría nuevamente como una perra caliente…

Él aguanto un poco más…, hasta que con mi tercer orgasmo…, no pudo remediar que una ingente cantidad de néctar blanco empezase a llenar enteramente mi vagina…, llegando a salir mucho de su semen oloroso, caliente y sabroso por las orillas de mi sexo…

Claro que o probe varias veces…

Mi querido José Miguel…, con lo que te gusta a ti devorar el néctar tuyo y ajeno… De haber estado allí te hubieses puesto las botas, pues sin poder dar abasto mucho hubo de derramarse entre las sabanas de aquella cama que recibiría durante el resto de la jornada otras cuatro inundaciones jugosas de néctar blanco del interior de aquella desproporcionada animalada de polla de color de la noche…

Recuerdo aquella cita sexual como única…

Como dos jóvenes amantes nos deseábamos y nos dimos…, el uno al otro aquel día y en dos ocasiones más aunque pasado el tiempo…

Aún recuerdo aquel olor…, a negro zumbón…

Ahora te deseo a ti…, aunque no solo físicamente…

PEPOTECR.

—¿Crees que no noto la forma en que me miras y me juzgas? ¿A qué le temes? ¿A que te guste más de lo que ya lo hago? ¿O a que te demuestre que puedo hacer que te corras una y otra vez si me dejas probártelo? Rodé los ojos. Ya estaba. Era suficiente. —Me voy —dije poniéndome de pie. En el instante en que me levanté del asiento, él sostuvo mi brazo con su mano, en un agarre firme pero sin excesiva fuerza. Al ver que se levantaba para impedirme el paso, pude ver la enorme verga que se le asomaba salvaje y libre por entre las piernas, casi como una visión hipnótica que mis ojos seguían sin que yo los controlara del todo. La boca se me hizo agua al instante: era la verga más gruesa y deliciosa que hubiera visto nunca, y de inmediato mi entrepierna, mojada como la tenía, comenzaba a palpitar por reclamar semejante miembro como propio, a sabiendas de que podía destrozarme el coñito con ese tamaño. Me quedé paralizada por una ola de deseo que desconocía como propio de mí, y mi mano temblaba bajo su agarre. No quise mirarlo a los ojos, porque sabía que él ya se había dado cuenta de lo mucho que lo deseaba. Y en efecto, su socarrona sonrisa solo me lo comprobó cuando cruzamos miradas. Me sonrojé y agaché la cabeza, avergonzada. —Chúpamela —me ordenó con voz firme. Me sobresalté al escucharlo y tuve que admitir que esa petición mandó un temblor directo a mi sistema nervioso que terminaba en mi sexo.  No quería. No quería. Era un sitio público, pero la idea me excita a por completo. Adivinando mis miedos, acarició mi barbilla y me obligó a levantar la vista hacia él. —Si alguien pasa cerca te cubriré con mi chaqueta y nadie podrá verte debajo de mí. —No lo sé… Él adelantó su entrepierna dando un paso con su pata trasera, invitándome. —¿Te vas a perder la oportunidad de comerte mi verga solo porque tienes miedo de que nos vean? —acarició mi rostro, provocativo—. ¿Qué diría la gente si te ve chupándoselo a un centauro? —sonrió, luego añadió—. Protegeré tu secreto, Roci —¿Me lo juras? —pregunté esperanzada. Él sonrió adelantando las patas traseras para ofrecerme aún más su grueso pene, que era casi de la extensión de todo mi brazo a excepción de la mano. Me incliné sobre mis rodillas entre sus patas para tomarlo con mis manos y sentir su grosor en mi palma, que apenas podía cerrarse en torno a él. Palpitaba dura al tacto, y mi boca se sentía hambrienta con solo verla en el intento de cubrirla con mi mano. Separé más mis piernas para que el fresco de la noche me hiciera sentir entre la minifalda lo húmeda que estaban mis pantaletas. Arikles acomodó bien sus cuatro patas para que pudiera masturbarlo a gusto, pero yo no iba a dejar que esa delicia se perdiera de probarse contra mi paladar, por lo que la tomé con ambas manos para dirigir bien el glande a mi boca, degustando su sabor salado, más salado que de costumbre. Sin mentir, tuve miedo de que en algún momento la mandíbula se me desencajara por tratar de tener algo tan grande dentro, y agradecí que Arikles fuera lo suficientemente decente para no comenzar a embestirme la boca como un animal salvaje, como otros malos amantes habían hecho cuando les había dicho mil veces que no me cabía toda en la boca. Para mi deleite, mi amante centauro seguía bien el ritmo con el que mi boca quería tomarlo. —Ah, Roci, sígue así. Me encanta esa boquita tuya… Continué chupando al tiempo que acomodaba mejor mis rodillas, que ya se resentían sobre el césped por la posición en que me encontraba bajo su vientre, para tenerlo mejor en mi boca. Yo sabía que le gustaba mucho lo que le estaba haciendo porque lo veía menear la cola de caballo de forma circular, como un látigo que me impulsaba seguir más a prisa. Comenzaba a entender por qué a las otras mujeres les gustaba tanto la verga animal: su grosor y sabor no se podían comparar a nada que hubiera probado antes. Tuve que poner una mano a un costado de mis muslos para mantener el equilibro y chuparlo: estaba tan duro que ya no necesitaba que guiara con su otra mano el camino a mi boca, pues él sabía encontrarlo por sí mismo, sin abusar de su posición y su tamaño para provocarme arcadas. Arikles no estaba comportándose como un patán buscando meterla más allá de lo que me cabía en la boca; por el contrario, dejaba que yo guiara el ritmo con el que lo estaba tomando, y a mí me gustaba oírlo jadear cada vez que descubría un truco con mi lengua sobre su piel sensible. Tenía tan buen sabor… —Detente. Me descoloqué ante su petición, y de inmediato me paralicé al imaginar qué estaba ocurriendo. 

Trabajando en el hospital general

Al comienzo de la crisis, la fábrica donde yo trabajaba se fue al garete haciendo un ERE.
No me quedó más remedio que buscar otro trabajo, y conseguí entrar en una empresa de limpieza que se ocupaba de los hospitales.

Me mandaron al hospital general, para ir tenía que coger el primer metro del día, a las seis de la mañana, cuando llegué, iba muy perdida, porque los de la limpieza nos desplazamos por los pasillos subterráneos, y al ser todos iguales, se pierde el sentido de la orientación, después de muchas vueltas tropecé con Saúl, un chico negro que me explicó cómo se llegaba de un pabellón a otro, además del funcionamiento de la empresa.

Cuando salí del trabajo me dirigí hacia el metro, el semáforo de peatones estaba rojo, y allí estaba Saúl, esperando a que se pusiera verde, le di las gracias por su ayuda y me miró de arriba abajo con cara de no conocerme.

Soy Selena, la chica a la que le has explicado cómo se funciona por los túneles del hospital, oh perdona no te había reconocido, con el babero sois todas iguales….pero vestida de calle estás espectacular, jamás hubiese pensado que debajo del babero hubiese una mujer tan guapísima.

Claro para trabajar llevamos un babero amplio y un gorro de hospital con el pelo recogido, pero a la salida yo iba con minifalda de vaquero mi melena lisa por los hombros, y un suéter ajustado en el que destacaban mis pechos de talla cien y copa D.

El semáforo se puso verde y continuamos cruzando, vas a coger el metro? Me preguntó, si, le dije, voy hasta la estación de Ayora…..ostras que suerte, yo también voy a esa estación,viajamos juntos y al llegar cogimos el mismo sentido, esto es demasiada casualidad, me acompañó hasta mi patio y me dijo yo vivo dos calles más allá, oye si quieres mañana te espero en el patio y viajamos juntos, me pareció una buena idea y acepte….bueno hasta mañana.

Así empezó nuestra amistad, con el tiempo íbamos cogiendo confianza y hablábamos de todos los temas, incluido el sexo.

Saúl, tengo que hacerte una pregunta que, estoy segura que te han hecho más de una vez…..es cierto los rumores que corren sobre los atributos masculinos de los negros?

Selena hay de todo, pero por norma general, sí estamos mejor dotados que los blancos, cuando vayamos a bajar descubrirás algo, Saúl suele llevar pantalones de chándal anchos, cuando faltaba poco para nuestra parada yo me levante y me acerqué a la puerta del vagón y él se pegó por detrás a mi cuerpo, llevaba la sudadera en el brazo y cogiendo mi brazo me lo llevó hacia atrás, y puso mi mano encima de su polla, la cual pude sentir al tacto mientras mi brazo quedaba tapado por la sudadera…….joder Saúl este es tu aparato?

Bueno es parte de él, el resto hay que despertarlo para que aparezca,

mi mano siguió hacia abajo buscando el final de aquella bestia, cuando llegué a la cabeza me asusté parecía más un melocotón que un cipote, menos mal que el metro paró y bajamos, ufffff que calentón cogí.

Para cambiar de tema le dije, el domingo es mi cumple pero me toca trabajar, que putada….Saúl me dice, oye voy a mirar a ver si puedo hacer algo, cuando lleguemos hablaré con Antonia la jefa de personal, que me debe algunos favores.

A la salida me dice, oye he conseguido que Antonia te dé fiesta, además vamos a hacerte una fiesta de cumpleaños, de modo que lo mejor será que en casa digas que trabajas, y así no tienes que estar pendiente de la hora.

No estaba yo muy convencida, pero… ya que Saúl se había movido por mí, no podía hacerle un feo.

Llegó el domingo y habíamos quedado como siempre en la puerta de mi patio, pero en lugar de irnos hacia el metro nos fuimos hacia su casa, ya que me dijo que la fiesta sería allí, cuando llegamos como era tan temprano me dijo quieres que ponga una peli para hacer tiempo, le dije bueno…..apenas le dá al play aparecen en la Tv una mujer desnuda tumbada sobre una mesa,con un negro a cada lado que le ponían sus vergajos en las manos, que ella meneaba con soltura,mientras otro le estaba metiendo su verga por la garganta intentando que se la tragase entera y un cuarto le comía el coño.

Trabajando en el Hospital General

Saúl pero esto que es?

Selena, yo soy soltero y tengo 38 años, que películas quieres que tenga?

Además no te asustarás de ver unas pollas verdad?

Cuando acabó la peli eran las nueve de la mañana, y yo estaba más caliente que un volcán.

Saúl cogió el móvil y dijo….vaya por Dios las tres chicas que iban a venir no pueden hacerlo…..voy a ver si consigo que venga algún amigo…..si….oye……puedes venir? Es que tengo un cumple y me ha fallado la gente…..si? que bien…oye cuando vengas pásate por la pastelería y recoges una tarta especial a nombre de Saúl…gracias.

Que te pasa Selena? Es que tengo mucho calor….podría ducharme?

Por supuesto, pasa al cuarto de baño, entré y estaba enjabonandome en la ducha, cuando Saúl entró desnudo con la escusa que se le había olvidado entregarme una toalla, pero…….desnudo? mujer por aprovechar que está caliente la habitación lo primero, para aprovechar que estoy caliente yo, lo segundo….y esperando que estés caliente tú lo tercero.

Y entró en la ducha y se hecho una buena cantidad de gel en sus manos y poniéndose a mi espalda empezó a pasarme las manos, que con el gel resbalaban por ella, de pronto sus brazos me rodearon el cuerpo para enjabonarme mis pechos…..todo eso hizo que su polla se elevase hacia el techo amenazante.

Trabajando en el Hospital General

Después de ver dos horas de porno interracial mi coño estaba babeando y loco por recibir un buen polvo.

Justo estábamos para secarnos cuando sonó el timbre….quién? dijo Saúl,

Sube Anmar la puerta está abierta.

DONDE ESTÁ ESA FIESTA? Dijo Anmar que entró con dos compañeros más, todos negros.

Yo dije que coño es esto Saúl? Es tu regalo de cumpleaños Selena, no tienes que comértelo todo a la vez, tú mandas hoy…de momento aquí

tienes tu tarta.

Trabajando en el Hospital General

Al verla me entró la risa, y desnuda como estaba me abracé a él que me recibió con los brazos abiertos, y su polla empalmada se introdujo entre mis muslos acariciando mi coñito.

Sus labios carnosos se posaron se mi cuello y comenzó a pegarme mordisquitos que hacían que mis pezones se disparasen señalé a los amigos de Saúl y les dije….hace mucho calor aquí para que todavía estéis vestidos, no tardaron ni treinta segundos en estar en pelota picada.

Me moría de ganas de estar como las protagonistas de la película que acabábamos de ver, ensartada por todos mis agujeros.

Me eché como una loca a por el vergajo de uno de ellos, el cual todavía no sé cómo, me lo tragué como una loca.

Trabajando en el Hospital General

Aquello impresionó a los chicos, pero……más impresionada estaba yo, ya que todavía no sé cómo lo hice.

La verdad es que todos tenían pollones XXXL y cualquier mujer se hubiese vuelto loca por una de estas, y yo……..podía elegir, menudo cumpleaños iba a tener, de tener que trabajar en el hospital a volverme loca follando.

Mientras se la comía a uno, otros entraban por mis puertas delanteras y trasera.

La mañana iba avanzando y aquellos hombres parecían no cansarse nunca, cuando pararon un poco Saúl que había estado mirando dijo, bueno espero que me la hayáis dejado preparada.

Y poniéndome la punta de su cipote en la boca empezó a empujar…..primero suavemente, después viendo que yo me esforzaba por tragarme su vergajo paró un momento y cogiendo la nata de la tarta se la restregó por su verga.

Entre la nata y mi espesa saliva parece que iba entrando más…..cuando faltaban cuatro o cinco dedos para hacer tope sus manos cogieron mi cabeza y a la vez que empujaba su pollón hacia adentro, sus manos llevaban mi cabeza hacia su pubis como si quisiera taladrarme la cabeza…..aggggggg mi garganta se ahuecó y su verga llegó hasta el fondo de mi garganta, donde depositó unos cuantos chorros de esperma.

En lugar de aflojarse, la polla tomó unas dimensiones que asustaban, se sentó en una silla y me dijo que dejara caer mi culo encima……Saúl estás loco si piensas que me puedes meter eso en mi trasero……bueno tu solo inténtalo, yo le di la espalda y empecé a dejarme caer,entonces él dijo Anmar cómele el coño como tú sabes….y espatarrada como estaba los labios de Anmar se apoderaron por completo de mi coño haciendo de aspirador con ellos, hasta que se soltaron, oyéndose un… FLOPPP, joder que bien lo haces Anmar, después su lengua se introducía desde el periné hasta que llegaba al clítoris donde se entretenía un poco…..hostiaaaaa….que……gustoooooooo, estando a punto de la corrida, Saúl aprovecho que mi esfínter estaba relajado, y cogiéndome de las tetas me empujó hacia abajo…..AAAAAYYYYYYYYY….su cabezón había traspasado la puerta de entrada.

Paró su esfuerzo, para que mi esfínter se acostumbrara a su cipotón, mientras, Anmar seguía con su trabajo, muy bien por cierto, yo notaba que mis muslos empezaban a temblar anunciando una nueva corrida…..Saúl dio otro achuchón y su verga se introdujo otro trozo en mi culo……Diosssssss….yo notaba como si su cipote hubiese llegado a otro anillo interno que impedía su paso.

Trabajando en el Hospital General

Anmar, comenzó a pasarme su verga por el chocho y el clítoris, y de vez en cuando, me golpeaba en el con su cipote a modo de porra……….que gustooooooooooo……..inténtalo ahora Saúl, este comenzó a empujar y yo notaba como mi interior se abría para dar asilo a su verga de caballo… JODERRRRRRR……LA METISTE…….HASTA……EL…..FONDOOOOOOO.

Hijo de la gran puta que gusto me dassssssss……..Entonces Anmar se sumó a la fiesta y de un empujón me clavó mediapolla, llegando a la entrada de mi matriz……..ensalivé mi mano y comencé a pajearme y Anmar a meter y sacar……meter y sacar…..cada vez entraba un poquito más, nos pusimos de pie y Saúl me cogió de los muslos quedándome en el aire clavada en sus pollas……me subían hasta que casi se salían sus cipotes, para acto seguido dejarme caer de golpe, hostia Anmar estás dentro de mi matriz…..GUAUUUUUUUU…..ME MATAISSSSSS…..DE…..PLACERRRRRR.

Volviendo otra vez a sillón esta vez se sentó Anmar, y Saúl se quedó de pie detrás de mí, entonces los dos amigos restantes se pusieron tras el respaldo para que se las chupase……..que placer….menudo regalo de cumpleaños.

Empezaron a follar en serio y la habitación se llenó de ruidos y jadeos, CHOP…CHOP….AYYYYY….QUE….GUSTOOOOOO…..DIOSSSSS MIOOOO….ME VAIS A MATARRRRRR.

De pronto empezó el reparto de leche…..el primero fue Anmar….ME VOYYYY………QUE MUJERRRRRRR……su lugar lo ocupó otro de sus amigos, después se corrió Saúl….TOMAAAAAA….MIIIII…..LECHEEEEE

Trabajando en el Hospital General

Nos tumbamos en la cama y los dos restantes me terminaron de arreglar mi cuerpo, hasta que quisieron.

Uno de ellos cogiendo el pastel polla intentó metérmelo en el coño, aunque solo entro la punta.

Después entre los cuatro me volvieron a duchar, haciéndome gozar de nuevo con sus manos, y me fui a casa.

Mi marido me recibió con un abrazo y me dijo, lo siento cariño que te hayan hecho trabajar el día de tu cumpleaños, yo le dije vengo reventada….nunca mejor dicho.

En eso sonó el teléfono…dígame?…..si ya ha llegado, la pobre ha venido reventada, si no se preocupe yo se lo digo.

Quien era Bryan? Un tal Saúl, me ha dicho que es compañero tuyo de trabajo, que hoy te han dado una paliza y que estarías muy cansada…que esperaba verte mañana tan guapa como hoy….parece simpático el chaval.

Si cariño, muuuuy simpático le dije con una sonrisa.