Hola Amigos Mi nombre es Alex Castro Esparza, tengo 17 años estoy en 3° medio de un gran Liceo de Concepcion Chile, mi padre se llama Javier Castro 52 años y mi madre Yolanda Esparza, 43 años, mi padre trabaja en la empresa de refresco Coca Cola y mi madre en una tienda comercial de Damas en el gran Concepcion, es vendedora y le va muy bien con sus comisiones por venta.
Vivimos en un edifico de departamento donde hay muchos amigos y vecinos muy unidos como comunidad, en cada piso hay amigos de todas las edades y obvio nos juntamos en grupo de las edades más o menos parecidas, Tengo mis mejores amigos en mi mismo nivel de pisos, pero tengo unos vecinos del 2° piso que son 2 hermanos de 23 años el Jose Luis T. y su hermano Nelson T. de 34 años, el mayor es Nelson quien padece de síndrome de Down.
ellos siempre están en mi casa jugando Nintendo porque soy el único vecino que tiene Nintendo en el edificio, tengo 2 hermanos más de 28 y 22 años Alberto y Mario respectivamente, yo soy el menor. Jose luis mi vecino es mas amigo de mi hermano del medio que mío, pero su hermano mayor Nelson que es Mongolito o sea síndrome de Down es mas amigo mío a pesar de la diferencia de edad es como un niño.
en ese verano fuimos como todos los veranos al campo de mi abuelo por parte de mi padre cerca de la playa Dichato, y nuestros vecinos se peleaban por ir con nosotros al campo, y los llevamos por turnos mi padre y mi madre jamás se hicieron problema con eso , alcanzaba para todos, en ese verano fue Jose Luis y nos pidió si podía llevar a Nelson con ellos y mi madre acepto, mi hermano llevo a 2 amigos de su edad mas ( el mayor se quedo porque ya estaba trabajando) para ir a la playa de noche y conquistar chicas , yo no iba porque me daba mucha vergüenza aun y Jose luis tenia un defecto en su pierna desde chico, tenía una pierna más delgada que la otra y además cojeaba y también le daba mucha vergüenza estar con niñas y su hermano Nelson tampoco por ser Sindrome de Down, las primeras salida a la playa me di cuenta de que Jose luis y Nelson miraban de sobremanera a mi madre que usaba 2 tipos de traje de baños, enteros de esos rebajados y subidos bien arriba de la cadera mostrando sus blancas, grandes, gruesas y hermosa caderas y su enorme y firme culo y también usaba Bikinis negros de esos con tirantes o amarras en las caderas la parte del calzón del bikini y en la espalda el bikini superior, Jose luis me dijo que nunca se imagino que mi madre fuera tan buena, ella tenía una bella figura y la mayoría de los vecinos la miraban ,pero la respetaban mucho. para que se imaginen como es ella mi madre es la copia de la sra helen parr de los increibles la sra increible, puesto que mi mama también es pelirroja, pero se tiñe su cabello de color castaño claro pues no le gusta su color rojizo, yo jamás he sido celoso con mi mama como lo es mi papa con ella no me importo mucho su comentario en todo caso.
De hecho en las fiestas del edifico donde vivíamos porque era un edifico muy unido, celebraban juntos fiestas patrias Y año nuevo y alguna otras festividades, cuando lo hacían mi madre se arreglaba muy bien siempre ella a usado tacones altos de aguja y medias de satin o seda, pues ella trabaja en una tienda de damas de Concepción donde venden lencería y la adquiere a precio de costo, y la mayoría de los vecinos amigos de mi padre la miraban con deseo pero la respetaban mucho porque ella es muy religiosa y presta servicios y ayuda a la caridad de la iglesia San Francisco de Asis de nuestro barrio y uds ya saben que los hombres con trago siempre hablan demás y de las cosas que le harían a las mujeres , y en nuestro edificio no era la excepción yo siempre fui mas intuitivo, perceptivo y mas despierto que mis amigos y siempre oía las conversación de los vecinos y padres del edificio, y cuando mi padre no estaba cerca siempre miraban a mi madre y decían entre ellos » a la yola la pondría en 4 con ese culo y esa caderas debe ser una potra en cama» otros decían comentarios como » estoy seguro que Javier no la deja llena a la Yoli debe pedir mas y mas y el no la logra satisfacer»,
«de seguro debe ser insaciable con ese culo tan parado » es la mejor hembra del edificio» y los comentarios del tio Arturo que era hermano de la tía Silvia mamá de mi vecino Jose luis y de Nelson siempre fueron más insolentes y perturbadores, tales como » yo a esa puta la violaría con 2 amigos mas y estoy seguro que la yola jamas nos denunciaría, se haría la difícil y la ofendida pero no iría a la policía, tiene algo en esa mirada de santa, algo de puta caliente en celo que me hace querer violarla, y todos le decían ya bájale cálmate Arturo!!, noo decía él estoy seguro que la YOLA ES UNA HEMBRA CALIENTE si hasta nombre de prostituta tiene y que el Javier no la llena, ese culo lo violaría todo un día si tiene culo de yegua, a todas las caderonas y sobre todo culonas no las satisface un pene pequeño, si no las vergas grandes y la Yolanda es la mas caderona que he visto en mi vida,» siempre me daba miedo oír los comentarios de don Arturo sobre mi mama, la mayoría lo frenaba en sus comentario excepto el vecino del 1er piso don Juan Escalona era tan degenerado como el tío de Jose luis, eran la pareja perfecta al insultar y desear a mi madre.
en ese verano en el campo de mi tata que era hermoso porque había campo, playa y rio era perfecto para un verano, íbamos a cazar, a pescar, a caminar por senderos , esa era la rutina de todos y obvio la playa, el mar jugar futbol y nadar. un día después de ir a la playa y bañarnos en el mar nos vinimos antes Jose luis, su hermano down Nelson y yo y nos fuimos al rio a sacarnos la sal del mar del cuerpo y como estábamos solos los 3 hombres nos desnudamos para bañarnos mejor y estábamos enjabonados con shampoo en el pelo y riéndonos tirándonos agua, cuando llego mi madre a bañarse también a sacarse la sal de mar de su cuerpo, ella nos vio y se rio nos saludo y dijo «no se preocupen por mi niños , piensen que soy su madre» , (mi madre así los veia a jose luis y Nelson como sus hijos o sobrinos) ella se metió al rio y sin pensar en sus acciones todo lo hizo en forma natural y sin malos pensamientos debido a su gran corazón y su pasión por la Iglesia, Dios, La Virgen y lo buena samaritana que era como buena Franciscana de la Parroquia. nos dio la espalda, colgó su bolso en los ganchos de los grandes sauces que cubrían el rio, se saco la parte de arriba del bikini y luego se desató la parte de abajo, los tirantes de su calzón la colgó también en los ganchos , se giró hacia nosotros que estábamos estupefactos y petrificados los 3, nos miro nos hizo un gesto de hola con su mano se rio un poco y se sumergió en el rio , pero José Luis logro verla de frente y me miro, con sus ojos muy abiertos y desorbitados , Nelson que es síndrome de Down tenia la boca abierta y sus ojos saltones solo miraban sin decir absolutamente nada, mi madre se paro mojada, tomo el shampoo y lo esparció en su pelo se agachaba para echarse más agua mostrando su enorme blanco y firme trasero y luego tomo la barra de jabón y se enjabonaba se sumergía al rio y volvía a repetir la maniobra del jabón se sumergía y cuando se paraba a veces dejando ver sus partes, yo trate de disimular y seguí jugando tirándole agua a Nelson y a José Luis haciéndome el loco, mi madre se puso de pie y nos dijo quieren comer huevos revueltos con queso y tomates de la huerta para tomar once ?? y Nelson se puso de pie de un salto y le dijo yo si!! y al ponerse de pie mi mama quedo inmóvil, estupefacta al ver el miembro de Nelson parado por ver a mi mama desnuda, yo note de inmediato el nerviosismo de mi madre, obvio la conozco muy bien, se pone las manos sobre sus senos en señal de miedo, protección y de susto, y la otra mano abajo tapando sus vellos, que antes los enseño sin vergüenza delante de ellos, pero ahora al ver el tamaño de Nelson ella se sintió amenazada o asustada igual al miedo que sienten las mujeres al ver una culebra , es como que pensaran que les va a meter la culebra por la vagina, mi mama no dijo nada mas solo miraba hipnotizada el gigante miembro viril de Nelson Mongol, como le decíamos en broma o en señal de burla hacia su persona , se lo decíamos sin maldad creo, decíamos ahí viene el Nelson mongol porque había otro vecino llamado Nelson y así era como lo diferenciábamos uno del otro si queríamos nombrarlos, el Nelson y el Nelson mongol, mi mama con sus manos en sus senos de giro y se salió del agua y se seco con la toalla y una vez seca se giro y se despidió con un chao chicos mientras se envolvía con una toalla, ya al irse mi mama del rio el José Luis me dijo mirándola como se iba caminando y perdiendo por la huerta se giro rápido y me dijo oye hermano » tu mama es colorina , es pelirroja ?? tiene su concha colorina , pelirroja, la viste ??? SI obvio que si la he visto, desde siempre le dije cuando mi mama era más niña era incluso más rubia que pelirroja , ella no le gusta su color de pelo por eso se tiñe de castaño ; y les dije ya salgamos nosotros también, pero ya en mi cabeza surgió una idea y al ver de nuevo a Nelson y su anaconda colgando solo pensé en mi madre y su mirada asombrada.,
una tarde después de la playa me acerque a ella y le dije que injusta es la vida, «porque hijo», por el Nelson mamita , mmm sii que pasa con él, pensar que el jamás va a tener el privilegio, la suerte de estar con una mujer ni procrear , porque ellos no pueden embarazar a ninguna mujer cierto mamita?? aaa sii es cierto hijo, pobrecito pero algún día encontrara a alguna mujer hijo, quien sabes eso solo Dios lo sabe, si pero por algo llego a nuestras vidas a vivir al edifico no lo crees ?, como asi hijo? bueno tu siempre dices que hay que dar , ser generoso en todo, abrir nuestro corazón a los más necesitados hacer una caridad por los más necesitados, siempre me has dicho eso cierto ? si hijo por supuesto. y entonces no crees que Dios puso a Nelson en nuestras vidas por algo o mejor dicho en tu vida por algo?
mm no te entiendo Alex, que me quieres decir hijo? aquí está tu oportunidad para hacer una gran obra de caridad un gran gesto por el Nelson . ayy hijo mio no me asustes a que te refieres que sería ?? No lo ves mamita , no ves lo que te quiero decir que hagas con el pobre Nelson ? ayyy hijo quieres decir?? quieres que tenga relaciones con Nelson ?? si mama pero no solo sexo, es darle amor, darle una oportunidad de sentir lo que es estar con una mujer, y que mejor mujer que tu que eres amable buena, preciosa, cálida y muy dispuesta a dar amor y recibirlo también.
ayy hijo mío Nelson es un vecino y que es tu amigo , no crees que si yo aceptara a eso el no lo diría después a alguna persona a su hermano o algún vecino y si se llegara a saber, yo después andaría de boca en boca de los demás, no te preocupes x eso mama el Nelson mongol apenas habla, es más tonto que una puerta , AYYY ALEX!!! ese vocabulario hijo!!, NO LE DIGAS ASI pobrecito,
tan pobre no es mama!!, porque dices que no es pobre? si lo es mi amor ellos son gente pobre. pero ellos son pobre solo en lo económico y tu dices que no importa eso en la gente, pero él es solo pobre de plata pero no viste lo rico que es en su miembro masculino, tiene un pene enorme ,
ayy hijo el pene de Nelson es más que grande tesoro, tu papa lo tiene normal a grande, pero lo de NELSON es otra cosa, es anormal, es gigante, enorme no creo que alguna mujer pueda con eso mi amor , es enorme , y tan grande y tan grueso , pero mama te imaginaste que era así ?? no mi amor jamás!!, te das cuenta de cómo hace las cosas Diosito ,mamita !! el lo puso en nuestro camino por algo ?? ayy grcs hijo mio te amo por esa palabras pero no creo k sea posible ni que yo pueda con el tesoro ;
porque dice eso que no puedes con el ?? Ayy hijo porque su pene es enorme y yo no sé si eso tan grande pueda entrar en mi me entiendes, quiero decir en mi, bueno en mi vagina tesoro no sé si una mujer común y corriente pueda soportar esa semejante cosa dentro de una vagina mamita tu no eres una mujer comun ni corriente eres una gran persona dispuesta a ayudar al prójimo siempre, tu tienes idea de cuánto mide su pene ?? noo no hijo ni idea no me lo imagino, su pene mide 28 cms el jose luis se lo ha medido varias veces delante de mí y de los otros amigos , lo hace para burlarse del porte que lo tiene y dejarnos en vergüenza porque su hermano es el más grande de todos, nosotros, en serio???? ayyy dios mio santo virgen santa madre hijo mio , no creo que tu madre pueda con eso mi amor, ayy de solo pensarlo me dan nervios tesorito, ( yo sabía que mi mama ya se había interesado desde que lo vio en el rio, pero también sabía que mi mama es realmente una dama en la calle y en las fiestas y debido a su gran apego a la religión católica, yo debía ser cauteloso y muy sutil si quería que ella accediera , le seguí con el tema de la caridad, del prójimo y de hacer el bien sin mirar a quien que era su debilidad) le dije que el pobre Nelson no sabe lo que es dar amor ni tampoco recibirlo ya sabes que su madre la tia Silvia es Alcohólica y se lo pasa borracha en el departamento y apenas le habla al jose luis que es su hijo sano y menos le habla al Nelson Mongol, ayyy hijo, alex por favor que es eso lo que dices no le digas a si pobrecito no lo ofendas o me enojare contigo en serio no te enseñe para que ofendas o te burles de las personas
perdón mamita linda lo lamento , tienes mucha razón mamita me enseñaste a ser cariñoso, caritativo, amar al prójimo por sobre todo sin mirar su condición social o como sea y siempre a dar y dar más de lo que sea, antes que recibir cierto ?? SI HIJO ASI ES . , pero parece que era pura mentira y puro cuento de tu parte, ya que tienes la posibilidad de demostrarlo y no lo haces, Nuestro señor Jesucristo te pone una prueba y a una persona en tu camino para darle amor y respeto y ni siquiera te tomas el tiempo para pensarlo ya decidiste que no puedes que no lo harás al parecer, ( la mirada de mi mama quedo fija en mi , en silencio dubitativa melancólica nerviosa, agacho la mirada y la cabeza y puso sus manos en sus pechos como a la defensiva como lo hacía siempre que estaba asustada y nerviosa y me dijo) Tienes razón tesoro no lo había pensado asi, quizás Dios puso a Nelson en nuestro edificio por algo y por algo fue a nuestro campo este año, si mamita es una prueba que te puso Dios en tu camino para ver si en realidad practicas y no solo predicas, ayyy mi amor que sabio y maduro eres mi vida, ni siquiera pensé en eso, que clase de samaritana y católica soy Dios mío perdóname por no ver la necesidad y falta de amor de otros señor Jesucristo perdóname,
noo mama tranquila si por eso Dios sabe cómo hacer las cosas tu siempre has dicho que los caminos del sr. Jesucristo son misteriosos y por eso me ilumino a mí y me hizo ver que esto paso por algo, yo jamás lo hubiera pensado si no hubiese visto como el pobre Nelson y jose luis te miraban , me dio mucha pena ver los ojos del Nelson como te miraba tu cuerpo me imagino que el pensó en esos monetos en el rio que nunca en su vida podrá tener a una hembra como tú en su vida ,
(mi mama se abalanzo sobre mi me abrazo y me dijo) te amo hijo eres el mejor ser humano que conozco en mi vida , más que las colegas de mi centro de ayuda al samaritano de la iglesia tesoro, ayy mama no es nada, solo es caridad como tú siempre dices, vas a darle al Nelson la mejor caridad de todas quedara en su corazón por siempre y para mi serás la mejor mamá del mundo, la mejor cristiana y la mejor samaritana de la iglesia san francisco estoy orgulloso de ti mama como mujer como católica devota y como hija de dios , en serio me ves asi hijo?? si mamita linda asi me has enseñado y así eres tu así te he visto siempre y mas con lo que ambos vamos a hacer y ayudar a un samaritano, pero hijo espera un momento, si llego a hacer algo con Nelson será sola con él en privado, eso es algo de 2 personas pero no aquí en el campo será llegando al departamento, pero noo mamita no será así, no te dejare sola con el Nelson si Diosito me ilumino a mi fue por algo para que te cuide y te guie en este proceso de amor , caridad y generosidad, recuerda que fui yo quien recibió el estimulo de nuestro señor Jesucristo ayy mi amor no se que haría sin ti hijo, de verdad eres un ángel de nuestro señor, tienes toda la razón del mundo, por algo lo viste y por algo Dios te hablo, si mamita lo ves en cuanto lleguemos al departamento yo veré como llevo al Nelson un dia que estemos solos sin mis hermanos y el papa, a todo esto el papa no sabrá nada cierto ?? NOOOO noo hijo eso te iba a decir , será nuestro secreto cierto , tampoco le digas a José luis no confío mucho en el hijo sé que es tu amigo pero es mayor que tu y me mira mucho , y se que algo debe decir de mi,,,, ayyy mama !! de nuevo juzgando !! no seas así el José es un excelente persona y tampoco a podido estar con una mujer recuerda k el sufrió de poliomielitis de niño y su pierna es más delgada y eso lo acompleja mucho . tienes razón tesoro. pero cuando me vieron ese día en el rio y me desnude para bañarme , yo solo lo hice para que uds no se sintieran mal, como uds ya estaban los 3 piluchos, no quise ser menos en eso, no fue con mala intención hijo, LO SE MAMA lo se , ellos también lo vieron a si, y Jose luis te dijo algo demmi ese dia?? no mama , Y AGACHE MI CABEZA INISNUANDO QUE YO MENTIA, Ayy Alex dime la verdad que comentario hizo, estamos con confianza los dos cierto «!! si mama tienes razón. bueno obvio dijo que estabas muy buena, le impresiono que aun usaras bikini ( ella se rio coqueta ) que no se imagino nunca de k fueras tan bella que fueras tan blanca y que jamás pensó que tú fueras colorina o sea pelirroja ! yyy mi amor en serio se dio cuenta de eso tesoro ?? tanto asi me vio ????? sii mama es que se te vio todo jaja , pero no lo dijo en mala onda, al contrario en buena digo k adoraba las mujeres pelirrojas que eran las más hermosas y sensuales mujeres del mundo, aaaah y lo otro k le impresiono es k tuvieras tus pechitos tan pero tan firmes y paraditos me dijo. DE VERDAD ESO DIJO, TANTO SE FIJO EN MIS SENITOS ?’ si mamita asi dijo, jajaja ay dios jaja que fijado el jose luis, es que de verdad mamita quedo muy prendido de ti, no paraba de decirme tus cualidades, como que cualidades te dijo amor , bueno obvio que quedo impactado con tu gran trasero seria ciego si no lo viera (jaja jaja nos reimos los 2) tus grandes caderas tus bellos muslos, tu senos tan firmes y parados y tus pelitos de abajo es lo que más lo impresiono, le fascino, me decía que su mama o sea la tía Silvia tenia una champa fea y negra horrible jajaa y que tu en cambio como tus pelitos son tan rojos y son poquitos muy finos y como te depilas a los lados se ve mucho mas armonioso y elegante tu depilación , !eso te dijo!! si mamita te lo juro de rodillas ante Dios ! woooow hijo estoy impresionada x toda la atención que me dio el jose luis , ves mamita que no él no es malo, asi que en serio mamita nunca más tengas vergüenza si el jose Luis te ve algo o te ve media desnuda no te avergüences frente a él por favor , te lo digo en buena onda, nos haces sentir muy mal como que somos malos, pervertidos o medios degenereques , no le tengas vergüenza actúa natural frente a él, o con el Nelson o frente a mi por favor .bueno mi tesoro y gracias mi amor lo tendré en cuenta tesoro , no tendré mas vergüenza frente a él te lo prometo mi amor, eso mamita asi habla un verdadera católica y una verdadera samaritana de nuestra comunidad Franciscana e hija de Dios sin miedo ni vergüenza porque Dios siempre está a tu lado , muack te amo hijo, no se que haría sin ti tesoro eres un ángel de Dios mi bebito maduro, asi que ya estamos ok cierto yo voy a estar a tu lado para apoyar tu acto de amor y generosidad pero sobre todo de buena samaritana con el nelson cierto ? si mi amor jamás tendré nuevamente vergüenza anti ti nunca más mi amor eres mi tesoro que dios me dio, que bueno mamita a veces pensaba k ti sentías vergüenza de mi cuando te desnudabas y a veces te veía taparte frente a mí y me hacías sentir muy mal, como k fuese un pervertido al verte tus pechitos o tu cosita , ayyyyyyyy mi amor perdóname te lo juro k fue sin intención de ofenderte son tonteras mías no mas , mis trancas e inseguridades no más jamás pensaría eso de ti hijo, , si pero ahora mismo estas muerta de calor tienes tu cara roja y estas ahí con blusa y falda y yo solo en short porque no soporto la polera, y sé que quieres ir al rio pero no te atreves a que vayamos solos cierto, , ayy hijo tienes razón , si quiero ir a bañarme, pero aun es muy temprano acabamos de almorzar y si tengo calor y lo único que quiero es sacarme todo jajaa , sacatelo mamita sacatelo esta la puerta cerrada no hay nadie aca, bueno mi amor, ( se saca la polera sus senos blancos de pezones café parados al aire, se baja la falda y se saca el calzón quedando sus bellos púbicos rojizos al descubierto , baja la cabeza y se los mira y se ríe y me dice) jiji que me miras , te gustan a ti también mis pelitos ?? a quien no le gustaría mi mamita hermosa jijiji si es tan lindo tu color de pelitos ( se acerca a mí , me abraza toda desnuda, siento sus firmes senos duros en mi pecho y me dice con voz de madre amorosa y tierna ) te amo hijo mío, eres un ser humano perfecto tesoro y muy amable piensas más en los demás que en ti hijo , eres un candidato perfecto para algún día trabajar en la sacristía de la parroquia san francisco de asís y ayudar a los más necesitados. estoy orgullosa por lo que me ayudaste a ver que lo que el señor me había puesto enfrente y no lo había visto, te amo hijo gracias por ser como eres .
(Yo sabía que debía poner el plan en marcha y reafirmar esta postura a penas lleguemos a Concepción y al departamento, si no la idea de ver a mi madre con el Nelson Mongol se diluiría, llevamos 2 semanas de vuelta de vacaciones y el 3er sábado quedamos solos los 2 , mi padre en el trabajo y mis hermanos de paseo asi que fui de inmediato a buscar a Nelson al 2° piso y me lo lleve a mi departamento muy en silencio para que ningún vecino nos viera, entramos y lo lleve al cuarto de mi madre, ella aun no se había terminado de vestir eran las 9.40 AM y ya hacía calor pues aun era verano, estaba sentada maquillándose las pestañas y se giro al vernos de pie en la entrada de la puerta y se rio se sonrojo y dijo )).. ayyy hola pu Nelson como estas cariño, HOLA ,( la mire riéndome coqueto y le dije) aqui estamos mamita, nadie nos vio entrar, yaaa ayy mi amor mmm en serio amor ? ahora ?? estas seguro ?? Si mamita estoy muy seguro y tu estás segura de esto estas lista?? o ya te arrepentiste?? ayyy hijo no se estoy nerviosa aterrada por todo por tu padre si se enterase , por el Jose Luis si lo supiera también, y tengo un poco de miedo por esto también , así que te vas a arrepentir? entonces no importa mamá, ya le has fallado a Dios muchas veces así que una mas no le importara a él, pero lo malo es que en esta oportunidad de servirle a Dios, Dios me ilumino a mi esta vez y tú me haces cómplices de esa falta de compromiso y de voluntad, así que me dejas mal con el señor a mi también , pero no importa vámonos Nelson vamos a jugar Nintendo a mi pieza y que Dios me castigue …nooo alex noo hijo no permitiré que te Dios te castigue a ti por mi falta de voluntad, pasen los 2 no te fallare a ti mi tesoro, ni menos a Dios ( cerró la puerta , las cortinas y sentó a Nelson en la cama mientras yo estaba de pie al lado de su cómoda , ella se puso frente a Nelson se abrió la camisola de satín y la dejo caer al piso estaba con un calzón negro transparente muy pequeño. pero Nelson solo le miraba sus senos y ella le dijo )) que me miras tanto? te gustan mis tetitas ?? quieres tomar lechita de ellas mi amor ?? el nelson dijo SI!! (Y las succiono de una por una mientras mi mama le acariciaba su pelo y tomaba la otra teta ofreciéndosela a Nelson para que chupara las 2 sin parar) mmm que golosito estas mi amor estaba con mucha hambre de leche parece jijiji( se rie nerviosa) ayyy Nelson mmm sii te gustan mucho mis tetitas corazón mio ? SI TIA , ( vi a mi mama mecer su caderas siguiendo el ritmo de la succión de Nelson y miraba su hermoso culo cuando ella me miro nerviosa y con algo de vergüenza) Jijiji estas bien amor, no te molesta esto?? no se pone celosito al ver a la mamá?? no mamita linda estoy feliz por Nelson y por lo que haces Dios debe estar orgulloso de su cierva tan obediente , deberías tu tomar la iniciativa con el mamita ya sabes besarlo abajo un poquito para que se anime mas si hijo tienes razón el no hará nada no sabe , se me olvida a veces su condición, para ,mi solo es un niño mas
( se salió del frente de él Nelson no quería parar de chuparle las tetas a mi madre ella se salió tomo tu cara y lo obligo a soltar sus pezones y tomo la mano de Nelson lo puso de pie y se arrodillo frente a él para bajarle sus jeans y sus calzoncillos, el pene de Nelson ya estaba firme muy duro erecto parecía una verga de caballo por lo venosa y gruesa ella lo tocaba solo con la punta de las yemas de sus dedos acariciándolo con ternura y suavidad, después lo tomo con una mano y con un gesto de cariño y ternura lo beso primero muchas veces antes de abrir la boca y sacar su lengua y chupárselo, y lo miraba hacia arriba) el Nelson la miraba riéndose y exclamaba a cada rato ohh ohh ohh ahh aah oohh !!ella miraba la enorme verga de Nelson y lo miraba hacia arriba y Nelson en un movimiento de reflejo punteo con su verga dentro de la boca de mi madre y ella sintió como que se atoraba y lo tomo con ambas manos y aun así le quedo parte del pene y todo el glande libre sin sus manos, ella sintió que estaba lista, se puso de pie acostó a Nelson en la cama y ella se bajo sus calzones y los coloco a mi lado en la cómoda, se subió en él y con su mano acomodo la gigante verga dentro de sus labio vaginales y se acomodo y soltó un aaaaahh! Dios mío esto no puede ser señor santo, aaah virgen María dame fuerzas protegerme, y siguió de apoco moviendo sus caderas y hundiendo cada vez su enorme y blanco culo en la enorme verga de Nelson Mongol. no parecía lograr la penetración total no se si no se atrevía o no podía realmente pero se quejaba mucho así que intervine con un «mamita quizás deberías probar con tus piernas a los lados como sentada arriba de un caballo como afirmada en los estribos así como montas tu en el campo del tata, ella me miro con su cara roja y sus ojos medios dormidos si mi amor quizás así logre entrar mejor , espera Nelson no me voy a ir solo me voy a acomodar mejor mi amor para que tu estés mas cómodo y puedas sentir rico tu también ok tesoro! SI TIA YOLI. Abrió sus piernas y poso sus plantas de los pies firmes a los lados de las piernas de Nelson, se arrodillo como si fuese a orinar en un campo y me puse detrás de ella para ver como entraba esa verga y lo tomo con una mano se hecho un poco para adelante y pude ver su concha abierta y sus labios vaginales con una leche blanca era su lubricación vaginal, se sentó en la verga de Nelson y la hundió casi toda , ella agacho su cabeza y comenzó amover su caderas cabalgando a Nelson muy suave hasta que empezó a mover sus caderas con mas furia y vigor y soltó un largo y profundo aaaahhh!! y me di cuenta que estaba totalmente sentada con toda la verga dentro solo se veían las enormes bolas de Nelson abajo se movía mas y mas rápido hasta que Nelson dejo de mirar las tetas de mi madre y miro hacia abajo y empezó a gemir «ooh ooh ohh» y mi madre lo miro y se salió de un brinco y se puso a la altura de la verga de Nelson y se la echo toda a su boca todo el glande dentro y Nelson soltó un «oooh ohhh ooooooooooh!! y mi madre frenética y golosa se devoro todo el semen de Nelson sin dejar caer ni una gota a la cama, siguió pasándole su lengua y moviendo con una mano la verga para que no se agachara hasta que logro nuevamente ponerlo erecto y firme, volvió a la posición inicial y esta vez se la metió sin miedo completa adentro y con más rapidez y fuerza cabalgaba esa caderas de arriba abajo y me puse detrás de ellos y miraba su cara por el espejo de su tocador, sus firmes tetas y sus pezones cafés y puntiagudos saltaban rebotando como pelotas de baseball duras y firmes, hecho su cabeza completa hacia atrás y soltó un aaah aaa aaa aaaa y con su boca abierta su lengua colgando y sus ojos cerrados tubo un enorme orgasmo , bajo la cabeza abrió sus ojos y me miro y sintió vergüenza se tapo sus senos y se salió de Nelson, él aun estaba muy erecto y su pene parecía no terminar nunca de salir de la concha pelirroja de mi madre hasta que salió su glande y vi la vagina de mi madre abierta y mojada y saliendo y cayendo por sus muslos y en la cama un chorro transparente de liquido lubricante femenino espeso y en gran cantidad igual al voltear una botella de aceite a medio cerrar, se metió al baño y cerro su puerta y me acerque al charco de lubricante que había dejado en la cama aun tibio oloroso y mucho, no me aguante y pase mi lengua y lo comí por completo era delicioso un sabor salado y amargo al mismo tiempo una delicia el olor y el sabor, sentí a mi madre que ya venía del baño con una toalla al cuerpo , entro me miro se rio y me abrazo con cariño y me dijo Ayy Dios mío hijo fue increíble no creí que hubiese podido con el tesoro sentía que me estaba partiendo en 2 mi cosita mi amor, fue una odisea lograrlo, pero si se pudo y Nelsito quedo contento, estas contento te gusto mi amor SI TIA YOLI que rico mi amor ya tesoro ayúdalo a vestir para que se vayan a jugar Nintendo , le di un beso en la mejilla y le dije estoy orgulloso de ti mamita linda, eres muy buena , Dios debe estar muy orgulloso de ti mamita , pero no creo que Nelson esté listo míralo como esta, aun no se le ha bajado eso y aun te mira con ganas no creo que hayas terminado tu labor de buena samaritana aquí mamita, no señor!! jaja , yo creo que vas a tener que seguir un poco mas hasta que quede satisfecho mi amigo jaja jaja!! no seas pillita si vas a hacer una buena acción en el nombre de nuestro señor Jesucristo debes hacerla entera nada de medias tintas, así no es la voluntad de Dios es todo o nada mamita tu sabes bien de lo que hablo, ayy hijo mio ni te imaginas el tremendo esfuerzo que tuve que hacer para que tu amigo pudiera entrar por completo en mi tesoro, quede un poco adolorida de mi cuello uterino y creo que no podre de nuev… no lo digas mamita si sé que es difícil y que Nelson es enorme, pero pudiste y si vas a claudicar y negar a Dios y su voluntad de Dios como lo hizo Pedro con Jesús allá tu ,pero yo estoy en medio de esto y me arrastras a mí en tu falta de Misión con nuestro Señor Jesucristo, me entiendes?, todos los designios de Dios son difíciles pero ahí están las buenas y mejores ciervas de Dios siempre a su lado y sus más fieles soldados, no te voy a dejar caer esta vez yo estoy aquí para date valor y fuerza , (le arranque la toalla de su cuerpo y sus pezones seguían erectos me di cuenta de que estaba aun caliente por sentir de nuevo dentro a él Nelson Mongol.) ay Alex no se que haría sin ti tesoro eres un ángel de Dios mi tesoro, tan desinteresado y tan bueno en darle amor a los más necesitados.
se sentó desnuda al lado de Nelson y con una mano tomo de nuevo la verga de Nelson Mongol la movía de arriba abajo y se agacho a chupársela de nuevo, la sintió dura en su boca y se sentó pero esta vez le dio la espalda a Nelson y a mí , solo veía su enorme culo blanco bajar y subir por el tubo de verga de Nelson, en eso el Nelson se movió y se sentó y se salió de la vagina de mi madre y quiso por instinto tomar a mi mama a lo perrito, ella se giro y le dijo que paso ?? que vas a hacer Nelson ?? tranquila mama solo quiere acomodarse y no sabe yo le enseño déjame ayudarlo, tome a mi mama de sus caderas y me movía como penetrándola con mis ropas puestas obviamente . Gracias tesoro, que vas a hacer? alex alex que estás haciendo? tranquila Yolanda jaja solo le enseño como debe hacerlo no piensen mal Mamita, ayy mi amor disculpa es que me asuste me imagine otra cosa mi amor perdoname no quise asustarte.
Nelson entendió de inmediato y me corrió con fuerza desesperado por entrar en mi mama ella se acomodo con sus codos en la cama y su culo bien parado para recibirlo, Nelson estaba muy incomodo de rodillas en la cama y le dije espera mejor bájate y ponte de pie, mami mejor córrete al lado de la cama así el estará de pie y con mejor postura esta incomodo el pobrecito ahi, le cuesta mucho no tiene coordinación no puede , aaay ya sii mi amor tienes razón también estoy mas cómoda así tesoro , que dulce eres mi amor , le tomo las caderas a mi mama y la punteaba hasta que logro entrar en su vagina y mi madre salto un aaaaa aaaaaa, Nelson sintió de inmediato el gusto a esa profunda penetración y no paro de moverse con más y más fuerza cada vez y de la fuerza paso a la rabia al parecer, era su instinto animal de violador que tiene los S.de Down la tomo con fuerza punteándola con rabia y mas bríos cada vez parecía un semental culiandose a una yegua , con sus manos la tomo de los hombros y la tenia sometida completamente mi madre estaba como desesperada trataba de sacarlo con una mano hacia atrás aleteaba no podía hablar y con la otra se sujetaba de las sabanas para que Nelson no la tirase bajo la cama apretaba las sabanas con fuerza con una mano mi sometida madre, sus tetas se movían de arriba hacia abajo rebotando en su pecho su cabeza agachada y su boca abierta con su lengua colgando no pude mas y me pare frente a ella me desabroche mi pantalón y ella solo me miro hacia arriba y me saco mi verga parada y se la devoro con su boca obvio no tarde más de 15 segundos y eyacule como nunca, era acabar y acabar me salió creo que el chorro mas largo abundante y largo de mi vida, ella solo trago mi semen sin decir nada más que mm mm mm mm mm!! y Nelson seguía cada vez y mas golpeando su vagina con ese gigante martillo de 28 cms y yo seguía sintiendo una eyaculación cada vez menor y mi madre soltó un mudo mmm aaaa mmmm aa aa!! era su segundo orgasmo, Nelson al oír gemir a mi mama empezó a gemir también «aa aaa aaa» y ella se giro lo miro y dijo espera, espera Nelsito, y se echo esa cabeza de verga que solo podía con su Glande en la boca y volvió a eyacular en la boca de mi madre y ella muy golosa se lo devoro completo.
ella me miro avergonzada , complacida por ver a Nelson, pero no satisfecha note que aun ella quería mas porque no había logrado un orgasmo completo esta vez porque tubo que chuparle a Neslon, le dije » estas bien mamita ? no terminaste esta vez cierto yolita jaja!! jajaja ayy no mi amor la mamá no tuvo su premio jijiji ayy Dios pero no importa otra vez será no te preocupes hijo mío, ( se giro, se puso de rodillas encima de la cama y se estiro para tomar su bata de satín en la cama y pude ver su vulva toda chorreada de lubricación femenina, abundante fluido vaginal, eso me dijo que aun deseaba mas, me apure antes de que tomara la iniciativa de irse y le dije) Mamita sé que soy tu hijo y que no debo meterme en las cosas de tu y papá sabes a que me refiero cierto, hace cuanto que no disfrutabas algo para ti solo para ti, los dos sabemos cómo es el papa de egoísta a veces y de celoso, cuando vamos a tener de nuevo esta ventana que Dios nos regalo, esto es para Nelsito lo sé, pero también debe ser para ud mamita y sé que te mueres por seguir , piensa alguna vez en ti, pero hijo tu padre puede llegar en cualquier momento y me muero de vergüenza si.. ayy Yolanda basta no seas asi , el papá fue al campo y llegara a las 18 hrs mas menos, Lo sé mi amor pero creo que ya esta bueno no importa que yo no a haya podido otra vez pero mejor será que terminemos por hoy ,,,, ( la interrumpí) no Dice Jesús que debemos amarnos a nosotros mismos antes de los demás ?? mamita estas desobedeciendo e ignorando los designios del señor ….Ayyy mi tesoro hermoso tan bueno tan maduro que eres hijo mío, tanto quieres al Nelson y a mi hijito ?? No mama al Nelson lo estimo porque es mi vecino y amigo y por ser un hombre Mongolito pero a ti te amo porque te mereces esto y más solo dime la verdad quiere seguir un poco mas quieres tener tu regalo tu orgasmos? (Su mirada bajo avergonzada y me dijo) Si hijo si quiero no se hable mas , solo míralo al pobre Nelson como te mira con las ganas ven Nelson párate de esa cama y se puso detrás de mi madre la tomo de las caderas y en seguida subió sus manos a las tetas de mi mama y se las tomaba con fuerza apretándolas con mucha fuerza , mi mama hecho su cabeza para atrás en señal de sumisión , sus piernas se abrieron y aproveche para tener mi oportunidad, y le dije que hermosa vagina tienes mamita me agache y se la bese con mi lengua pasándola por sus vellos rojizos y su clítoris duro que sentía en mi boca , me tomo del pelo en señal de cariño con suavidad y me hundió mi cabeza en su concha con fuerza, ella sola se hecho para atrás sentó a Nelson en la cama y se acomodo esa gigante Verga en la entrada de su ano y soltó un aaaaaa aaaaaa aaa y Nelson la hundió por completa dentro de su ano , ella abrió sus piernas y se hecho para atrás y se veía enorme de gruesa, sus grandes caderas, sus muslos enormes sus tetas agarradas con las manos de Nelson y me acerque y la penetre por 1a vez en mi vida fue algo morboso caliente ardiente sentí su concha ardiendo senti como mi glande ardía de lo caliente que tenía su vulva por dentro, sentí casi que me quemaba de lo caliente que estaba y ella en segundos empezó a tener un orgasmo tan largo y placentero que parecía no acabar aaa aaaa aaa mm aaa ammm aaaa aaa mm aaaaaa aaa aa aaa aaaa ammm aaaa mmm aaaa mmm aaaa aaa sigue sigue aaa aaa amm mmmm aaaa mmmm aaaammm aaa . Yo de inmediato empecé con lo mismo y ella me dijo noo no acabes dentro de la mamá Alex sal, sale por favor no termines en mi hijo no lo hagas ella no podía moverse Nelson la tenia sometida y en ese instante Nelson empezó a eyacular dentro del ano de mi mama y se cayó de espalda soltando las tetas de mi madre , completamente descansado liberado y a gusto y ella lo miro para atrás y solo se entrego a Nelson y con su mano empujaba mi pecho para sacarme con más fuerza y me lo logro sacar dentro de su concha y mi verga estallo con un chorro de semen que le cayó en sus senos y en su estomago chorreando para abajo, no acabe dentro de ella y le dije porque hiciste eso ?? ella se hecho para adelante y se bajo de Nelson un chorro inmenso de semen salio chorreando por sus muslos hacia sus tobillos , ella con sus dedos saco mi semen de sus senos y se lo echo a su boca y después hizo lo mismo con el de su estomago también lo saco y lo saboreo , tomo una toalla y se limpio las piernas, sus tobillos y se la paso por detrás entre sus glúteos y me dijo Hijo se que Nelson no me puede embarazar, pero tu si puedes te imaginas lo que sería eso , sería un desastre tu padre jamás me lo perdonaría me mataría a patadas y me echaría a la calle los sabes cierto? si mamita lo se perdóname es que pensé que te daba asco mi semen en tu boca y el de Nelson así que creí que sería conveniente terminar en ti mejor para no dejarte con esa sensación de asco de obligada..nunca digas eso tesoro jamás tendría asco de ti hijo, al contario estuvo exquisito el tuyo mi amor y el de Nelson también estaba rico, con nelson lo hice porque si bien es cierto que ellos no pueden engendrar pero siempre hay posibilidades que si pase, yo tomo anticonceptivos pero así mismo quede embarazada de ti tomando pastillas, nada es 100% seguro hijo a sí que prefiero asegurarme bebiendo eso de uds mis amores. Nelson se quedo dormido desnudo en la cama de mi mama con su gruesa y gigante verga lacia y con gotas de semen aun en la punta de su glande mi madre dijo No lo despiertes alex, déjalo descansar un rato , ella se agacho tomo su verga le paso la lengua en su pene, le limpio el resto de semen que tenía su verga , fue a su cómoda saco unas toallitas húmedas y le limpio completo el pene a Nelson, el siguió durmiendo, me miro un poco nerviosa y un poco avergonzada y sus mejillas rosadas, se rio un poco me abrazo y yo a ella de sus caderas y un poco de sus nalgas y me dijo gracias Alex esto es lo más hermoso que he hecho en toda mi vida de Cristiana no sabes lo feliz y llena que me siento hijo mío, me sentí muy cómoda y segura a tu lado con tu compañía tesoro, eres un ángel de Dios mi bebito , gracias por darme esta oportunidad de servir al prójimo hijo te amo, y yo a ti mamita , me siento muy complacido también fue hermoso para mi poder estar dentro de ti y sentir tu vagina por primera vez mamita me encanto esa sensación tienes un cuerpo maravilloso con razón el José Luis te desea tanto , no te había visto así antes como una mujer solo ante mis ojos eras mi mamita linda cariñosa, devota de nuestro señor pero jamás pensé k eras una mujer, le voy a dar las gracias al José Luis por abrirme los ojos y poder verte no tan solo como la mamá que me hace las cosas si no también como la gran mujer e hija de Dios que eres, Ayyy que hermoso lo que me acabas de decir hijo, gracias por notar que soy un ser humano una mujer de verdad que José Luis se a pasado por enseñarte a verme también como una mujer voy a tener que agradecerle en persona a tu amiguito ,pero no seas mentiroso no es la 1a vez que estas en mi vagina jaja jaja queee?? como mamita yo recordaría si hubiera hecho esto tan hermoso antes jajaja a que te refieres jaaj aja?? ayy tesoro si pásaste por mi vagina al nacer y te demoraste tu buen rato en salir y pasar por ahí recuerda que no querías salir y tu cabecita estaba atorada en mis labios vaginales y tuvieron que sacarte con fórceps por que eras muy cabezoncito hijo mío jaja ajaj (nos reímos los 2 abrazados, ella se soltó y cubrió a Nelson con un cobertor y lo dejo dormir y se fue al baño a ducharse) luego les contare como fue que la convencí de atender también a José Luis y después a Nelson y a los 3 juntos, .Todo por su gran devoción a nuestro señor Jesucristo y su Iglesia de san Francisco de Asis
relatos eroticos
Mi hermana es 2 a&os menor que yo. Toda nuestra infancia y en realidad toda nuestra visa la vivimos juntos, unidos.
En esa epoca nos dormian juntos, nos ba&aban juntos y jugabamos y siempre mi pene salia en todos los juegos, ella me lo agarraba y yo sentia mucho placer.
Solo unos pocos detalles, al dormirnos juntos, abajo de las cobijas yo sacaba mi pene y se lo saba y ella lo agarraba y jugaba con el. Cuando nos ba&aban o nosotros solos despues, ella lavaba mi pene y tambien se recargaba en el y siempre me lo ponia super erecto. En nuestros juegos el pene era el arma mas poderosa, asi que al jugar con mu&eqitos de plastico y los malos iban ganando, ella sacaba mi pene y hacia disparaba a los malos y asi ganaban los buenos. O sea toda nuestra infancia ella jugo con mi pene y a mi me encantaba pues sentia muy rico. Recuerdo algo muy importante, le gritaba a mi hermana para que fuera a bajarme y subirme el prepucio varias veces pues eso me encantaba. Y ojo, pues esto fue algo muy importante para que ella me lo agarrara ya de grande de nuevo.
Puesresulta que cuando dejamos de jugar con mi pene, me dio fimosis, la piel del prepucio se pego al glande y solo dejo un peque&o orificio para poder orinar..
Y lo dejamos de hacer cuando crecimos, pero yo en secundaria, bachillerato y hasta la Universidad siempre la deseaba sexualmente y me imaginaba volver a jugar a cuando eramos ni&os.
Pues bien, se me cumplio. Ya ambos en la Universidad, estabamos solos en casa y yo toque el tema de que ya nunca me podria hacer en mi pene lo que me hacia de ni&a. Ella interesada me pregunto que era. Yo ya lo habia pensado y planeado, entonces le dije, prestame tu mano mejor pues no se como explicarlo, y ella emocionada, eso me encanto, pues ahi me di cuenta ella tambien queria agarrar de nuevo mi pene. Me dijo, voy a lavarme las manos, esperame, yo aprovecho y saco mi pene ya super erecto pues sabia lo que pasaria.
Ella llega y le digo, prestame una mano, ella me la da y yo la pongo en mi pene todo super duro y erecto mmhhh despues de tantos a&os mi hermanita estaba agarrando de nuevo mi pene mmhh que sensacion su piel en mi pene wow, no podia creerlo, yo tratando de verme calmado le digo agarrando su otra mano y poniendola en la punta del pene, le digo, trata de bajar la piel como lo hacias de ni&a, ella lo intenta varias veces pero logico no pudo, miientras yo mmhh sientiendo regreso el tiempo, sus manos agarrando mi pene mmhh que sensacion mas placentera.
Ella me dice, no se puede bajar, le digo, exacto, eso te queria decir. Ya ella suelta mi pene y me dice, tienes que ver al medico.
Yo ya lo guardo y platicamos de otras cosas, pero wow, al retirarme no podia dejar solo hubiera sido un episodio que se acabaria, no odia dejar hasta aji llegara, tenia que aprovechar el momento y eso hice.
Ya con la confianza de que me lo habia agarrado el dia anterior y sabiendo a ella le gustaba dibujar caritas graciosas, fui a su recamara con mi pene medio salido y un plumon y un recorte de una carita graciosa. Entonces le digo, me puedes dibujar esta carita en el pene? no sabia como iba a reaccionar, me arriesgue, ella me ve y ve al pene ya casi salido y me dice, si wow !!!! que lo saco todo hasta los testiculos y tomo de nuevo su mano y la pongo en mi pene super duro y erecto mmhh ella lo aprieta fuerte y sentia tambien le hacia fuerza hacia abajo, como keriendo se bajara el prepucio, eso me lo confeso despues, me hacia esa fuerza hacia abajo para ver si ella podia hacer se bajara de nuevo wow, en verdad muy linda mi hermana.
Le doy el plumon y empieza a dibujar la carita que le llevaba de muestra. Wow, sentir su mano en mi pene y agarrandolo con fuerza mmhhh no cambiaba esos momentos por nada del mundo mmhh
Acaba y wow, me lo suelta y le digo gracias me encanto mmhhh
Y es que si hacia las caritas super bien, pero lo que mas me gusto despues ella me propuso que mejor saliera de su inventiva las caritas en vez de llevarle un modelo wow, eso me encanto.
Y ese fue el principio de que mi hermana ahora ua grandes en la Universidad jugaramos con mi pene de nuevo mmhhh muchas cosas jugamos super ricas, eso si con reglas de ella y mias, je
Mi hermana es 2 a&os menor que yo, toda nuestra infancia jugamos juntos y siempre ella agarraba mi pene y eso me hacia sentir muy rico.
Despues contare como fue que hice de grandes reomaramos esos juegos de ni&os.
Ahora contare un episodio de mi vida con ella ya grandes ambos en la UNiversidad nunca lo olvidare
Era mi cumplea&os, Y mi hermana siempre me daba un regalo personal hacia mi. Ese dia me prepare, saque de mi trusa mi pene ya todo erecto pues ya sabia a lo que iba y tambien los testiculos, y deje el cierre del pantalon a la mitad para sacarlo mas facil. Y llevo un plumon.
Entro a su recamara y la veo sentada en la orilla de su cama leyendo una revista, me siento a su lado y le digo, por mi cumplea&os me dibujas una carita en el pene? Y ella sin verme me dice, si, claro. WOW bajo todo el cierre y saco al pene y testiculos muy facil, le tomo su mano izquierda y se la pongo agarrando al pene todo erecto, ella lo aprieta con fuerza, asi era la costumbre de los dos.
Le doy el plumon, ella empieza a dibujar la carita graciosa en la cabeza del pene mmhh que rico sentir su piel en mi pene, una sensacion super placentera mmhh
Y ese dia, no se el por que, nunca lo habia dicho nunca, pues en muchas ocaciones ella acababa de dibujar la carita y seguiamos platicando y ella agarrandolo o jugabamos a varios jueguitos con el pene.
Pero ese dia ya cuando ella termina, le digo agarrando su mano y dirigiendola, si haces tu mano hacia arriba del pene llevas su piel y los ojos que dibujaste se hacen mas chicos, y llevandola de nuevo le digo, y si haces para abajo la piel, los ojos de hacen muy grandes, ahora hazlo tu. Asi le hacia la mayoria de las veces, primero le ense&aba como hacer las cosas y despues le decia ahora ella solita las hiciera, y saben? siempre las hacia bien o mejor.
Entonces yo pense, lo hara 2 o 3 veces y ya.
LO hace 1 mmhh que rico, 2 mmhhh ricoooo, 3 mmhhh, 4 wow, que ricura siento, 5, 6, 7 … y wow, no paraba , y yo sintiendo super rico mmhhh, veo el escenario, en su recamara, solos, juntos, yo con el pene y testiculos salidos y mi hermana agarrandolo y ya viendolo bien masturbandomelo, pues hacia esos movimientos ritmicos hacia arriba y hacia abajo wow, sentia super rico mmmhhh
Y claro, como no paraba llego el momento en que senti ya iba a salir el semen mmhh pero no queria hacer nada pues sentia muchisimo placer.
Y paso lo que tenia que pasar, llego el momento de que senti super delicioso y explote, salio toda la eyaculacion en 3 y 4 chorros. Ella nunca solto el pene, lo seguia agarrando, entonces yo me estiro y agarro un pa&uelo desechable, le limpio el semen de su mano y del pene, agarro mas kleenex y ella ya lo suelta y le limpio toda su mano, tambien limpio todo mi pene y el semen que habia caido al suelo.
Ella me ve y me pregunta, ese es el semen? Yo le digo, si, es que me hacias tan rico que no aguante y salio. Ella me ve y se sonrie, yo tambien me sonrio y nos vemos asi por unos segundos, yo ya guardo el pene y salgo de su recamara.
Y en el camino wow brnco de felicidad !!! mi hermana me hizo eyacular con su mano mmhh que momento tan placentero, nunca lo habia experimentado en mi vida.
Empezaba a estar cansada de tener que aparentar siempre ser una chica ejemplar. Todo el mundo esperaba eso de mí, pero yo deseaba romper con todo y empezar a hacer lo que me diera la gana. Tenía veintinueve años y llevaba toda la vida haciendo lo que los demás querían, procurando contentar a todos, sin recibir nunca nada a cambio, ni siquiera un agradecimiento.
Mis padres estaban separados desde que era pequeña. Discutían cuando estaban juntos y lo seguían haciendo una vez separados. Yo siempre estaba en medio y no tenía más opción que darles la razón a uno y otro, aunque ninguno de los dos la tuviera nunca. Si no les decía exactamente lo que querían oír, ya pensaban que estaba de parte del otro. Deseaba haber tenido algún hermano con quien compartir esa carga, pero era hija única.
Con mi novio la situación era peor todavía. Llevaba con el casi diez años, aunque ni siquiera sabía por qué. Llevábamos tanto tiempo juntos que ya me había resignado a que esa tenía que ser mi vida. Iñaki era un hombre machista y celoso, con él nunca podía expresarme con libertad por miedo a sus enfados. Nunca me había puesto la mano encima, pero lo temía. También teníamos momentos buenos, pero cada vez eran menos frecuentes.
Durante una época, el trabajo fue mi única vía de escape. Siempre tuve claro que quería ser profesora y trabajar con niños pequeños, se me daban bien. Pero cometí el error de querer crecer en mi oficio y me especialicé en inglés. Como estaban muy contentos con mi forma de dar clase, la dirección decidió ascenderme a maestra de bachillerato. De repente, me vi en un aula rodeada de jóvenes de entre dieciséis y dieciocho años. No estaba acostumbrada a lidiar con chicos de esa edad, y ellos tampoco lo ponían nada sencillo.
Aun así, preferiría estar en el trabajo antes que en casa. Iñaki se había quedado en el paro y era una tortura aguantarlo durante todo el día. Me tenía que encargar de todas las tareas de la casa porque él no hacía nada. Durante un tiempo, por lo menos podía decir que era bueno en la cama, pero desde que comenzó a consumir sustancias ilegales, había perdido la fuerza entre las piernas. Cuando se ponía violento, era la forma que tenía de calmarlo, pero ya había perdido esa opción, y eso lo ponía todavía más agresivo.
En el colegio todo era un caos. Quedaban semanas para los exámenes finales y tenía varios alumnos en la cuerda floja. Algunos de ellos se esforzaban, algo que siempre tenía en cuenta, pero había otro que pasaba de todo. Sergio era un joven inteligente que había llegado hasta segundo de bachillerato y, por algún motivo desconocido, a partir de ahí dejó de prestar atención en clase y de esforzarse. Por más que intentara hablar con él, solo recibía malas contestaciones.
– Tienes muy buenas notas del curso pasado, si te esfuerzas, te llegará la media.
– Paso de estudiar. Dentro de una semana cumpliré los dieciocho.
– ¿Eso qué tiene que ver? Se puede estudiar durante toda la vida.
– Me iré con mi viejo a descargar camiones. No voy a acabar el curso.
– ¿Él quiere eso para ti?
– Da igual lo que quiera, hace falta el dinero en casa.
– Si quieres, puedo hablar con él. Encontraremos una forma de…
– No te metas en mi vida, zorra.
Nunca permitiría que un alumno me insultara, ya aguantaba suficiente en cada, pero prefería no complicarme más la vida por un niñato al que solo tenía que aguantar durante una semana más. El problema fue que dedicó ese tiempo a torpedear mis clases, aunque de una forma que me resultaba muy desconcertante.
Aunque mi novio me obligaba a vestir con ropa ancha, nada que pudiera provocar a otros hombres, debajo escondía una buena figura que no pasó inadvertida para Sergio. La primera vez que hizo referencia a mi cuerpo delante de sus compañeros lo pasé muy mal, me puse colorada como un tomate y lo expulsé inmediatamente de clase. Le había pillado despistado, mirando por la ventana, y al pedirle que se concentrara en el libro, me dijo que prefería verme las tetas.
Pese al mal rato, no le quise dar más importancia. Lo interpreté como una falta de respeto, una simple provocación. Pero no quedó ahí. En la siguiente clase, tenía que asegurarme de que todos los alumnos habían hecho los deberes. Estaba convencida de que Sergio no los tendría, pero debía cumplir con mi obligación. Tal y como era habitual, no se había molestado siquiera en comenzarlos.
– Sé que te vas en unos días, pero, hasta entonces, tienes que hacer los deberes.
– Tengo cosas mejores que hacer.
– ¿Sí? Dime una.
– Pensar en cómo puedo conseguir follarte ese culazo.
– Te va a ir fatal en la vida.
– Pues como a ti, que estás amargada.
Era el tipo de grosería que solía decirme mi novio en otros tiempos. Un lenguaje brusco y vulgar, pero conseguía encenderme porque sabía lo que venía después. Nunca hubiera tolerado que otro hombre me hablara así, mucho menos un alumno, pero llevaba tanto tiempo sin escuchar la más mínima alabanza a mi cuerpo, que me produjo un cosquilleo que me vi obligada a disimular.
Llegué a casa con el ánimo subido. Me seguía preguntando si solo lo decía para enfadarme, pero prefería pensar que ese jovencito se fijaba realmente en mi cuerpo. Todo lo contrario que mi novio, que me esperaba tirado en el sofá sin más saludo que un gruñido y querer saber qué le iba a preparar para cenar. Pensaba en que ojalá Sergio no teeminara siendo un gañán como Iñaki.
Al día siguiente, debajo de una gruesa chaqueta, me puse unos pantalones ajustados y una camiseta ligeramente escotada. Como mi novio dormía hasta el mediodía, ya no revisaba mi ropa todas las mañanas, como solía hacer, pero siempre tenía que tener la precaución de cubrirme con algo, por si acaso.
No tenía clase con segundo hasta última hora de la tarde. Tuve la chaqueta puesta hasta ese momento. Nada más entrar al aula, me despojé de esa pesada prenda, captando la atención inmediata de Sergio. Se mantuvo callado, no hizo ningún tipo de comentario. Eso me alivió y molestó a partes iguales. Esperaba que dijera algo que me demostrara que su deseo era real, que no era solo provocación, ya que le estaba mostrando que realmente tenía un buen par de pechos y un trasero formidable.
Desanimada por la falta de reacción, mandé que se leyeran la última lección. Yo no dejaba de mirar a Sergio, esperando alguna señal por su parte. Cuando por fin se dio cuenta de que lo observaba, levantó la cabeza del libro y, en silencio, se llevó dos dedos a la boca, los colocó en forma de V y comenzó a sacar la lengua de forma obscena. Eso me provocó un calor inmediato entre las piernas. Cuando terminó la clase, mandé a todos a recoger sus cosas, menos a mi alumno más díscolo, tenía algo que tratar con él.
– ¿Te parece bonito hacerle eso a tu profesora?
– Mañana es mi último día aquí y no me toca inglés, así que ya no lo eres.
– ¿Y por eso me puedes faltar al respeto?
– No disimules, África, sé que te ha gustado.
– Ya me llamas por mi nombre y todo.
– Claro, hay confianza.
– ¿Eso piensas?
– Sí, solo hay que ver cómo te has vestido para despedirme.
– Eres un poco egocéntrico, ¿no?
– ¿Me vas a decir que no te gusto?
– Ni siquiera un poquito.
– ¿Me apartarías la boca si intentara besarte?
– Sí, y te cruzaría la cara de un bofetón. Ya no eres mi alumno, ¿recuerdas?
– ¿Y si te tocara las tetas?
– En ese caso, además de darte yo, mi novio te daría una paliza.
– Estoy seguro que que él no puede sobarte el coño tan bien como yo.
– ¿Has tocado muchos?
– Unos cuantos… y todas gimen como perras.
– A todos los chulitos se os va la fuerza por la boca.
Después de decirle eso, se acercó a mí, colocando su cuerpo junto al mío, me miró a los ojos en silencio, durante unos segundos. Acto seguido, me agarró el culo fuertemente, con las dos manos, y me empotró contra la pizarra para meterme la lengua hasta la campanilla. Tras un beso largo que me dejó sin aliento, se fue de la clase sin ni siquiera despedirse. Me quedé de pie, con la boca todavía abierta y las piernas temblando.
La emoción había vuelto a mi vida, aunque fuese de forma muy fugaz. Necesitaba tener una aventura, algo que me hiciese sentir que todavía estaba viva. Pero no podía olvidar el gran peligro que suponía que Iñaki llegara a sospechar algo. Cuando llegué, fui directa a mi habitación para quitarme la ropa antes de que mi novio me viera. En casa tampoco podía ir demasiado fresca porque le recordaba su impotencia y se ponía de mal humor.
Aunque intentara fingir normalidad, me costaba ocultar la sensación de alegría que inundaba mi cuerpo. Estaba preparando la cena y, de forma inconsciente, iba tarareando algunas canciones. Algo que sorprendió a Iñaki, acostumbrado a verme triste y atemorizada.
– ¿Tú por qué estás tan contenta?
– No lo sé, porque empieza a hacer buen tiempo, supongo.
– Ya, pero no se te ocurra quitarte el jersey en el puto colegio ese.
– Tranquilo, no me lo voy a quitar.
– Podría parecer que buscas que algún profesor te folle.
– Sabes que casi todo son mujeres y hombres casados.
– Tampoco me fio de tus alumnos, a esa edad solo piensan en meterla.
– ¿Y de mí te fías?
– Pues no demasiado, aunque sabes lo que te esperaría si me engañas.
Sí que lo sabía, pero en ese momento, la ilusión le podía al miedo. Fue por ese motivo, que la mañana siguiente me animé a ponerme una falda que me llegaba justo por encima de las rodillas que había comprado años atrás y mantenía escondida. Era el último día de Sergio y quizás tendría la oportunidad de poder despedirme de él, en el día de su cumpleaños.
Quedaba una clase para terminar la mañana y todavía no me había cruzado con él. Yo tenía la siguiente hora libre y me dirigía a la sala de profesores para corregir unos exámenes. Fue entonces cuando lo vi, entrando en una pequeña aula en la que les solía poner películas en versión original subtitulada. Como profesora, estaba obligada a averiguar qué hacía allí un alumno.
Me acerqué de forma sigilosa y abrí la puerta con cuidado. Esperaba encontrarme cualquier cosa, menos lo que vi. Sergio había bajado las persianas y estaba sentado al final de la clase, a oscuras. Parecía estar llorando. Al verme, se limpió rápidamente las lágrimas. Me acerqué para sentarme a su lado.
– ¿Qué haces aquí?
– Tenía educación física, no quiero arriesgarme a una puta lesión.
– No hace falta que hables así, sé que estabas llorando.
– Estás flipando, ¿por qué iba a llorar?
– No lo sé, dímelo tú.
– ¿Crees que ha sido fácil renunciar a mis sueños para ayudar a mi familia?
– Seguro que no. Pero, si os urge el dinero, ¿por qué has esperado a los dieciocho?
– Es la única condición que puse.
– Entonces, ¿por qué no has aprovechado este año?
– Porque no iba a servir de nada. Solo quería estar un año más con mis amigos.
– No eres el malote que aparentas ser.
– Mi padre me ha presionado durante todo el curso, pero apareciste tú…
– ¿Qué quieres decir?
– Que si no he cedido a su presión, es porque verte cada día era mi única alegría.
Su lado duro me ponía muy cachonda, pero descubrir su vulnerabilidad, sus sentimientos, me hicieron darme cuenta de que no solo necesitaba sentirme deseada, también ansiaba que alguien me amara y juntar, posiblemente por primera vez en mi vida, esas dos cosas.
Aunque fuese demasiado joven para mí, Sergio era un chico alto, guapo, con una buena musculatura. Tanto mi corazón como mi coño ardían en deseos por tenerlo dentro. Estaba dispuesta a entregarme a él, a sabiendas de que quizás no volvería a verlo. Pero podíamos ser descubiertos y yo me jugaba demasiado. Mi alumno me miraba, esperando a que tomara esa decisión que podía cambiar nuestras vidas.
– Sergio, creo que todavía no te he felicitado por tu cumpleaños.
– Te lo agradezco, África, pero no estoy para felicitaciones.
– ¿Y para regalos?
Antes de que pudiera contestar, me senté en sus rodillas y lo besé en los labios. Él me sujetó por la cintura y me devolvió todos los besos, con una delicadeza no mostrada hasta ese momento. El contacto de nuestras lenguas trajo la humedad a mi entrepierna y la dureza a la suya. Notaba su polla erecta contra mis nalgas y eso elevaba todavía más mi temperatura corporal.
– Sergio, solo tenemos esta hora.
– Lo sé, puede que después no nos volvamos a ver.
– Mi cuerpo es tuyo, sírvete.
Metío la mano por debajo de la falda y comenzó a subir por mi pierna. Me agarré a la su cuello para besarlo con más intensidad mientras sus dedos llegaban a la cara interna de mis muslos y seguían ascendiendo. Tras palpar mis braguitas empapadas, las apartó y comenzó a frotar con la palma toda la extensión de mi coñito. Hacía mucho que nadie me tocaba en mi zona más íntima. Tuve que cubrirme la boca para sofocar mis gemidos.
Poco a poco se fue animando y me introdujo dos dedos para masturbarme. Movía las caderas sobre él, estimulando aún más su abultado paquete. Llegó un momento en que ya no podía aguantar más. No me conformaba con tener dos dedos en mi interior, necesitaba que mi alumno me penetrara, que me follara ahí mismo.
Tomé la iniciativa y me levanté para desabrocharle el pantalón y bajárselo junto a la ropa interior. Tenía tan buena verga como habían intuido mis nalgas. Se la sujeté y, tras menearla un poco, me senté a horcajadas sobre él, clavándomela hasta el fondo. Por fin me sentía llena, poseída por la juventud de un cuerpo hecho para dar placer. Con los brazos alrededor del cuello de Sergio, que no dejaba de besarme por todas partes, moví las caderas para disfrutar del enorme falo que colmaba mi, hasta entonces, insatisfecha vagina.
La necesidad y el morbo estaban convirtiendo ese polvo en el más placentero de mi vida. Aferrada a sus hombros, comencé a botar sobre su sexo, procurando no hacer mucho ruido. Sergio metió la mano por debajo de la ropa, hasta encontrarse con mis tetas y pellizcar suavemente mis duros pezones, lo que me puso más cachonda.
En una triste silla de colegio, cabalgué con fuerza sobre mi alumno que, próximo al orgasmo, se sujetó a mi cintura para acompañar mis movimientos. Yo también estaba a punto de llegar al clímax y así se lo hice saber. Seguí rebotando mientras él embestía desde abajo, hasta corrernos de forma casi simultánea. No podía negarle nada, ni siquiera que descargara su semilla en mi interior, sin preocuparme las consecuencias.
– No quiero perderte, África.
– Si tú odias tu vida tanto como yo la mía, ¿por qué no huimos juntos?
Continuará…
Lo peor es cuando te pasas años planeando algo y se tuerce en el último momento. Aunque dicen que cuando una puerta se cierra, otra se abre. Eso es lo que me sucedió a mí, se me abrió una puerta al pecado y la lujuria.
Mi mujer y yo llevábamos años en lista de espera para poder veranear en el camping de moda. Desde que supimos que estaba embarazada de nuestra segunda hija, decidimos que sería el sitio ideal para las niñas. Un año más, habíamos vuelto a perder la esperanza de conseguirlo, pero a finales de julio quedó una vacante para agosto y nos llamaron.
El problema era que yo ya había hecho mi mes de vacaciones. Teníamos que dar una respuesta inmediata. Discutí con mi mujer todas las posibilidades, la forma de hacer lo mejor para nuestras hijas. Después de darle muchas vueltas, parecía haber una única solución posible.
– Cristina, esto lo hacemos por las niñas.
– Ya lo sé, Ismael, pero no voy a poder lidiar yo sola con ellas.
– Dile a tu madre que te acompañe.
– Entonces sería como cargar con tres crías.
– Inténtalo por ellas, yo estaré allí los fines de semana.
– ¿Te podrás apañar bien tú solo?
– Claro, hago los mejores bocadillos del mundo.
– ¿Y quién me va a hacer a mí cositas?
– Pues espero que nadie.
– A mí solo me empotra mi macho. Sabes que tenemos que ir a por el niño.
En aquel momento estábamos en una etapa muy sexual. En el poco tiempo libre que nos dejaban las niñas, buscábamos con ahínco un nuevo embarazo. El sexo con mi mujer siempre me pareció increíble. Había mucho amor y mucha química entre nosotros, estaba convencido de que la semana se me haría muy larga sin disfrutar de sus encantos.
La noche antes que se fueran, echamos un polvo de despedida brutal. Le encantaba que la pusiera a cuatro patas y me la follara todo lo duro que pudiera. Antes de casarme había estado con unas cuantas mujeres, pero ninguna con tanto vicio ni tan habilidosa en la cama. Además de cabalgar como una auténtica amazona, me hacía unas manadas que me dejaban seco.
Después de aquella sesión de sexo, estuve a punto de mandar a la mierda el trabajo e ir detrás de ella, hasta el fin del mundo, con tal de seguir manteniendo sexo diario con ella. Pero las obligaciones mandaban y me iba a tocar estar unos días alejado de mi familia. En mi último día de vacaciones, llevé a mis tres chicas al camping y volví con la tristeza de separarme de ellas y de tener que volver a trabajar.
Yo era redactor jefe en un periódico de tirada nacional. Me había costado llegar hasta ese puesto que me permitió dejar de pasar horas en la calle al pie de la noticia y me dio una buena estabilidad económica. Me gustaba mi trabajo, pero había días que se hacía muy pesado y solo pensaba en volver a casa junto a mi mujer. Con la faena acumulada tras las vacaciones y sabiendo que nadie me esperaba, el primer día acabé haciendo alguna hora extra.
Cuando llegué a casa ya era de noche. A esa hora ya solía estar siempre en la cama, pero ese día ni siquiera había cenado. Fui a la cocina a prepararme uno de mis famosos bocadillos y, a través de la ventana que daba al patio interior, pude ver a la vecina nueva. Según mi mujer, la chica acababa de romper con su novio y había alquilado un piso en nuestro edificio. Nunca me había cruzado con ella, era la primera vez que la veía y me causó muy buena impresión.
El día siguiente fue más o menos igual. Me volví a encontrar a las tantas teniéndome que preparar algo rápido que llevarme a la boca. Miré hacia la ventana de nuevo y ahí estaba la vecina. Pero lo que vi fue mucho más interesante que el día anterior. Apagué la luz para camuflar mi presencia y me quedé mirándola. Estaba tumbada en su sofá y, aunque estaba lejos, pude ver que no llevaba más ropa que unas braguitas negras. Dos grandes tetas al aire buscaban el inexistente fresco de una noche sofocante. Con la imagen de esos dos melones, me fui a la cama, deseando que mi mujer hubiera estado ahí para recibir la erección que acababa de tener.
El miércoles hubiera sido un día de trabajo igual que los dos anteriores si no fuera porque no me podía quitar de la cabeza las tetas de la vecina. Volví antes a casa, ansioso por asomarme a la ventana, pero no la vi aparecer hasta la hora habitual. Vi como cenba en el sofá y posteriormente se quitaba la camiseta y se estiraba para ver la televisión. Todo transcurría de la misma forma que la noche anterior, incluida mi excitación, hasta que se introdujo una mano en las braguitas. Se tumbó boca arriba y comenzó a masturbarse lentamente. Agazapado tras la pared, asomando únicamente los ojos por la ventana, no pude evitar sacarme la polla para pajearme a su ritmo. Con una mano entre sus piernas y la otra apretando uno de sus grandes senos, comenzó a gemir. Aunque ese sonido llegaba a mí de forma muy leve, fue suficiente para que descargara varios chorros de semen que pusieron la cocina perdida.
El cuarto día fue una mezcla de excitación y remordimientos. Aquello había sido lo más cerca que nunca había estado de engañar a mi mujer. Con esa carga de conciencia, aproveché la hora de la comida para llamar a Cristina.
– Cariño, ¿cómo va todo?
– Muy bien, mi amor, esto es genial.
– Me alegro mucho. Seguro que las niñas se lo están pasando en grande.
– Sí, pero te echamos de menos. Estamos deseando que llegue el sábado.
– Yo también. Tengo que volver al trabajo, muchos besos para las tres.
Realmente las echaba de menos, pero no pensaba en nada que no fuera volver a casa y tener la suerte de volver a disfrutar de un espectáculo como el de la noche anterior. Y así fue. La vecina estaba volviéndolo a dar todo en su sofá. En esta ocasión, incluso se quitó la ropa interior y, abierta de par en par, se masturbaba de forma frenética. Guiado por mis impulsos, sin pensármelo dos veces, me dirigí hacia su casa y llamé a la puerta. Cuando me abrió, la cubría únicamente una camiseta. No llevaba nada debajo, se le marcaban mucho los pezones.
– Buenas noches, soy Ismael, el vecino de enfrente.
– Buenas noches, yo soy Míriam. Conozco a tu mujer.
– Sí, lo sé, me ha hablado de ti, pero nunca nos habíamos cruzado.
– Pues no. ¿Sucede algo?
– Es que en mi habitación se escuchan unos golpes y me preguntaba si el ruido venía de tu casa.
– No lo creo, porque yo no he escuchado nada. Estaba en el salón, viendo una película.
– Será de otro vecino. Siento haberte molestado, si oyes algo o necesitas cualquier cosa, ya sabes donde estoy.
– Gracias, lo tendré en cuenta.
Fue un gran error por mi parte. Lo único que conseguí con esa mentira improvisada fue perderme un nuevo show erótico por su parte. El conocerla me puso todavía más cachondo. Además de tener un cuerpazo, era una joven muy atractiva y bastante agradable, pese haberla interrumpido en un momento así. Pero era mejor que comenzara a olvidarla, salvo que se me ocurriera un plan más elaborado.
Pasé el viernes entero pensando en cómo podía volver a establecer contacto con ella sin resultar demasiado descarado. Se me ocurrió algo que, como mínimo, la podría atraer a mi casa. Así que ese día no hice ni un minuto extra, me fui con la idea de poner mi plan en marcha de inmediato.
Había aprovechado mi mes de vacaciones para hacer bastante ejercicio, así que esperaba que mi buena forma me echara una mano. Cuando llegué a casa, fui directo a mi habitación y comencé a dar golpes en la pared desde la que supuestamente escuchaba los ruidos la noche anterior. Estuve golpeando hasta que llamaron a la puerta. Tenía que ser ella. Estaba sudando, así que me quité la camiseta para lucir bíceps, pectorales y unos incipientes abdominales.
– Hola, Ismael, he escuchado los ruidos que mencionaste anoche.
– Sí, yo también los oigo. Viene de mi cuarto.
– Pues son bastante molestos.
– ¿Quieres pasar para ver si entre los dos encontramos la causa?
– De acuerdo.
Míriam llevaba un top y unas mallas que le hacían un culo hipnótico. Me di cuenta de como se fijaba en mi musculatura, todo estaba saliendo a pedir de boca. Buscamos de donde podría provenir un sonido que, evidentemente, en ese momento no se escuchaba. Después de unos minutos, parecía decidida a volver a su casa.
– Míriam, ¿quieres tomar algo en lo que esperamos a ver si vuelve el ruido?
– No es necesario, no quiero molestar.
– No es molestia , mujer, somos vecinos y no sé nada de ti.
– Es que no hay mucho que saber. Tengo veintiséis años y soy aspirante a actriz.
– ¿En serio? Qué interesante.
– Debe de serlo solo para ti.
– ¿Por qué dices eso?
– Porque no me cogen en ningún casting. Y mi novio… bueno, mi ex no creía en mí.
– Supongo que os separaríais por eso.
– En gran parte, sí.
– Pues déjame decirte que él se lo pierde. Eres una joven preciosa y salta a la vista tu talento.
– Te lo agradezco mucho, Ismael. A veces hace falta unas palabras de ánimo, aunque provengan de un desconocido sin camiseta.
– Querrás decir de un vecino sin camiseta.
– Tienes razón. Tú también eres muy atractivo, por cierto. Tu mujer tiene suerte.
– Mi mujer no está ahora aquí.
– ¿Dónde está?
– Se ha ido de vacaciones con las niñas y me ha dejado aquí solo.
– Parece que a ti tampoco te valoran mucho.
– Los dos merecemos más.
Llegados a ese punto, estaba convencido de que yo era mejor actor que ella. Inconscientemente, mi vecina no dejaba de mirarme el pecho, los brazos, los labios. Poco a poco, me iba acercando y ella se mostraba receptiva. Se produjo un silencio durante el cual nos miramos a los ojos, hasta que nos fundimos en un apasionado beso.
La levanté por los aires y la senté en la mesa. Rodeando mi cintura con sus piernas, nos comimos la boca mientras explorábamos nuestros cuerpos con las manos. Le quité el top liberando sus tetazas. Sus duros pezones se clavaron en mi pecho, hasta que los sujeté con fuerza y me los llevé a la boca. Hice circunferencias alrededor de ellos con mi lengua, lamiendo sus generosas areolas.
Me desnudó de cintura para abajo y yo hice lo mismo con ella. Nuestras lenguas volvieron a entrelazarse y sus piernas se volvieron a aferrar a mis caderas. La levanté de la mesa y la llevé en brazos hasta mi habitación. Notaba sus fluidos empapar mi pene tieso, que iba dando golpes contra sus nalgas.
Al llegar a mi cuarto, la tiré sobre mi cama. Antes de que pudiera abalanzarme sobre ella, se sentó en el borde y me agarró la polla. Un escalofrío me recorrió todo el cuerpo, justo antes de que se la metiera entera en la boca. Pese a su buen tamaño y grosor, mi vecina se la metía y se la sacaba sin pestañear. La apretaba entre sus carnosos labios y succionaba, provocando en mí descargas de placer que iban desde los testículos y recorrían todo el tronco hasta llegar a la punta.
La agarré del pelo para acompañar sus movimientos de cuello, mientras me la repasaba con la lengua de arriba a abajo, sin dejar de masturbarme. Probablemente era el morbo de lo prohibido, pero estaba gozando mucho más que con mi mujer, que ya era mucho decir.
Después de embadurnar por completo mi estaca con su saliva, se la metió entre las dos tetas y me masturbó con ellas, sin dejar de chuparme la punta. Aquello terminó con la poca resistencia que me quedaba y provocó que eyaculara en cantidades abundantes sobre su cara y sus tetas. Necesité tumbarme durante un buen rato para recuperarme de lo que acaba de suceder, pero ella no dejaba de besarme por todo el cuerpo.
– Míriam, lo haces mejor que mi mujer.
– Y te aseguro que no es lo único…
Continuará…
Hola morbos@s
Hola Vane
Hola Carlos como estas?
Bien gracias oye te puedo marcar?
Si claro
Pasaron los días prácticamente 1 semana o más y no me marco
Hola Vane
Hola Carlos
Que haces?
Nada en realidad estoy en la oficina, pero está tranquilo y tu?
Oh que bien, oye ando muy caliente manda pack no? Jaja
Jaja estas solo?
Si
Y porque andas caliente si coges diario eso déjamelo a mí que no tengo con quien desquitar las ganas
Jaja pues no se ya manda pack no?
Jajaja si tú me mandas algo para inspirarme lo pienso
*FOTO* – era su muuuuy erecto pene –
Órale de verdad estas caliente oye enserio tienes un muy buen pene
Jajaja si me di cuenta cuando viste que me desnudé esa vez que fuimos al motel los 4, tus ojos eran de sorpresa y dijiste “esa si es una verga” jaja
Jajja no mames enserio dije eso? Yo no tengo muchos recuerdos, tu si recuerdas todo?
Igual no recuerdo mucho, pero eso si no se me olvida y tampoco se me va a olvidar que coges muy rico
Jajaja no se vale mentir por convivir
Es real te mueves muy rico, si quieres repetimos jeje es broma, pero si quieres no es broma jaja
Jajja me la voy a creer jaja
Y como la chupas no inventes
Eso si te lo creo es mi especialidad jajja
Oye enserio hay que repetirlo apoco no quieres
No pues de querer si quiero, pero noooo ya dos veces jaja
Ah es cierto esa vez que nos fuimos con tu perrita verdad, ya Vane vamos
Esa vez fuimos porque estaban separados tu y Ely pero ya no, ni modo
Ándale Vane los 3 de regla
Estaríabien, pero noooo, mira para ayudarte con tu calentura porque si andas bien cachondillo jaja – le mande unas fotos de mis tetas
Asu que rico estar ahí pegado no mms están riquísimas ya Vane vamos a coger yo sé que tútambién quieres
Si ya te dije que sí quiero ganas no faltan, pero no puedo entiende
Se porque lo dices, pero no pasa nada
Jaja siempre te cachan estas bien wey y no quiero que esta vez sea conmigo
No, por eso quiero hacerlo contigo eres muy discreta
Ósea que nadie más te hace caso soy la últimaopción jaja mira que bien
No digas eso claro que no siempre te eh tenido ganas
De verdad? Desde cuando?
Desde la primera vez que te llevo Ely a la casa, te acuerdas? Ibas con una falda amarilla larga y una blusa blanca super escotada, se te veían unas tremendas tetas y un culazo que dije tarde o temprano lo tengo que ver sin ropa
Jajjawow si recuerdo, pero no lo note y mira que yo me doy cuenta cuando le gusto a alguien eres bueno para el póker entonces jajja
Si, pero dije no creo que me haga caso pues en ese entonces tenías novio
Jaja si de echo no te hubiera hecho caso en esos días
Ya Vane vamos solo una vez te lo pido y ya no vuelvo a molestar por favor solo dame chance una vez más y ya no te molesto
Ya te dije que no puedo
Bueno al menos dame un beso y ya con eso va
Mmm va un beso no se le niega a nadie jaja pero el pedo es donde porque no tengo tiempo más que en mi hora de comida y nos pueden ver
Pues en un motel y ya si pasa algo más pues ni modo
Jaja mira que abusado, no si entramos a un motel no me voy a detener soy débil jaja
Hay esta Vane vamos y si no quieres hacerlo está bien no hay problema, pero si quieres y yo sé que sí, pues lo hacemos solo una vez por favor
Tengo que pensarlo
Al día siguiente
Hola Vane entonces que, si vamos al motel?
Y dale con lo mismo, no pierdes la fe verdad jaja
No, contigo jamás
Nos pueden ver
Bueno, bueno ya no insisto, pero el beso si verdad
Mmm mejor no Carlos
Oye ya habías dicho que si, un beso no se le niega a nadie tú lo dijiste
Ok, ok si está bien solo 1 beso y ya –para mí los besos son más íntimos, he cogido sin besar porque solo es eso un palo y ya, en alguna ocasión hace tiempo no sé cómo, pero a mi llego el que las putas ósealas prosti no besan porque se enamoran, yo no es que me enamoré con un beso hace falta más que eso, sin embargo, es más íntimo y hay más conexión con la otra persona, sin embargo, esta vez dije porque no un beso nada mas
Se que Ely tiene a su amante y que a Carlos ya no lo quiere sin embargo siguen juntos así que eso me detenía mucho, pasaron másdías y seguimos texteando hasta ayer…
Vane mañana voy a rentar un cuarto y te voy a mandar la ubicación tu sabrás si llegas, no me voy a enojar si no vas, pero quiero tener la oportunidad de besarte solo eso
Hay Carlos no como crees
Ya está dicho descansa me sueñas porque yo voy a soñar con las tetazas que me mandaste
Ya no respondí hasta hoy que él escribió
Ya renté un cuarto, esta es la ubicación: ……..
Carlos como haces eso no inventes jaja
Solo dame esta oportunidad y ya no te vuelvo a molestar
Ya no respondí y se acercaba la hora de mi comida
Ey ya estoy aquí en el cuarto si vendrás?
No sabía que hacer digo ganas no me faltaban soy una mujer muy caliente y realmente si quería volver a coger con él y esta vez en una cama saber que tal coge, poder disfrutar de esa enorme verga y sin siquiera permitirme pensarlo más ya estaba ahí en la ubicación
Que habitación es?
Si vendrás? Es la 2
Acto seguido estaba entrando en la habitación, cuando me vio entrar no sabía ni que decir, yo entré, dejé mi bolso y voltee a verlo, él enseguida puso música y me dijo que quería escuchar, yo solo hice un gesto como diciendo que no me importaba, acto seguido después de poner equis cosa me acerque a él y nos besamos tan apasionadamente que enseguida empecé a humedecerme no separamos solo para quitarnos la ropa el me ayudo con el bra…
wow no las recordaba tan grandes que rico
Jaja es por la lactancia
Me das?
Claro
Se abalanzó a mis tetas y chupo como si no hubiera un mañana mmmriquísimo
Yo pude notar su erección pues estaba encima de él moviendo mi cadera de adelante para atrás, él seguía con boxers y no pude aguantar más me baje para poder ver su erección ahora sí con lujo de detalle, le baje los boxers un poco pero mejor se los quitó bien y yo también, él recostado con su vrga bien dura que puedo decir que le llegaba casi al ombligo y no la tenía ni tan delgada ni tan ancha para mí el tamaño perfecto, me subí a él con su verga entre mis manos y el culo bien parado, hice mi cabello a un lado para poder comerme semejante polla con mi lengua recorrí desde sus huevos hasta la punta de su pene varias veces, él sujeto mi cabello con una mano.
Te puedo grabar?
Nooooo
Con tu teléfono y después lo borras es que no te imaginas como te vez, eres realmente sexy por favor
No, calla y disfruta
Me metí su verga hasta el fondo de mi garganta lo más que pude, pensé que ya había perdido el toque, pero no jajaja la pude meter hasta el fondo solo podía escuchar como muy despacio decía “no mames que rico” y yo arremetía cada vez más rápido mojando bien su verga con mi saliva, pero no quería que acabara ahí así que me subí y puse su verga en la entrada de mi vagina, pero sabía que ese monstruo iba a doler así que lo hice lento poco a poco fui bajando para que entrara bien
ah no mames Vane estas muy apretada
O mejor dicho tú la tienes muy grande
No nono esto no lo había sentido que rica estas
Mientras nos comíamos la boca hasta que por fin lo pude tener dentro de mí, dolió un poco y es que no había cogido desde hace mucho no me habían penetrado.
Mmm que bien se sentía tenerlo dentro de mí, me levanté dejándole a la vista mis enormes tetas él enseguida las tomo y yo empecé a ir cada vez más rápido gimiendo de placer pues su miembro llegaba al punto exacto donde yo más rico podía sentir, no dejaba de moverme mi cuerpo estaba actuando por sí mismo ante tal satisfacción, era una delicia, mientras él con una mano estimulaba mi clítoris yo me hice para atrás apoyando en mis manos en sus piernas como si formara un arco y no dejaba de moverme ahí fue cuando tuve mi primer orgasmo no pude contener el grito de placer, me desplome sobre él y me beso pero siguió moviéndose cuando yo pude recobrar el aliento le dije “ven de a perrito”
Me puse de a perrito con las piernas abiertas, el culo bien parado, el rostro sobre las sábanas y las manos extendidas sujetando el borde del colchón, él me penetró muy lentamente y pude sentir cada centímetro de él dentro de mí fue algo delicioso me sentía llena.
Siguió embistiendo y yo gozando, mientras me embestía moje mis dedos con saliva y empecé a tocar mi clítorisél se dio cuenta
Si que rico me encanta que lo estes disfrutando
Aja… si… mmmm
Si quiero que te corras sii
Salió de mí y empezó a comerme la cuca yo me deje hacer pues lo hacía realmente bien, acerco su pene a mi cara y yo sin pensarlo lo volví a meter en mi boca mientras el me masturbaba yo lo chupaba tenía sabor a mí, a mis jugos a sexo, algo delicioso, me recosté boca arriba y ahora me penetro así mientras yo seguía tocando mi clítoris el subió mis piernas y logre sentirlo más dentro de mi cuando por fin pude correrme chorreando todo y el salió de mi para también echar su leche, su semen me llego hasta el cuello ambos gimiendo de placer al por fin liberar el deseo que tantohabíamos reprimido.
Había pasado Navidad, el estrés de las compras, la congestión vehicular en Bogotá, la lluvia constante y el estrés del trabajo debían ser reemplazados por una salida donde el clima permitiera colocarme un bikini, meterme en una piscina y tomar algunas cervezas. El problema de trabajar en una aerolínea es que los descuentos que tengo en tiquetes me dejan sujeta a cupo, igual que a mi esposo. Pues bien, todos en Bogotá pensaron lo mismo, lo vuelos estaban muy llenos, no nos fue posible viajar en los primeros vuelos y poco a poco nos íbamos quedando a los de más tarde. Al final solo uno podría viajar sobre las 3 pm y el otro debía esperar si en el de las 7 habría cupo.
Yo tome el vuelo de las 3, pues las reservas de hotel estaban a mi nombre y debía mostrar mi tarjeta de crédito con la que había pagado. Me despedí de mi esposo y abordé. A mi lado se sentó un chico de unos 21 años, quien se había dado cuenta de que había tenido que separarme de mi esposo.
– Hola, como estas? – Lo volteé a mirar sin decir nada. – Disculpa, es que noté que tuviste que despedirte de tu pareja y me preguntaba el porqué, yo tuve que viajar solo, ya que mi madre no alcanzó a llegar al aeropuerto. – Seguí mirándolo sin decir nada mientras me preguntaba que rayos tenía que ver conmigo. – Es que ella no viaja seguido y no sabe que debe hacer para que la pasen al siguiente vuelo, ¿Podría tu esposo ayudarle? Ya que van a tener que hacer el mismo tramite.
T: Ah ok – respondí por fin. Le expliqué lo que debía hacer y antes de despegar el chico trato de darle las indicaciones a su madre, pero mientras le decía a ella noté que no le iba a ser tan fácil. Estábamos próximos a despegar y tendría que apagar el teléfono, así que le di el número de mi esposo para que ella lo llamara después de textearle para que no se le hiciera extraña la llamada.
M: Mucho gusto, Manuel, muchas gracias por tu ayuda – Se presentó y se preparó para el despegue -Tatiana – Le respondí. Pude notar que apretaba sus manos demasiado contra los apoya brazos de su silla. Parecía nervioso y miraba para todos lados cuando había algún ruido del avión.
T: ¿Es la primera vez que viajas en avión?
M: Si, ¿se nota?
T: Solo un poco. No te preocupes, trabajo en esta aerolínea, si algo malo pasa te lo diré – Y traté de calmarle los nervios durante todo el vuelo distrayéndolo mientras conversábamos.
Al llegar, su padre lo esperaba en el aeropuerto, se ofreció a llevarme a mi hotel, lo cual acepté. Al llegar al hotel, lo primero que hice fue ponerme mi bikini, salir a la piscina y comprarme algunos cocteles. Me recosté boca abajo en esas sillas playeras y solté la parte de atrás del bikini para broncearme. Pensé en recibir a mi esposo un poco ebria y poco a poco los cocteles comenzaron a acumularse en mi cabeza. Me levanté y me metí al agua para refrescarme y me iría a la habitación. La música sonaba con un alto volumen, pero no era música bailable, era música bastante sugestiva. Estuve allí unos minutos hasta que..
M: ¿T0atiana? – Voltee a mirar sorprendida de quien podía conocerme – Hola, soy Manuel.
T: Ah hola, ¿que haces acá? – Pregunte un poco desconfiada.
M: Quería agradecerles que ayudaron a mi madre y les traje esto – Sacó de su mochila una botella de whiskey
T: Oye muchas gracias, no era necesario – Miré el reloj y me di cuenta que faltaba poco para el vuelo de mi esposo, así que lo llame. Manuel aún estaba allí cuando escuchó que tampoco en ese vuelo podría viajar y que tendría que esperar al del día siguiente.
M: Oye lamento lo del viaje de tu esposo.
Estuvimos charlando un rato, pues ya que, ya no tenía a que subir a la habitación a arreglarme, para seguir sola prefería estar en la piscina. Además, la música era bastante erótica y estaba buscando con Shazam varias de ellas, yo tengo una playlist de ese tipo de música que reproduzco cuando estoy en plan romántico con mi esposo y estaba ampliando el repertorio. Música tipo “The Thrill is Gone – B.B. King, Tracy Chapman” y “Fall of the House of Death – Marilyn Manson” sumado a los cocteles me había puesto a volar la cabeza y comencé a fijarme de manera diferente en aquel chico, tenía un buen cuerpo, era moreno, cuerpo marcado y cada que salía de la piscina lograba ver sus nalgas cuando su pantaloneta mojada se pegaba a ellas, lo que pronto me hizo pensar en si su verga también se le podría ver. Traté de verla un par de veces, pero no lo lograba, lo que sí estaba consiguiendo era excitarme poco a poco. Cuando me di cuenta, estaba buscando alguna manera para acércame a él y debajo del agua pasar mi mano de manera disimulada para rozarlo, inevitablemente subiría a mi habitación a masturbarme, al menos eso fue lo que tenía en mente.
T: Es hora de irme – di un ultimo sorbo para desocupar mi copa mientras le decía adiós con la mano.
M: Sabes que eres muy bella, ¿No? – Me preguntó y me abrazó por la espalda.
Puso su pene entre mis nalgas, la poca tela me permitió sentirla totalmente, estaba dura y se acomodó fácilmente entre mis cachetes.
T: Gracias – Respondí asustada y traté de retirarme, pues no esperaba que hiciera eso.
M: Deberías invitarme a arriba – Dijo mientras me sostenía con fuerza, evitando que su bulto se separara de mi cola. – Mira lo que lograste.
T: ¿Lo que logré? – Como pude giré para quedar frente a frente y lo miré con cara de desagrado.
M: ¿Qué crees, que con esa forma de provocarme se iba a quedar pequeña? – preguntó asegurándose que yo supiera que se había dado cuenta de todo.
T: Lo siento, mi intención no era….. – traté de disculparme apenadamente pero me cerró la boca con un beso, puso uno de sus brazos alrededor de mi cintura y me apretó, con lo que nuevamente sentí su verga dura sobre la parte baja de mi vientre.
No pude resistir la escena, no se trataba solo del chico, la excitación que tenía, que no era poca, se había disparado aún más por estar siendo besada en una piscina, con un abrazo alrededor de mi cintura de manera dominante y mientras sonaba de fondo “Cold Pizza – Gregory David”, perdí el control de mi cuerpo y ahora no solo le correspondía el beso, sino que movía mi pelvis al ritmo de esta canción, lo que evidentemente Manuel pudo notar, dejo de aprisionarme para posar su mano en mi cadera, sabía que ya no me iba a escapar.
Sin decir más, lo tomé de la mano y lo saque del agua, como pude tomé las cosas en la otra mano y lo llevé al ascensor, habían 2 niños y su madre allí, lo que hizo que sin hablarnos nos dirigiéramos con Manuel miradas entre sus labios y sus ojos, podía ver en ellos la morbosidad con la que disimuladamente recorría mi cuerpo, iba por mis caderas y de repente se mordía el labio con los colmillos y levantaba su mirada hasta mis ojos, con los que sin preguntarle, sabía que estaba imaginando todo lo que me haría y eso me ponía muy caliente.
Al entrar a la habitación, me puso contra la pared, dejando mi espalda y nalgas (a las que todavía le escurrían algunas gotas de agua), se apoyó sobre mí, haciéndome sentir nuevamente su dura verga entre mis nalgas, sus dos manos pasaron por debajo de mis brazos y me agarro las tetas.
T: Quítate esto – Le pedí mientras mis manos buscaban el cordón que evitaba que le bajara la pantaloneta, hizo caso y la dejo caer hasta el suelo. Luego soltó las tiras de la parte de debajo de mi bikini que se amarran de los costados, lo arrancó e hizo lo mismo con la parte de arriba. Me empiné un poco para que pusiera su pene entre mis piernas y comencé a moverme. No lograba metérmelo, pero su miembro rozaba con mi clítoris, se deslizaba tan suavemente que imagine que estaba empapado en mis fluidos, lo que me encantaba. Tenía una de sus manos en mi cadera y la otra en mis tetas, me besaba la oreja y me mordía el cuello, eso me excitaba demasiado, me sentía como en las novelas de vampiros y en ocasiones deseaba que me enterrará sus colmillos también.
Pasaron unos minutos así, a pesar de que me estaba haciendo sentir delicioso yo quería que me la metiera toda y como él no tomaba la iniciativa (tal vez porque estaba disfrutando como estábamos o porque no se le ocurría), pues lo hice yo, llevé una mano hasta su verga y la acomodé apuntando a la entrada de mi vagina, esperando que de una sola estocada me la clavara, pero él se retiró, me llevó de la mano a la cama.
T: Espera, tengo ganas de algo – Aproveché la pausa – Ok Google, reproduce “You Don’t Love Me – Dawn Penn”- le ordené a mi celular después de encender un parlante BT.
Manuel me acomodó en la cama en 4. Se hizo detrás mío y comenzó a rozarme de nuevo con su pene.
T: O me la metes o te largas – Le rogué prácticamente para que me hiciera suya. Así lo hizo, apunto con su arma a la entrada de mi vagina y con lo húmeda que estaba entró hasta el final. Por fin me sentí llena, comencé a moverme al ritmo de la canción, y él me siguió. Le hacía falta ayuda para iniciar, verme en 4, con su verga dentro mío era la motivación que necesitaba. Comenzó a moverse frenéticamente, bruscamente, sus testículos golpeaban con fuerza contra mi. Puse mi mano hacia adelante para evitar caer sobre la cama. Me agarró de las caderas para aumentar su fuerza de entrada.
T: Ooohh, que rico, eso es lo que quiero, aahhhh, siii. – gemía yo ante el placer que esa joven verga me estaba dando. Me estaba llevando al éxtasis, estaba fascinada, la falta de experiencia la compensaba este chico con energía. Yo apretaba las sábanas, ponía mi frente contra ellas, después de un par de corrientazos la levantaba, lo que Manuel aprovechaba para agarrarme del pelo. Poco a poco llegue a primer orgasmo, esto era el cielo. El chico seguía su frenético movimiento, empezaba a agitar la respiración, lo volteé a mirar y tenía los ojos cerrados, su verga se empezó a hinchar, y cuando sentí esto me detuve, me di la vuelta y me acosté mirando hacia arriba. Le abrí las piernas y le hice con mi dedo índice la señal de que se acercara.
Se acostó sobre mí, me besaba el abdomen y pasaba sus manos por mis piernas. Subió con sus labios a mis tetas y se dedico a lamerme muy bien los pezones. Hacia tiempo para relajarse un poco, ya que estaba por terminar, pero no puedes dejar que se enfríe la situación, pensé yo, así que le tomé una mano y la llevé a mi vagina. El entendió y comenzó a masturbarme con 2 dedos sin dejar de chupar mis tetas, cuando los tuvo bastante mojados los metió, mientras tanto yo le pasaba mi mano por su pene, suavemente, sin la intención de hacerlo eyacular, me gusta sentir un buen pedazo de carne en mi mano. Me comenzó a llevar nuevamente hacia el orgasmo, los corrientazos que hacían estremecer mi cuerpo se volvían más seguidos, por lo que le pedí que me la metiera de nuevo.
Nuevamente hizo caso, se ubicó entre mis piernas, la cama era muy baja como para que él lo hiciera de pie, así que se acostó sobre mí, una de sus manos me tomaba de una de mis tetas, con la otra se apoyaba en la cama, así que nuevamente lleve mi mano a su verga y la puse en la mi entrada. Me la clavo de un solo empujón y se dejó caer sobre mí, cerré mis ojos y me dedique a disfrutar, recuerdo muy bien que en ese preciso momento sonaba “What Love You Can – Kingdom Come” por lo que sumado al típico misionero en el que estábamos fue un momento muy muy sensual. Mis sentidos estaban suprasensibles, escuchaba todo, sentía todo, cada centímetro de ese pene lo disfrutaba en su camino hasta el fin y de regreso, el aire de cada respiro que salía de su boca rozaba mis orejas, sentía entre mis manos como sus nalgas se apretaban y endurecían cada vez que me entraba su verga.
T: Si te detienes te mato – se me ocurrió decirle al oído mientras mi orgasmo comenzaba a desarrollarse. Movía mis caderas cada vez más rápido, hasta que llegó el momento, inicio ese corrientazo del orgasmo, dejé de escuchar y de sentir cualquier cosa que no fuera esa sensación, Manuel no se detenía, había entendido con el movimiento de mi pelvis que me tenía a punto. No paraba tampoco la sensación aquella, se intensificaba cada vez más, ooooohhh por Dios, que rico, aaahhh, creo que le solté las nalgas y me aferre a las sabanas de nuevo, como si me fuera a caer, siguió el orgasmo, hace mucho no sentía un orgasmo tan largo e intenso como aquel, puse mis manos en la espalda de aquel chico, y mis dientes en uno de sus bíceps le marque la espalda y su brazo en la intensidad del orgasmo que estaba teniendo. Cuando acabó aquella sensación y comencé a relajarme fue el turno de Manuel, quien comenzó a venirse. Sentí que su esperma inundaba mi interior mientras me apretaba fuertemente una de las tetas, su otra mano estaba entre mi pelo y mordía mi cuello.
Al finalizar, solo se dejo caer rendido sobre mí, puso su cara sobre mi pecho y su respiración agitada recorrían mis pezones. Duramos algunos minutos totalmente inmóviles, sentí como su verga comenzaba a perder tamaño aún dentro de mí, como su semen dejaba su textura espesa y salía de mi hasta caer en la cama. Se escuchaba “Tennessee Whiskey – Chris Stapleton” en el fondo de la habitación.
Nos levantamos, me vestí y le pedí que se fuera.
M: Ya que tu esposo no llega esta noche, yo te haré divertida la noche – Me dijo suponiendo que tenía algún tipo de derecho. Solo le abrí la puerta y esperé que saliera.
Tomé un baño mientras sonreía recordando como tenía que guiarlo. Revise mi celular y tenía algunas llamadas perdidas de mi esposo y una nota de voz que decía que finalmente si había podido viajar. Para el momento en que lo leí su vuelo estaría por mitad de camino, así que tuve tiempo de organizar todo, maquillarme y arreglarme con ropa interior de encaje que tenía lista solo para él, al final, había recibido una dosis de energía que usaría con alguien que sabe coger muy bien.
Más de dos años y medio de relación pasan factura. Nos conocimos como se conocen ahora la mayoría, por una app. Todo fue genial, no fue el primero, pero ahora sé que fue mi gran amor.
Con 24 años en ese momento yo vivía con mis padres. Él con 29 ya tenía su propio piso. Por lo que enseguida comencé a pasar allí la mayoría de los días y a los pocos meses ya vivíamos juntos.
Todo era perfecto. Una relación idílica. Roberto era un hombre increíble. Terminé mis estudios y comencé a trabajar. En la cama… bueno era genial. Creo que fue lo que me hizo enamorarme de esa manera. Había encontrado a un hombre que no sólo era buen amante, también era morboso y sin miedo a probar cosas. Era la primera vez que hablaba con alguien de sexo como quien habla del tiempo. Algo impensable comparado con las anteriores relaciones.
Pero la monotonía, la casa, los trabajos… poco a poco la llama se fue apagando. Yo tengo claro que fue él. Pero seguro que su versión es distinta, da igual… el caso es que la cosa fue en picado.
Y pasó lo que pasa cuando te descuidan. Alguien llegó, un viejo amigo. Ese con quien no has tenido nada, pero sabes que siempre ha querido. Ese que se interesa por ti, te pregunta, está ahí… y eso pasó. Cuando Robert no estaba, estuvo él. Las conversaciones por WhatsApp pasaron a llamadas después de enfadarme con mi novio. Llegó el primer café, la segunda cerveza y el primer polvo.
Solo fueron dos o tres veces, quizás un par más. Yo tenía claro que no sentía nada por ese amigo, pero me sentía muy sola y él me comprendía. Roberto parecía que le daba igual que yo saliese “con mis amigas”. Lo que conseguía que yo fuese más enfadada a mi cita y acabase desquitando mis frustraciones con otro.
Pero, aunque parecía que no se daría cuenta nunca, si lo hizo. En medio de una discusión me dijo que lo sabía. Que ya no podía más y que quería dejarlo. La pelea se caldeo más y acabamos echándonos en cara todo lo posible. Hasta que le mandé a la mierda, recogí mis cosas y me fui de su casa.
Volver a casa de los padres después de una ruptura tiene sus ventajas. Pero subir la autoestima no es una de ellas. Al principio, cargada de odio y decepción fue casi más fácil. Pero el enfado fue bajando y comencé a echarle de menos. Le había bloqueado de todos los medios posibles y él a mí. Me vino bien durante los dos primeros meses para no caer en la tentación. Pero si había algo que era superior a mí, era callarme las cosas. Y tenía mucho que decirle.
Tiré de nostalgia y le escribí una carta. Le dije de todo. Le expliqué porque tenía la culpa de que lo hubiéramos dejado. Pero no hubo respuesta.
Aguanté dos meses más, pero la duda de no saber si había recibido mi carta se hizo una bola cada vez más grande en mi cabeza. Envié otra, está vez solo quería hablar y dar por cerrada la relación, lo necesitaba para seguir con mi vida. Pero le dio igual. Pasó de mí y de mi bienestar, dejándome sin respuesta.
Para entonces yo ya había conseguido seguirle en RRSS con perfiles falsos. Aunque él nunca publicaba nada, veía sus nuevos contactos, mujeres… lo que no me vino muy bien para controlar mi ansiedad.
Entonces llegó el día. Una tal Nadia le etiquetó en una foto. Reconocí el restaurante en cuanto lo vi. Allí habíamos estado nosotros celebrando nuestro segundo aniversario. La sangre me ardió. La foto era reciente, solo había dos copas de vino, acababan de sentarse a cenar. Un impulso me hizo pedir un taxi, tenía que verlo con mis propios ojos.
Me deshice del pijama y me vestí corriendo mientras llegaba el taxi. Increíblemente tuve tiempo de maquillarme y ponerme el pantalón que mejor culo me hacía y un buen escote. No iba a dejar que mi ex me viese hecha unos zorros. Me despedí de mis padres diciendo que había quedado con una amiga y bajé a esperar el taxi.
Mis nervios eran como un timbal resonando en mi pecho. No por no saber que decir a mi ex. Aún no había pensado esa parte. Mi corazón salía por la boca pensando en llegar antes de que acabasen la cena, no quería perder esta oportunidad. Era la noche, no sabía de qué, pero esa era la noche.
Apretando un acelerador imaginario llegamos al restaurante. Cuando vi su coche aparcado en la puerta los nervios cambiaron de razón. ¿Qué iba a hacer? No tenía ni idea. Pero por suerte ellos salieron en ese momento del restaurante, bien acaramelados cogidos de la mano. Vi como le abría la puerta a esa niñata esmirriada y como arrancaba el coche. Tenía más tiempo para pensar que hacer mientras los seguíamos.
Me costó un poco convencer al taxista, por lo visto no es tan fácil como en las películas que persiga un coche. Le dije que era mi pareja y que estaba embarazada de él. Que necesitaba saber si me era infiel. Parece que se apiadó de mí y le seguimos… hasta su casa…
Vi como entraban tan juntitos, tan … empalagosos. ¡La había llevado a mi casa! ¡La que había sido mi casa durante más de dos años! ¡A esa cualquiera! ¿Qué coño había visto en esa morena? Esa niñata que iba de diva con ese vestido ajustado. ¿Qué pasa que no tiene frío? La muy zorra le daba igual cogerse una pulmonía con tal de lucir escote. ¿Por esa putilla me había cambiado?
– Señorita, yo no tengo problema de seguir esperando, pero el taxímetro sigue corriendo…
Era cierto, la factura ya era más que importante y los números no dejaban de subir rápidamente aún estando parados. No me quedó otra que pagar y bajarme.
¿Qué coño estaba haciendo? Allí, sola en mitad de la fría noche, frente la casa de mi ex. Estaba claro que él ahora se estaría follando a aquella tetona asquerosa. Seguro que eran de mentira. Era muy delgada para tener esas tetas naturales. ¡Con ese maquillaje de putón! Y yo allí, muerta de frío. ¿Llamaba a la puerta? Cómo iba a hacer eso… con ella allí… ¿Y si se quedaba a dormir con él? Era un miércoles, mañana se trabaja… ¿No tiene casa esa zorra?
Al menos pasaron dos horas, helada de frío sentada en un banco mirando la puerta. Todo ese tiempo podría haberlo usado para decidir que hacer. Pero mi mente solo era capaz de pensar en mí ex follando con esa morena de piernas largas. Lo que le estaría haciendo, todo lo que me hacía a mí… Haciéndola gritar de placer, dejándola con las piernas temblando…
La puerta se abrió por decimosegunda vez. Esta vez no era un vecino, era ella. Vi como caminaba hasta un coche aparcado. ¿Andaba raro? Seguro que el cabrón de Roberto la había dejado reventada… Arrancó el coche y se fue.
Era ahora o nunca. Había pasado la noche fuera de casa, muerta de frío. Y no iba a ser solo para esperar a que mi ex echase un polvo. Fui hasta la puerta y llamé. No sabía que decir, por suerte, no hizo falta. El confiado de mi ex abrió sin preguntar.
Subí hasta nuestra casa, bueno ahora la suya, donde se follaba a cualquier guarra. La puerta estaba abierta. Seguro que pensó que era la tal Nadia que se había dejado algo. Entré y le vi de espaldas. Solo llevaba el pantalón, su espalda lucia desnuda mientras servía una copa de vino de una botella a medias.
– ¿Qué te has olvidado, preciosa? ¿O es que ya me echas de menos? – dijo sin girarse.
– Tenemos que hablar. – fue lo único que se me ocurrió contestar.
– ¿Isa? ¿Qué coño haces aquí? No tengo nada que hablar contigo. Vete por favor.
Tardé mucho, muchísimo en convencerle para que me escuchase. Casi mejor, pues no tenía ni idea que iba a decirle. No sabía ni la razón que tenía para estar allí. ¿Quería volver con él? No… quería cerrar esa etapa de mi vida y necesitaba hablarlo con él. Me lo debía, por todo el daño que me había hecho.
Con más mano izquierda que nunca le convencí a hablar 10 minutos conmigo. Me senté en el sofá, mientras él se ponía la camisa, pero la dejaba abierta. ¿Intentaba seducirme?
– 10 minutos, Isa. Deja de mirarme y empieza.
¿Qué coño se creía? ¿Tan bueno se piensa que está? Sí… tenía un aire sensual con el pecho al descubierto y la copa de vino en la mano. ¡Vino! Una copa me vendría bien.
– ¿Te importa si me tomo una copa?
Él se limitó a levantar los hombros y se sentó en el sillón que estaba frente a mí. Rellené la copa que estaba vacía sobre la mesa y la bebí de un trago. Entonces caí en la cuenta que estaba bebiendo de la copa de esa mujer. Una sensación extraña recorrió mi cuerpo. Nunca había tolerado muy bien el vino, debía ser eso.
Comencé a hablar. La conversación fue casi un monólogo. No estaba acostumbrada a eso. Él siempre me rebatía, pero me estaba dejando hablar a mí sola. Fui pasando de un tema a otro. Le dije todo lo malo que había hecho. Que era su culpa que yo hubiera caído en brazos de otro hombre. Lo mal que lo había pasado. Él no hablaba, solo me miraba mientras lo hacía yo y volvía a rellenar mi copa, la de esa morena, Nadia…
Su falta de confrontación y el alcohol me hizo rebajar mi enfado. Comencé a hablarle con más autocontrol, o menos … le dije lo que le echaba de menos. Qué sabía que había otra mujer. Que no le había olvidado…
– … yo no he estado con nadie desde que lo dejamos. Porque aún te quiero.
Al escuchar mi voz diciendo eso algo se rompió en mí. Su maldita cara de chulo se elevó al cubo. Esa chulería que tanto me fastidiaba cuando discutíamos y tanto me ponía cuando jugábamos…
– Bueno, ya lo tuviste antes de dejarlo. Ya no somos pareja. Puedo estar con quién quiera.
– Sí, sí, lo sé. Y yo también. Puedo follarme a quien quiera. Ahora mismo podría estar follando, pero no quiero. – le dije, tratando de igualar su chulería.
– Pero estás aquí… – contestó mirándome como él sabía.
– Sí. Porque necesitaba hablar contigo.
– Pues ya has hablado. ¿Por qué sigues aquí?
Sus ojos amenazaban con desnudarme. ¿O era cosa mía? El sexo siempre había sido nuestro vértice en la relación. Le había atacado, había apelado a sus sentimientos por mí, le había dicho que le quería… ¿y si probaba otra estrategia?
– Me han dicho que hay rupturas que necesitan despedirse más… íntimamente… para poder cerrar heridas y seguir adelante. – le solté, con mi mirada de femme fatal.
– ¿Estás diciendo que quieres follar conmigo?
– Bueno… dices que se acabó. Si no sientes nada por mí, no veo ninguna razón para no echar un polvo y así poder cerrar este capítulo de nuestra vida.
– ¡Jajajaja! Isa… estás muy mal. No voy a follar contigo. Ni siquiera debería haber dejado que entres en mi casa. No confío en ti.
– ¿Cómo que no confías en mí? ¡Hemos sido novios tres años!
– Estas mal, Isabel. Mal de la cabeza. Necesitas ayuda. Y no, no me fío. Me has escrito diciéndome de todo. De hecho, has empezado tu discurso culpándome de ser prácticamente el diablo. ¿Y ahora quieres que te folle? ¿Para qué? ¿Para luego decir que te he violado?
– ¿De verdad crees que yo haría eso?
– Sí. Después de todo lo que he vivido contigo, lo creo. Y tal como están las cosas, ahora hace falta un contrato para echar un polvo. No quiero problemas en mi vida.
No me podía creer lo que me estaba diciendo. Era una tontería. No quería por la zorra esa. Por la tal Nadia. Entonces lo tuve claro. Si conseguía que follase conmigo habría roto la magia con esa mujer. Dejaría de verla de la misma manera, le entrarían dudas. Yo era mejor que ella en la cama. Más caliente, más pasional, más guarra. ¡Tenía que hacerlo!
– Lo firmo.
– ¿Qué dices?
– Que lo firmo. Si te quedas más tranquilo, escribimos un papel donde doy mi consentimiento. Me parece una gilipollez, pero si así consigo que confíes en mí.
– Que no, que pasó. Luego dices que lo has firmado bajo coacción o yo que sé. Que no. Vete. Por favor, vete.
– Hago una declaración en un vídeo. Así se ve claramente que no hay coacción ni leches. No te preocupes que dejaré bien clarito las ganas que tengo de follar contigo. – le dije con voz sensual.
Vi en su rostro como sopesaba la idea. Dentro de nuestras muchas fantasías, grabarme y hacerme fotos le encantaba. Aún debía tener una buena colección porno mía. ¿Se masturbará viendo mis fotos?
– ¿Y cómo vas a hacer para que no quede ninguna duda? – me dijo, notando en su cambio de actitud que entraba en el juego.
– Sabes que soy muy convincente. Y si no te parece suficiente, siempre puedes ordenarme añadir lo que quieras al vídeo. – le dije, mordiéndome el labio al terminar.
Lo pensó por unos segundos y fue a por su móvil. Vi como contestaba unos mensajes antes de volver a sentarse en su sillón. Mi corazón latía a mil. Estaba a punto de grabarme reconociendo que deseaba follar con mi ex. Y él contestando a alguna zorra. A la tal Nadia seguro….
– Bien. Vamos a intentarlo. Pero si veo que el vídeo no me convence, te vas y no vuelves a molestarme.
– No te preocupes, se lo que te gusta.
Apuntó con su móvil hacia a mí y terminé mi copa antes de empezar a hablar.
– Me llamo Isabel González López y he venido a casa de mi ex, Roberto García Estévez, porque quiero follar con él. Con este video quiero dejar constancia e intentar convencer a mi ex para que me folle como solo él sabe.
En sus ojos vi lujuria. Lo tenía hecho. Sabía lo que le ponía tenerme así de desesperada. Que reconociera que le deseaba. Pero en cambio, no dejó de apuntarme con el móvil, seguía grabando.
– ¿Estás diciendo que quieres que tu ex te folle?
– Sí. – contesté mirando a cámara y pasando mi lengua por los labios.
– ¿Sabes que acabo de follar con otra hace menos de media hora y quieres que te folle?
Un odio visceral recorrió mi cuerpo. Y no sé porqué razón se fue a quedar justo en mi sexo. Sentía un calor en aquella zona. Los celos me mataban, pero estaba cachonda.
– Sí. Sé que acabas de follarte a otra. Y eso me pone aún más cachonda. – le dije, mirándole a sus ojos tras el móvil.
– A otra no. Tú eres la otra. La que ha venido aquí a bajarse los pantalones ante su ex suplicando un polvo. ¿O no es así? – me dijo, aún apuntándome con el objetivo de su móvil.
– Sí. Así es. Soy la otra. Quién se tiene que bajar los pantalones y suplicar por un buen polvo de su exnovio.
– Pues venga, bájatelos.
Lo había conseguido. Estaba cachondo. Ya era mío. Me puse en pie y me bajé los ajustados pantalones mientras él no dejaba de grabarme.
– Que te bajes los pantalones no es suficiente. Bájate también las bragas. Quiero que quede grabado como mi ex se baja las bragas para conseguir un polvo conmigo.
Y así lo hice. Para ese momento no solo él estaba excitado. El vino y volver a sentir ese hormigueo entre las piernas al ver su lado dominante… Ese que tantas veces había conseguido que hiciera lo que él quería. Con mis pantalones en los tobillos, bajé mis braguitas blancas de lunares. No había tenido tiempo ni para pensar en ponerme algo sexy. Al llegar con ellas a las rodillas me detuvo. Me quería así, con las bragas en las rodillas suplicándole porque me folle.
– A juzgar por ese matorral, es cierto que llevas mucho sin follar.
Miré hacia abajo y casi me muero de vergüenza. No había caído en la cuenta. Llevaba sin depilarme desde que lo dejamos. No había estado con ningún hombre en 6 meses y tampoco tenía ánimo para cuidar esa zona. Cómo pude tape con mis manos mi frondoso y rubio sexo, sintiendo como mi cara se ponía roja de la vergüenza.
– Lo siento, no tuve tiempo. Vi la foto de tu chica en Facebook y salí corriendo al restaurante. – le dije, sin pensar lo que estaba reconociendo.
– Así que me espías por Facebook. Y no puedes aguantar verme con mi chica, que me persigues por toda la ciudad, con tu coño peludo.
Ya no era ese juego de calentamiento donde me humillaba para conseguir un polvo. Ahora era mucho más real si cabe. Le había reconocido que le espiaba, que le perseguía. Y lo peor de todo, me había referido a ella como su chica. Pero ya no había vuelta atrás. Seguía grabando. Seguía interesado en follarme. Y si me iba sin hacerlo, tendría un vídeo mío humillándome para nada.
– Sí. Te sigo en redes sociales con un perfil falso. Te he seguido del restaurante hasta tu casa. Y he esperado más de dos horas en la calle, muerta de frío, a que te follases a tu chica. Porque necesito tu polla. Necesito que revientes este coño peludo. – le dije, descubriendo mi sexo ante la cámara.
– Pues ponte de rodillas y suplica a tu ex que te folle.
Él sabía lo que me excitaba arrodillarme frente a él. Y yo sabía lo que le gustaba verme así de sumisa. Lo tenía. Era mío. Me había costado mucha humillación, pero le tenía donde quería. Me arrodillé, con mis pantalones en los tobillos y las bragas en las rodillas y le supliqué a mi ex.
– Roberto, por favor. Te lo suplico. ¡Fóllame! Fóllame como tú sabes. Lléname entera.
Mirándome uso su mano libre para liberar el botón de su pantalón. Lo abrió y dejó a la vista su bóxer azul claro con un bulto bien marcado. Se acercó a mí y mi boca se hizo agua. Sabía lo que quería. Una buena mamada de su ex. Estaba muy cachonda y él sabía que la chupaba muy bien cuando estaba así. Mis manos se fueron a su paquete, pero me detuvo.
– ¿Quieres chuparme la polla?
– Sí. – le dije relamiéndome con lujuria.
– ¿Quieres chupar la polla que se acaba de follar a otra?
Esa sensación ácida de celos volvió a mí. Pero sin entender la razón, me calenté más.
– Sí. Quiero chuparte la polla que acaba de follarse a tu novia.
– ¿Quieres probar a qué sabe el chochito de mi novia?
– Sí… mucho. Quiero probar el sabor de su coño. Limpiarte la polla de sus jugos. Déjame por favor que saboreé a tu novia de tu polla.
Estaba fuera de mí. No entendía cómo podía estar diciendo todo esto. Y siendo grabada. Mañana me arrepentiría lo más grande. Pero ahora solo pensaba en su rabo. En su rabo y en el coñito de ella.
– Abre la boca, pero no chupes. Primero te dejare olerla.
Abrí la boca y saqué la lengua. Él sacó su herramienta medio erecta y la puso sobre mi cara. Sin lugar a pensarlo, inspiré fuerte. Quería descubrir su olor. El olor al chocho de la novia de mi ex.
– Olfatea como la perra que eres. Imagina el coñito de mi novia. Un chochito precioso, cerradito, depilado, muy mojado.
Tener su polla en mi cara había conseguido que mi excitación me hiciera olvidar todo lo demás. Para estas alturas mi lado sumiso había tomado el control y solo podía obedecer. Por lo que, con mi boca abierta, sintiendo el calor de su miembro, pero sin poder hacer lo que más deseaba, olí su rabo buscando el aroma a mujer en él. Y sí, olía a sexo. Estaba claro que mi ex acababa de follar.
– ¿Te gusta como huele? Seguro que estas deseando probarlo. ¿Quieres saborear el coñito de mi novia?
Escuchar como llamaba “su novia” a esa zorra asquerosa se clavaba en lo más profundo de mi alma. Pero estaba muy cachonda. Había conseguido sacar su lado más morboso, ese que tanto me ponía.
– Sí… Déjame saborear a tu novia chupándote la polla… por favor… – le dije, mirando a cámara.
Saber que me estaba grabando en una escena tan humillante me excitaba más todavía. Tenía claro que mi orgullo estaba como mis bragas, en el suelo con mis rodillas. No quería pensar en que podía pasar con ese video. En si alguien se enteraba de que estaba suplicando de rodillas a mi ex para chuparle la polla con sabor a chocho. Solo quería disfrutar del momento. De ese sexo salvaje que solo él sabía darme.
– Abre bien la boca. Te la voy a meter, pero no quiero que chupes. Quiero que mantengas la boca bien abierta con mi polla dentro.
Abrí todo lo que podía la boca con mi lengua fuera. Me sentía patética, como una perrita a los pies de su dueño. Y me encantaba esa sensación. Su miembro entró en mi boca, no entero, poco más de la punta. Su polla descansaba sobre mi lengua mientras yo sentía como crecía con mi calor y mi humedad. Mantuve mis labios bien separados por mucho que desease besar y saborear esa barra de carne. Notaba como mi saliva comenzaba a escurrirse por las comisuras de mi boca. ¿Por qué me ponía tanto que me tratase así? Le mire suplicante sin poder hablar. Necesitaba que me diese permiso. Haría lo que fuera ahora mismo por probarla. Por saber si solo sabía a él, o también a esa morena de piernas perfectas.
– No tengo claro que quieras chuparme la polla. Mejor lo dejamos, te subes las bragas y te vas a casa.
Mis ojos expresaron sin lugar a dudas mi desesperación. Traté de mover la cabeza negando, pero no quería desobedecer. Algo me pedía ser obediente sin fallar en nada. Siempre había sido sumisa con él, pero ahora era distinto. Ahora necesitaba serlo.
– ¿No? Bueno hacemos una cosa. Para que quede claro que quieres, vamos a ir a la cama. Te dejaré chupar de camino mientras te grabo. Si sueltas mi polla, entenderé que no tienes muchas ganas y lo dejamos aquí.
En cuanto dijo eso cerré lo poco que faltaba mis labios y comencé a chupar. No pensaba soltar mi comida por nada del mundo. Él empezó a andar de espaldas y yo apreté fuerte los labios mientras le seguía de rodillas por la que antes era mi casa. No fue a un paso lento, por lo que tuve que esforzarme al máximo andando sobre mis rodillas para no dejar de mamar. Las piernas empezaron a dolerme, pero no podía fallar. Me agarré a su culo y pegué bien mi cara contra su pubis. Su pene me ahogaba, pero no iba a soltarlo. Entre sonidos guturales y un patético caminar llegamos a nuestra habitación. Lo supe cuando se detuvo para después sentarse sobre la cama. Continué con mi mamada, esta vez disfrutando al máximo al no tener que pasear por toda la casa.
– Tengo que reconocer que lo haces muy bien. Se nota cuando le pones ganas. Si lo hubieras hecho así siempre…
– Soy la que mejor te la ha chupado ¿verdad? Reconócelo. – le dije entre lamidas.
– Siempre se te dio bien. Pero ahora lo haces con más ganas. ¿Es porque sabe a otra?
Era cierto, con el miedo a perderlo no me había acordado de ese detalle. ¿Sabia a coño? No lo sé… si tenía un sabor diferente, a sexo. Como cuando se la chupaba después de haber follado. Sin darme cuenta comencé a absorber con más ganas, tratando de diferenciar el sabor propio de su hombría y reconocer el de una mujer, que no era yo. ¿Qué me estaba pasando?
– Ya veo que tengo razón. Bueno no te preocupes, si tanto te gusta, te dejaré que me limpies la polla después de follar con mi chica más veces.
Esa frase era para que mordiese lo que tenía en la boca. Pero lejos de tomármelo como la humillación que era, para mí fue una invitación a volver a repetir con él.
– ¿Lo prometes?
– ¡Jajajaja! ¿Tanto te gusta mi polla que quieres venir a limpiarla después de cada polvo con mi novia? ¿O es su coñito lo que te gusta?
– ¿Quieres que lo haga? ¿Quieres que vuelva otro día a chupártela?
– ¡Claro! Es muy divertido ver a tu ex tan desesperada por polla que no le importe que acabe de follar con otra.
¡Joder! Me estaba poniendo a mil. Esa fantasía de ser una cornuda limpia pollas me estaba volviendo loca. ¿Fantasía? Era realidad. Su polla sabía a sexo. A coño. No llegaba a diferenciar claramente los sabores, pero estaba claro, había estado dentro de una mujer. ¡Y me ponía muy cerda!
– ¡Fóllame a mí! ¡Por favor! No puedo más. Necesito que me revientes con este pollón. Igual que a ella. Fóllame como a Nadia… por favor…
– ¡Jajajaja! ¡Que patética eres, Isa! Y lo peor de todo es que ya deberías saber que no pienso follarte.
Me quedé de piedra con su pene en mi boca. ¿Qué había dicho? ¿Qué no? No podía ser. Después de todo. De haberme grabado de la manera más humillante. De haberme vuelto loca con esa mamada. No podía dejarme sin follar…
– ¿Cómo que no? He hecho todo lo que has querido. Me has grabado. Te la estoy chupando como nadie te la ha chupado en tu vida. Y deseo que me folles y me hagas todo lo que quieras. ¡Fóllame! Hazme tuya.
– Isa, Isa, Isa… Tengo que reconocer que me has vuelto a animar. Y eso que me había quedado muy relajado después del polvazo con ella. Pero lo siento… Sabes muy bien que no me pone nada los coños peludos. Y el tuyo… eso es un puto felpudo amarillo. ¡Joder, da mucho asco!
Me sentí hundida. Mucho más humillada que por ser una cornuda consentida. Era cierto… llevaba seis meses sin depilarme y no era lo más erótico del mundo. Pero tanto como asco… solo era pelo… no podía quedarme así. Comencé a lamerle suavemente las pelotas mientras mi mano le pajeaba. Intentaba convencerle, llevarle al punto de desear correrse y que todo le diera igual. Que solo quisiera hacerme el mayor número de perversiones. Lo que no me di cuenta es que también estaba llegando yo a ese punto. Me sorprendí a mi misma usando mi otra mano entre mis piernas. Apartando con mis dedos mi vello púbico y buscando mi botoncito. Estaba empapada. Mi felpudo amarillo estaba pringado de mis flujos. ¿Cómo podía ponerme tanto ser humillada por mi ex?
– Por favor… haré lo que quieras… Lo necesito… Te necesito… Necesito tu polla dentro de mí…
– ¡Qué no, Isa! No insistas. La próxima vez ven bien depiladita y ya veremos. Pero yo no la meto en ese matorral. – me contestó entre risas.
– Fóllame el culo.
Ni siquiera lo pensé, solo lo dije. Estaba tan desesperada que no podía concebir la idea de no ser follada por mi ex. Sabía que el sexo anal era algo que le encantaba. Solo lo hicimos un par de veces. No puedo decir que no me gustase, pero la mayoría de las veces que lo intentamos me sentí muy incómoda. Me dolía… y esa sensación extraña… La mayoría de las veces solo le dejaba meterme un dedo mientras lo hacíamos, pero su polla, esa polla… Y ahora le estaba pidiendo a mi ex que me sodomizase por no querer follarme mi coño peludo.
– Puf… no sé… Ahora lo dices porque estás desesperada. Pero luego empezaras con las quejas, que te duele… Es tarde y no tengo ganas de andar con tonterías. Solo quiero correrme y dormir.
– No me quejaré. Nada. Fóllame como quieras. Todo lo fuerte y rápido que quieras. Lo aguantaré. ¿No me digas que no quieres romperle el culo a tu ex? Puedes reventarme y correrte dentro de mí. Eso te gusta… lo sé. Sodomizar a tu ex hasta llenarle el culo de leche.
– Ummm… no es mal plan, la verdad. Esta bien. Pero no quiero ni una queja. Si me haces parar, te vistes y te vas.
– No habrá ninguna queja. Morderé la almohada si hace falta. Fóllame. Reviéntame el culo con tu polla.
– Bueno… Primero quiero ver tu ojete. Si tienes el coño así de peludo… Como esté igual me corro en tu boca y adiós.
No había caído en ese detalle. No es que fuese una zona donde yo tuviera mucho vello. Pero si es cierto que con él lo retocaba de vez en cuando para estar perfecta. ¿Cómo tendría el culo? Se apartó y me hizo subir a la cama. Estaba completamente desecha. Lógico después de una sesión de sexo con aquella zorra morena. Me hizo ponerme a cuatro patas sobre la cama y dejar mi culo expuesto hacia él.
– Ábrete el culo. ¡Inspección anal!
Muerta de vergüenza lo hice, sin saber que se iba a encontrar. Mi ex estaba examinando mi ano para ver si era adecuado para ser follado. ¿Cómo había llegado a esto? ¿Dónde estaba mi orgullo de mujer?
– Bueno… las vistas de ese chocho peludo no son muy agradables, pero al menos tienes el culo sin pelos. ¿Preparada?
– ¡Sí! ¡Métemela! – le contesté eufórica de saber que había pasado la prueba.
Comenzó a jugar con su dedo en mi entrada. Por lo menos se tomaba el reparo de dilatarme. Sentí algo húmedo caer y resbalar entre mis nalgas. Había escupido para lubricarme. Su dedo fue entrando en mí. Me encantaba. Por fin sentía como me tocaba. No se había molestado hasta el momento en hacerlo. Ni siquiera me había desnudado, aún mantenía mis tetas tapadas por la camiseta. Pero su dedo estaba dentro de mi culo. Comenzó a moverlo y entonces escuché su móvil. Había recibido un mensaje. ¿Sería ella? ¿Quién podía ser a estas horas? Otro mensaje. ¡Jódete zorra! Tú novio me está metiendo un dedo en el culo, por eso no te contesta. Comenzó a coger ritmo, me estaba follando con su dedo. Escuche el sonido digital de un teclado. No podía ser… miré y allí estaba, con un dedo dentro de mi culo y con la otra mano contestando el mensaje.
– Puf, así es imposible. Vamos al tema y terminemos pronto.
Sacó su dedo y sentí como apuntaba con su pene a mi pequeño agujerito. Necesitaba más dilatación. Más lubricante. Era demasiado gorda… me iba a romper.
– Échame lubricante, por favor.
– ¿No decías que sin quejas?
– No me quejo… pero me vas a romper… un poco solo…
– No. Las ex no tienen derecho a lubricante, eso es para mi novia. Tú a pelo.
Fue decir eso y comenzó a empujar. Lo hizo lentamente, pero sin detenerse. Mucho más rápido que las otras veces que lo habíamos intentado, la mayoría sin éxito. Comenzó a dolerme mucho. Pero no me iba a quejar. No le detendría. Aguantaría como fuese. Me tenía que follar. Tenía que ser infiel conmigo. Romper su relación. Aunque él me rompiese el culo para ello.
Su polla fue entrando sin descanso y yo hice lo que le había dicho. Busqué una almohada y hundí mi cara en ella. Pensé que me iba a partir en dos y entonces se detuvo. La tenía toda dentro de mí. No podía moverme del dolor. Pero él sí. Comenzó a bombear a mi espalda, a follarme el culo. Su ritmo comenzó lento, pero subió rápidamente. Me estaba follando a su antojo, para su placer. Como un trozo de carne, sin importarle si me dolía o me gustaba.
Yo ya mordía la almohada para no gritar. Pero empezaba a gustarme. Sentirme un objeto sexual me excitaba. Ser usada para su disfrute. No entendía nada, pero era eso. Esa sensación de inferioridad, de ser solo un medio para su placer. Ser la otra, la amante, la cornuda.
Sin llegar a desaparecer el dolor, dejé de pensar en él. Comencé a gemir de placer sintiendo como mi recto sufría las embestidas de mi exnovio. Me gustaba, me dolía, pero me encantaba. Levanté la cabeza y arqueé la espalda. Quería disfrutarlo al máximo. Entonces lo vi. Entre los cojines y las sábanas revueltas. Un tanga negro. Esa zorra se había ido con el coño al aire, con aquel vestido tan corto. Maldita guarra. La odiaba a muerte. Y mientras su novio me reventaba con una rabia descontrolada, tiré el tanga al suelo. Roberto era mío. Era a mi a quien estaba follando ahora, puta tetona roba novios.
Era un polvo salvaje. Sentía como me abría cada vez más. Como llegaba más adentro en cada envestida. Y me encantaba. Mañana no podría andar, pero me encantaba. Si ella había salido escocida de aquí, yo saldría con el culo roto. Pero necesitaba más. Estaba muy cerca, pero necesitaba un poco de estimulación en mi coño. Ese coño peludo que tanto asco le daba a mi ex.
Se iba a correr. Su forma de follarme lo anunciaba a base de golpes de sus huevos en mi coñito. Yo también quería. Quería correrme a la vez que él. Cuando me llenase el culo de su leche. Llevé mi mano derecha a mi entre pierna. Buf… Era increíble. Me frotaba como una perra salida mientras el me taladraba sin piedad. Me iba a correr. Tiré la almohada al suelo junto al tanga. Quería que los vecinos me oyeran gritar. Que supieran que me estaban partiendo el culo y me encantaba. Entonces lo vi. Una mancha en las sábanas. Una mancha enorme. Como un charco justo debajo de mi cara. Esa zorra se había corrido hasta mearse encima. Había manchado mis sábanas, donde tantas veces yo había dormido. Donde ahora su novio me estaba reventando el culo. Y yo iba a correrme junto a él. No sé porque lo hice. Supongo que estaba ebria de lujuria. Como drogada de excitación. No hay otra razón que justifique que llevase mis labios a ese charco y sacase la lengua. Me iba a correr lamiendo su corrida.
– ¿Qué haces? – me dijo de repente, sin dejar de taladrarme.
– Nada de tocarse. Ahora disfruto yo solo. Tú sufre. – me dijo apartando la mano que me masturbaba.
Aliviada porque no se hubiera dado cuenta de que estaba lamiendo la mancha de su novia, no me quejé. Dejé que llevase mis brazos a mi espalda y me sometiera en una postura muy incómoda. Sujetó mis muñecas con una mano, dejando mis brazos retorcidos. Por lo que mi cara quedó aplastada contra el colchón, justo en ese charco que yo había estado lamiendo. No quedaba otra. Continue lamiendo mientras mi ex me follaba con una furia salvaje hasta que se corrió dentro de mi culo. Yo grité lo más fuerte que había gritado nunca con la ultima embestida. Cuando sentí como me partía en dos, clavándome hasta el fondo su espada. Pero también disfruté cuando sentí esos disparos directos a mi intestino. Me sentí una zorra. Una guarra usada para su disfruté. Y estaba muy cachonda.
– Ahora, límpiamela. Mi chica no es como tú. No le gusta saborear a otras mujeres.
Casi sin poder moverme, repté por la cama para desengancharme de la polla de mi ex. Ni siquiera me ayudó para sacarla. Cuando por fin quedé liberada, sentía el culo abierto como nunca antes. Me había destrozado. Pero estaba muy cachonda. Tanto que no me importó lo más mínimo llevarme a la boca eso que acababa de salir de mi culo. No me gustaba el sabor. Era agrio, era mi culo. Me gustaba más cuando sabía al coño de esa chica… pero lo chupé igual. Fuera de mí. Completamente desesperada por un orgasmo.
– ¿Puedo tocarme ahora? ¿Correrme mientras te limpio la polla de mi culo?
– ¡Que cerda eres! Esta bien. Pero rapidito. Tengo sueño.
Comencé a tocarme a cuatro patas mientras degustaba y dejaba bien limpia esa polla. Limpiándole la polla a mi ex para que su novia no descubriera que me había sodomizado. Joder como me ponía… Escuché otro mensaje. No podía ser… había cogido el móvil mientras yo se la estaba chupando. Estaba a punto de correrme, necesitaba que se centrase en mí. Aunque solo me mirase como me corría limpiándole la polla. Entonces escuché una voz femenina. Era un audio… y lo estaba escuchando mientras me frotaba el coño con su rabo en mi boca.
“Ya te echo de menos, amor. Me hubiera encantado quedarme a dormir contigo. Pero que sepas que me he acordado de tu norma. Toda mujer que pasa por tu cama tiene que dejarte las bragas. Allí te las dejé. A este paso tendré que ir a trabajar con el chichi al aire. Quizás mañana lo haga… de momento hoy dormiré como me has dejado. Un besazo mi semental.”
Estaba a punto de correrme cuando me distraje escuchando su voz. ¿Qué norma era esa? ¿Hacía colección de bragas de todas las que se follaba? Se apartó de mí, llevándose su salivada polla con él. Comenzó a buscar por la cama, mientras yo seguía frotando mi pepitilla desesperada. ¿Cómo podía pasar de mí de esa manera? Era una mujer 10. Guapa, con buen cuerpo, recién follada por él… y pasaba de mí.
– Aquí están… en el suelo. – dijo él, recogiendo el tanga.
– Ven aquí… Quiero correrme con la boca llena. – le dije desesperada.
– Isa… Un poquito de consideración. Que me he follado a dos tías esta noche. No tengo más ganas. Córrete y vete. Quiero dormir.
– Por favor… me voy a correr ya… Deja que lo haga con la boca llena.
– Ummm… vale…
Abrí mi boca deseosa pero no fue su polla lo que entró dentro. El cabrón de Roberto metió el tanga de Nadia en mi boca. Me quedé mirándole sin poder hablar. El solo se reía. Pero no dejé de tocarme. Estaba muy cerca de mi ansiado orgasmo. Mi mente me decía que parase, pero mi cuerpo no obedecía. Cogió su móvil y me hizo una foto masturbándome a cuatro patas con el tanga de su novia sobresaliendo de mi boca. Luego fue al otro lado de la cama y siguió fotografiándome desde atrás.
– Esto de recuerdo. Luego te las mando para que veas como te ha dejado el culo tu ex.
Escribió algo, supongo que contestando a su novia. Y después se puso a grabarme de nuevo. Y así fue como llegué a mi ansiado orgasmo, siendo grabada a cuatro patas con el tanga de su novia en mi boca.
Caí rendida sobre la cama con mi culo en pompa. Lo sentía tan abierto que tenía miedo a que se saliese su semen. Rober se tumbó en la cama, con sus pies junto a mi cara. Comencé a besarlos con devoción. Me había usado como una puta y yo estaba ansiosa de más, ansiosa de él. Pero me instó a que me vistiera y me fuera. Ni un beso, ni un abrazo, ni siquiera recuperarme de mi orgasmo. Me puse en pie intentando apretar el culo para evitar que la gravedad hiciera que me manchase. Iba a subirme las bragas cuando recordé el audio de Nadia. Me descalcé, me quité los pantalones y saqué mis sosas y castas bragas, para luego volver a vestirme sin ellas.
– Toma, creo que, según las normas, tengo que dártelas. – le dije, ofreciéndole mis bragas.
– Has estado atenta, muy bien. Déjalas en el primer cajón del armario.
Ni siquiera se molestó en cogerlas. Fui hasta el armario, al mismo cajón donde yo antes guardaba mi ropa interior. Lo abrí y estaba lleno de braguitas, sobre todo tangas muy sexys. ¿Cuántas tías se había follado en 6 meses?
– Toma, guarda esto también.
En cuanto miré, el tanga de Nadia chocó contra mi cara y cayo al suelo. Me agaché a recogerlo y lo hice un ovillo en mi puño con fuerza. Odiaba a esa zorra. Si pudiera le estampaba mi puño en su carita de niña buena. Eché mis bragas, cerré el cajón y le miré. Ya estaba tumbado en la cama con intención de dormirse. Me moría por acostarme a su lado y dormir abrazada a él. Pero había insistido mucho en que me fuera. Aguantando las ganas de besarle para despedirme, cerré la puerta de nuestra habitación. Y después la de su casa. Mientras que esperaba un taxi que me llevase a casa de mis padres, abrí la mano. Allí estaba esa tanguita de encaje. ¿Por qué me lo llevé a la nariz? Eso para otro día…
Qué tal buenos días, tardes noches
Antes que nada quiero disculparme por desaparecer unos meses, tras varias complicaciones sobre temas de acoso en mi correo anterior tuve que crear un perfil nuevo en esta página, este relato es una continuación de mi último relato “el taxista me hizo Anal” que está en mi perfil anterior: *AndreaSan*
Por si no recuerdan vuelvo a poner mi descripción, actualmente tengo 24 años, tez blanca y cabello color negro, tengo ojos verdes, mido 1.70 y soy de complexión delgada, desde siempre me ha gustado el deporte y pertenecí varios años de mi universidad al club de atletismo, voy al gym casi todos los días y gracias a eso y la genética tengo unas piernas largas y torneadas y sin sonar presumida si tengo un buen trasero por los años que le he dedicado al ejercicio.
después de mis aventuras con el taxista el encontró una mejor oferta de trabajo en Estados Unidos por lo que pusimos fin a nuestros encuentros y dimos una despedida digna que les contrate en otra ocasión.
El relato que estoy por contarles sucedió hace unos meses en la fiesta de cumpleaños de mi prima, Ximena, era su cumpleaños 25 y decidimos festejarlo en el antro de moda con otra de mis primas, Pau, que es la más joven, tiene 19 años y la más linda de las 3 aunque la más tímida y amigos de Ximena, por la ocasión decidimos vestir de manera llamativa pero sin llegar a ser vulgares, yo estaba usando un pantalón de cuero que hacía resaltar mi trasero y un top blanco sin bra que dejaba ver mi abdomen marcado por el ejercicio, llegamos al antro sin hacer fila por lo que escuchamos varias quejas de las personas que estaban en la fila, el cadenero nos desvestía con la mirada y nos dejó entrar rápidamente, nos llevaron a la mejor mesa del lugar y nos atendieron de inmediato, por ser su cumple no escatimamos en gastos y nos dejaron unas botellas de Möet y un mesero para lo que ocupáramos que de paso era un chico muy equis, moreno, delgado y de baja estatura.
La noche transcurría de lo más genial y no nos quitaban el ojo de encima a mis primas y a mi, también notábamos miradas de envidia por ciertas chicas al ver que sus novios nos veían mucho, bailamos todo el rato y el alcohol empezaba a hacer efecto por lo que mi prima ya estaba un poco mal, fuimos al baño como es típico y Ximena me decía que el mesero estaba muy bueno, lo cual me pareció raro por que mi prima es una chica muy guapa, alta, delgada con cabello oscuro y unos grandes ojos verdes, que podía tener al tipo que se le diera la gana y siendo honesta suele ser muy clasista, no le preste más atención al tema y regresamos a la mesa, pasaron las horas y yo estaba platicando con los amigos de mi prima sobre irnos de after, estaban por pedir la cuenta cuando perdí de vista a mi prima y curiosamente al mesero, por el ruido del lugar no pude llamarle así que salí a marcarle a su cel y a fumar un cigarro cuando observé que había movimiento en la camioneta de Xime, me acerqué despacio a la parte de atrás y ahí estaba mi prima en el asiento trasero haciéndole sexo oral al mesero, estaba en 4 con su vestido levantado, el mesero tenía su mano en su trasero metiendo uno de sus dedos en su vagina mientras ella le daba la mejor mamada de su vida al mesero, era una imagen surreal pero no para mi que ya había tenido experiencias con tipos así, ella se subió en él y se sentó en su verga que la verdad se veía de buen tamaño, el tipo le comía los pechos y ella saltaba desesperada en ese pedazo de carne, le mande un mensaje de texto y regrese al antro, primero llego ella disculpándose por qué tuvo que atender una llamada urgente y a los minutos el mesero con una sonrisa señal de que la paso bien, pedimos la cuenta y salimos rumbo a la casa de uno de los amigos de mi prima, la casa era muy bonita y nos movimos a la terraza para estar más cómodos y seguir con el festejo cuando llegaron un par de tipos con pinta de delincuentes, eran los dealer de los amigos de Xime, que básicamente es el tipo que te vendré droga, uno de ellos era alto y moreno con un cuerpo que se notaba que iba al gimnasio con cara de pocos amigos, estaba rapado y tenía sus brazos llenos de tatuajes, Marcos, el otro era algo menos agraciado, de estatura media, gordito y con típica pinta del tipo que agrada a todo el mundo, Joel, mi prima los saludo y nos presento, rápidamente los amigos de mi prima se acercaron a saludar y a pedirles sustancias como weed y cocaina, después de un rato de mensajear con mi novio yo estaba sentada revisando mi cel cuando se acercó uno de ellos, Marcos que era el tipo alto y tatuado, me pidió fuego para su cigarrillo y me pregunto mi nombre, Andrea dije
-Hola Andrea, no te había visto por aquí, aunque tus amigos nos llaman seguido, eres pareja de alguno de ellos?
-No, es cumple de mi prima y recién los conocí, estaba por pedir un uber pero creo que mis primas aún quieren seguir.
-Jaja si ella es así, es el alma de la fiesta, para ser muy fresa si sabe divertirse, y tu? Te la estás pasando bien?
-Si la verdad es que creí que me iba aburrir pero todos son muy divertidos.
Notaba que el no quitaba la mirada de mi trasero cuando me levante por un cigarro de mi bolsa, la platica siguió normal platicando sobre cómo conocían mi prima, cosas de trabajo, banalidades pero sin dejar de mirar mis labios para después recorrer mi cuerpo con su mirada, para tener esa pinta ruda era un tipo muy agradable y lleno de confianza algo que siempre llama mi atención sin importar el físico de las personas, la música seguía por lo que me pidió que bailara con el, acepte y note que era muy alto de por lo menos 1.90 pero eso no le impedía moverse muy bien y seguirme el ritmo, por el tipo de música estábamos muy juntos y mi trasero quedo pegado a su bulto que por lo que sentí tenía buen tamaño, pude ver a Xime y Pau bailando con sus amigos, Marcos se acercó a mi oído mientras seguía muy pegado a mi
-Se nota qué haces ejercicio Andrea, tienes un cuerpo muy bien definido.
Yo me puse roja por lo directo que era y que no disimulara que le gustaba, solo atiné a agradecerle y volverle el cumplido.
-Muchas gracias Marcos, se nota que tú también, tus brazos se ven muy fuertes.
-Gracias princesa, un día de estos podemos entrenar juntos si gustas, aunque no creo que vayamos al mismo gym puedo apoyarte con tus rutinas.
-Sii, eso estaría muy bien, a veces me aburro de entrenar sola pero por qué dices que no vamos al mismo?
Volvimos a la mesa a servirnos otro trago, intercambiamos números e Instagram y vi que tenía varías fotos sin camisa que dejaban ver su físico trabajado, algunas fotos en ropa interior a lo que no pude ocultar mi cara de sorpresa.
-Te gustan? Puedo enseñarte más si quieres
Dijo mientras ponía una de sus manos en mi pierna, acepten su solicitud y ahora el revisaba mi perfil poniendo mas atención en mis fotos en bikini o entrenando
-Diosss si que tienes un cuerpazo, debes tener a todos babeando en el gimnasio, tú novio si que tiene suerte, si fueras mi novia no saldríamos de la cama
En ese momento se acercó un amigo de mi prima y le hizo una señal a lo que Marcos sacó de una mochila una pequeña bolsa transparente con un polvo blanco
-Quieres? O también puedo ofrecerte de esto.
Dijo al tiempo que acomodaba su verga por encima del pantalón.
-Qué tal un poco de ambas?
Dije mientras me mordía un labio, el sonrió y se levantó dándome la mano para que lo siguiera, pude ver a Pau, mi prima pequeña, riendo y bebiendo con Joel, pero no a Ximena, fue al baño pensé, entramos a la casa y bajamos las escaleras rumbo al baño y escuchamos gemidos de uno de los cuartos, sin duda era Ximena
-Me parece que le están dando su regalo a tu prima
Dijo en tono burlón mientras yo escuchaba gemir a mi prima en eso me tomo de la cintura y pegó sus labios a los míos, nos besamos de manera muy intensa, me tocaba mi trasero de manera muy rica, le dije muy poco convencida que tenía novio, de poco le importo y continuó tocando mi trasero mientras nuestras lenguas peleaban, tomo una de mis manos y la llevo a su paquete.
-Te gusta lo que te vas a comer mi amor? Se me puso dura desde que te vi.
Lo tomé de la mano y nos metimos al baño, de poco me importó mi novio, este tipo sabía como calentarme, desabroche su pantalón y acariciaba su miembro por encima de su ropa interior continuábamos besándonos seguido bajo a lamer mi cuello y darme pequeños mordiscos, levantó mis brazos para quitarme mi top y de inmediato se lanzó a morder y lamer mis pechos.
-Qué ricas tetas tienes princesa, voy a disfrutarlas mucho
-Despacio que son sensibles
Jalo uno de mis pezones al mismo tiempo que su otra mano entraba dentro de mi pantalón
-Qué mojada estás mi reina, te gusta que te traten rudo o no?
Llevo su mano de mi vagina a mi cuello ahorcando y mirándome a los ojos
-Yo te voy a dar lo que quieres, y te voy a hacer gozar todo el tiempo que quieras.
Soltó lentamente mi cuello y puso su dedo entre mis labios, abrí mi boca y comencé a succionarlo simulando una mamada
Puso su cara en mis pechos y siguió mordiendo y pellizcando mis pezones su mano seguía masturbando mi vagina yo acariciaba su cabeza, sacó otra bolsa su pantalón y una llave, llenándola de polvo para inhalarla, puso un poco en mis pechos y volvió a inhalar, fue una sensación tan rica y peligrosa que note como se humedecía mí vagina, me dio una cachetada antes de tomarme del cabello y besarme de una manera muy salvaje, baje su ropa interior y me arrodillé.
-Eso mamita enséñame cómo mamas, esto te gusta? Yo se que a las niñas buenas como tú les gusta que las traten mal
Empezó a pasar su verga morena y larga (de por los menos 20cm de largo sin exagerar) por todo mi rostro, no tan gruesa como la del taxista pero si llena de venas, la tome con ambas manos y lleve su glande a mi boca y comencé a succionarla, estaba muy caliente y llena de semen preliminar, tenía un saborsito salado que disfrute mucho, la saque para lamerla toda desde la base hasta su cabeza llenándola de besos y de mi saliva para volver a meterla en mi boca, me sujeto fuerte de mi cabeza y movía sus caderas metiendo y sacándola hasta al fondo
-Si princesa abre más tu boquita, qué ricos se sienten tus labios, qué bien la mamas perra
Note que volvió a meter la llave en la bolsa y la llevo a mi nariz, saco su verga de mi boca e inhale el polvo, sentí un sentimiento de Euforia lo que me hizo sentir más caliente, me golpeó en las mejillas con su verga un par de veces
-Qué te parece esto Andreita?
Dejo caer más polvo sobre su verga haciendo una línea a lo que la inhale directamente antes de metérmela en la boca y volver a succionar su rica verga, yo acelere el ritmo metiendo lo más que pude a mi garganta
-Aguanta mamita que antes me quiero saborear ese culito que tienes
Me levante y me puso de espaldas contra el lavabo me recargo bajando mi pantalón junto con mi tanguita
-Mmm Dios mío que ricas nalgotas me voy a cenar, de verdad que tienes un culazo especular, quieres que te meta toda mi verga Andreita?
Asentí y dije que si con mi tono más sumiso mientras me daba un azote haciéndome levantar más mi trasero para el, llevo su lengua hacia mi vagina moviéndola muy rico de arriba a abajo, llego a mi clitoris y continuo lamiendo en círculos en el punto exacto para seguir llevar un dedo provocándome una rica sensación, dejo su dedo dentro para llevar ahora su lengua a mi culito, la sensación era inexplicable, estar bajo los efectos de la droga, con ese tipo tan peligroso y del placer que me daba su lengua me hacía gemir muy rico
-Qué me estás haciendo Marcosss, sigue así por favor no te detengas
Yo me trataba de recuperar, el se puso de pie a lo que levante más mi trasero, pasaba su miembro por toda mi vagina y mi trasero dando golpes que solo aumentaban mis ganas de ser cojida por el
-Qué rica estás mami, son las mejores nalgas que me he comido, ahora voy a hacer que no te olvides de mi verga, estás muy apretadita, creo que tu novio no te coje o la tiene muy pequeña
Metió su verga hasta la mitad haciéndome arquear mi espalda y pegar un grito de placer, mientras jalaba de mi cabello para sacar su verga y volver a meterla lentamente hasta la mitad
-Si papi metemela toda por favor mi rey, cojeme Marcos
-Qué rico aprietas Andrea, me encanta tu trasero, a las putitas blancas como tú les encantan las vergas morenas, dime de quien es ahora este culazo
-Es tuyo papi sigue así por favor párteme
-Te coje más rico tú novio?
-No claro que no, tú verga es el doble de grande y de rica
Metía y sacaba su verga a un ritmo fuerte y rápido provocando que me mojará toda, siguió dándome unos minutos más antes llegar al orgasmo y gritar su nombre
-No quieres que yo sea tu novio? Te cojere mejor mi reina, un cuerpo como el tuyo necesita una buena verga
-Si si quiero pero no te detengas, si Marcos cojeme así papi méteteme toda tu verga, sigue así mi amor
Me dio la vuelta y me cargo con maestría, sus fuertes brazos podían fácilmente conmigo, llevando sus labios a los míos besándonos, se sentó en el retrete, era mi turno
-Enséñame como mueves ese culote princesa, saca esa puta que eres
Sonreí y le di un pequeño beso.
Me metí su verga de una sentada y comencé a mover mi trasero en círculo.
-Este culo va ser mío, vete preparando por qué te lo voy a dejar muy abierto y lleno de mi leche
Acelere el ritmo, subía y bajaba frenéticamente de su verga ofreciéndole mis pechos para que los mordiera e hiciera lo que quisiera, mis gemidos se mezclaban con el sonido que provocaba chocar mi trasero con su verga, después de unos minutos de intensidad me apoyé en sus hombros antes de aumentar el ritmo de nuevoy tener otro orgasmo
-Té gusta como lo hago mi amor? Qué tiene tu verga que me encanta tanto? Quiero que me cojas toda la noche
-Encima de todo eres la chica más hermosa que me he cojido, esa carita de ángel que tiene una puta dentro
Llevo sus fuertes manos a mi trasero, me levantaba y bajaba de su verga con mucha facilidad
-Estoy a punto, voy a correrme Marcos, cojeme más fuerte mi amor
Aumentaba la velocidad y llevó sus manos a mi cuello otra vez haciéndome llegar a otro fuerte orgasmo, me bajo y me puso de rodillas frente a su verga
-Ya vienen mi amor, abre bien tu poca princesa, no dejes caer nada
Me la metí a la boca y sus chorros comenzaron a salir, uno tras otro llenado por completo mi boca y que salieran por mis labios, llevo sus manos a mi cabeza para no sacar su verga haciéndome tragarlos, era tanto que resbalaba a mi barbilla y a mis pechos, los tragué todos y succione su miembro antes que lo sacara, me dio un par de golpes con ella en mi frente y mejillas antes de juntar el resto de su semen con su verga y llevarlo a mi boca
-Si que sabes lo que haces mi amor, qué rica estás y qué preciosa te ves con tu cara llena de mi leche.
Sonreí antes de decirle que me encantó su verga, dandole un pequeño beso en la punta, me ayudo a ponerme de pie, nos vestimos de nuevo y aproveché para lavar mi rostro y mi boca con enjuage que había en el baño, me puse mi ropa y me arreglaba un poco mi cabello, el me abrazaba tiernamente por mi espalda y me daba pequeños besos en mis hombros y mi cuello, volteee hacía él para besarlo tiernamente como si fuéramos novios, nos dimos un pase más antes de seguir besándonos y llenarnos de caricias.
-De verdad que tienes un culo perfecto Andrea, no sé qué me gusta más de ti, si tu carita hermosa o tu trasero perfecto, podría cojerte toda la noche sin problema
-Perfecto para tu verga y también me gustaría tener esto dentro toda la noche.
-Entonces qué dices? Serás mi novia o mi puta?
-Qué tal ambas?
Dije mientras volvía a llevar mis manos a su miembro que ya estaba duro de nuevo, me miró a los ojos e hizo una señal que me pusiera de rodillas, me hinqué y baje su pantalón una vez más, la miré con más detalle y le di un pequeño beso en la punta y acariciaba sus testiculos, la acaricié tiernamente y lleve su glande a mi boca, lo mire a los ojos y el mordía su labio, volví a concentrarme en su verga y metérmela hasta la mitad antes de sentir arcadas, la saque para lamerla toda desde sus testiculos, pasando por todo el tronco lleno de venas y de nuevo a su cabeza, el acariciaba tiernamente mi mejilla y mi cabello, llevo su mano a su verga para comenzar a jalarla y terminar más rápido, succionaba su glande esperando de nuevo que terminara, no hubo necesidad que llevara sus manos a mi cabeza, yo llevé mis manos a su verga para jalarla mientras daba pequeños lengüetazos en su glande, sentí como se hinchaba y poco a poco eyaculaba para llenar mi boca una vez más de su leche.
-Creo que me acabo de enamorar de ti Andrea
Continuaba succionando su verga para dejarla totalmente limpia.
Nos arreglamos antes de salir del baño
-Voy a necesitar un trago y despedirme de este gordo por qué este culo va ser mío toda la noche, yo m puse de puntitas para besarlo y llevar mis manos a su cuello.
De salida nos ganó la curiosidad y decidimos entrar a la habitación, vimos que en la cama aún estaba Ximena cojiendo con uno de sus amigos pero lo más sorprendente fue cuando al pasar por un pasillo vimos que en la cocina estaba Pau arrodillada haciéndole sexo oral al otro dealer, Joel, que la tenía bien sujeta de su cabello cojiendosela por la boca, la más linda y tímida de las primas estaba disfrutando de lo lindo con ese gordo que era cuestión de tiempo para que se la cojiera, volvimos a la terraza a prepararnos otro trago y solo quedaba uno de los amigos tirado en la barra súper ebrio, tomamos una de las botellas antes de ir a otra de las habitaciones y seguir toda la noche
Este es el final de relato pero les adelanto que Marcos y yo seguimos teniendo contacto y más aventuras que pronto les contaré
Desde aquella noche inolvidable han pasado ya cuatro años, parece mentira. En esa noche, celebramos la despedida de soltera de mi amiga Rocío, quien es una de mis mejores amigas. La fiesta había sido idea de otra amiga, Jenny, y solo faltaban tres días para su boda. Me desanimé cuando Rocío, muy emocionada, me informó por teléfono que habían contratado un espectáculo de strippers para la despedida. Se me hacía algo bobo emocionarme con esas cosas después de un año de casada; ya no me causaba curiosidad ver hombres semidesnudos bailando. Sin embargo, entendí que mis amigas apenas llegarían a una etapa a la que yo ya había llegado, por lo que cedí pensando que no debía molestarlas debido a mi posición actual como «señora casada».
La despedida de soltera de Rocío se llevó en la casa de Jenny, la cual vivía con su mamá y también iba a quedarse para ver la celebración, todo se llevaba cabo de manera típica: primero se consumieron bebidas y luego los regalos, las bromas y los chistes en doble sentido. A las once de la noche, Jenny señaló que tocaban el timbre y se presentó para abrir, aunque no sabía quién era. Ella había convocado a los strippers a esa hora, por lo que sabía perfectamente quién estaba tocando. Miré mi reloj y, aburrida, entendí lo que me esperaba. Dos ejemplares masculinos imponentes llegaron, uno de los cuales vestía ropa entallada y muy sensual, con lentes oscuros y sombrero texano. Un negrito con pantalones jean y un casco metálico amarillo era el segundo. A pesar de que más de una de las invitadas parecía estar emocionada, yo seguía con mi actitud de descontento, recargada en el brazo del sillón en el que me había sentado.
El cowboy, mientras escuchaba música electrónica, caminó por la sala de la casa de Jenny y se acercó a cada una de las invitadas, que con entusiasmo extendían sus manos para tocar los muslos del joven. Cuando el cowboy se quitó la camisa de cuadros y retiró sus jeans, quedó solo con una tanga breve de color negro, las enloqueció. Recuerdo la cara de la mamá de Jenny cuando vio al hombre en tanga, se le enrojeció el rostro, pero quedó con la boca abierta y los ojos fijos en los excelentes músculos del hombre. Moví la cabeza en señal de lo tonto que me parecía la representación y me reí.
La siguiente canción también comenzó en estilo de música electrónica, y el segundo stripper comenzó su participación más activa, ya que antes solo se movía un poco al compás de la música. El hombre moreno conocido como «César» tenía movimientos más valientes y se quitaba la ropa un poco más rápido que el cowboy. A la mitad de la música, César estaba en tanga y su aspecto era digno de una escultura. Su piel muy bronceada tenía una apariencia brillante que aumentaba aún más la excelencia de su figura; además, sus músculos parecían haber sido creados con cincel.
Creo que fue el baile de César lo que me llamó la atención. La combinación de sus contoneos sensuales con algunas poses de culturismo físico lo hacía parecer arrogante, pero su sonrisa amigable lo hacía muy atractivo. A pesar de mi escepticismo, me interesé poco a poco en su actuación, aunque las demás estaban mucho más prendidas que yo, ya que la hermana menor de Rocío, Jéssica, se levantó para darle un beso en la boca a César y luego se sentó debido a las protestas de las demás que decían que no las dejaba apreciar al semental.
Se levantó entonces una mujer, que descubrí más tarde que se llamaba Nuria, de unos cincuenta años, a la que César había invitado a ir al centro para bailar con ella. A pesar de que parecía tranquila, esta mujer se mostró ansiosa pero nerviosa al bailar con el individuo. La despedida de soltera cambió en una dirección que pocas de nosotros imaginábamos. Nuria recibió las manos de César y las colocó en sus caderas, sobre su tanga. Luego, con un gesto, le indicó que las bajara. Nuria experimentó algo abochornada, pero los gritos de los presentes comenzaron a reforzarla.
-Que la quite…que la quite! -exclamaban.
Todas vimos de inmediato que César tenía un arma de placer excepcional cuando Nuria aceptó y arrojó la tanga. Su pene era de gran tamaño y de color moreno, aunque con un tono morado en su piel. Me acomodé bien en el sillón en el que estaba, mientras intentaba determinar si lo que estaba viendo era verdadero. Uno de los strippers estaba desnudo en la despedida. Aunque no estaba acostumbrada a una situación como esta, lo tomé con tranquilidad. Jessica, la hermana de Rocío, decidió hacer lo mismo con el Cowboy. Llegó al centro y le quitó la tanga, dejando al descubierto el admirable falo del hombre, quien, con la ayuda de las pequeñas manos de Jessica, se quitó la minúscula pieza de ropa.
Las cosas empezaron a mejorar cuando nos encontramos en una pequeña sala con dos hombres increíblemente atléticos y sensuales. Esto empezaba a exigir acción. Me di cuenta de que Jenny estaba tranquila cuando miró hacia donde estaba César; cuando ella indicó que comenzara a hacer algo, pensé que ya lo tenía planeado. En vez de molestarse, la Sra. Nuria respondió acariciando el cuerpo del stripper cuando César comenzó a manosearla. El Cowboy procedió automáticamente con Jessica, quien aceptó el tratamiento dando un beso prolongado al blanquito mientras dejaba que este la acariciara, antes de bajarle la falda y el calzón hasta los tobillos. Jessica finalizó el beso quitándose la blusa, lo que dejó al descubierto su cuerpo, ya que no llevaba sostén.
Las sabias manos de César, que la tomó por atrás y frotaba su miembro ya erguido contra el cuerpo de Nuria, también la despojaron de su ropa. Rocío se concentraba en lo que estaba pasando mientras mis amigas y familiares de la novia se miraban unas a otras mientras sonaba la música más fuerte cada vez. Rocío me volteó a ver en ese instante, y yo hice un gesto de extrañamiento y moví la cabeza en señal de negación, indicando que lo que estaba sucediendo no me parecía apropiado.
No obstante, César ya había penetrado a Nuria antes de que nos diéramos cuenta. No lo notamos hasta que lo vimos moviendo sus caderas contra el vientre de ella. Para mi sorpresa, Jessica tampoco se opuso; recostada en uno de los sillones, abrió las piernas y el Cowboy la tomó abiertamente. No podía creerlo; al mismo tiempo estaba presenciando dos actos sexuales, lo cual yo creía que sería una despedida de soltera atrevida, pero no esperaba que llegaran a tanto. Las invitadas se acercaron para observar de cerca cómo los strippers salían y entraban de aquellas mujeres, acariciaban sus espaldas y disfrutaban besando sus piernas y brazos. Con la incertidumbre de qué sucedería, permanecí en mi posición, pasmada. Miré a Jenny, que era la única que, a estas alturas, no estaba tocando a los strippers. Se levantó y se dirigió hacia la cocina.
Los strippers finalmente consiguieron que las dos mujeres se vinieran y sacaron sus falos gruesos, mientras escupían esperma sobre el cuerpo de las elegidas. Nuria, que había llegado con una vestimenta formal y muy refinada, ahora estaba en el suelo, despeinada y con manchas de esperma visibles en su vientre. Los strippers tuvieron poco tiempo de libertad al dejarlas a ellas, ya que dos invitadas tomaron los miembros relajados para chuparlos y masturbarlos.
Entró Jenny a la sala y llamó la atención de todos:
– ¡Atención! ¡Esto es solo el comienzo! Les presento a nuestro último invitado: El Capitán Frío.
Entró entonces un hombre corpulento como los otros, vestido con ropa de aspecto industrial, metálico, y con unos lentes oscuros. El individuo comenzó a bailar junto a los demás y gradualmente retiró sus ropas; sin embargo, noté que él se desvestía más rápido que los demás. Inmediatamente las invitadas lo rodearon y lo ayudaron a quitarse su ropa, casi rasguñándolo. Sin embargo, el hombre parecía contento con el impacto que tenía en ellas. El Capitán Frío tenía una piel más oscura que la de César porque se veía que ya era moreno por naturaleza, a pesar de que también estaba tostado por el sol. Tenía más peso, tenía unos 8 o 10 años más que los otros dos y su apariencia era mucho más maciza. Su cabello era muy corto, como militar. El Capitán Frío estaba desnudo y su musculatura ya era accesible a las manos de todas, en menos de lo que canta un gallo.
«Sin duda querrán saber por qué se llama «El Capitán Frío no?»-dijo Jenny.
-Siiiiiiiiiii!!!!!- exclamaron todos juntos.
Jenny respondió: «Pues porque no hay mujer que lo haga venirse en menos de tres minutos». Me sentí fuera de lugar. No estaba acostumbrada a ese lenguaje ni a esas circunstancias.
Jéssica y Sara se levantaron al mismo tiempo, aunque Jenny solo permitió que Jéssica pasara al centro. -Pero hay un premio para la que lo logre! ¿quién quiere ser la primera? -dijo Jenny a gritos. Mientras tanto, el Cowboy y César seguían recibiendo atención oral, y las chicas se iban turnando para probar el sabor de sus miembros.
La hermanita menor de Rocío, Jéssica se bajó la falda, y yo no podía creer que una chica tan joven lo pudiera hacer sin sentirse inhibida y con tanta facilidad frente a todo el público, después se bajó el calzón y en un dos por tres ya estaba siendo penetrada con el Capitán Frío, quien estaba sentado en una silla y Jéssica subía y bajaba rebotando sobre el miembro poderoso de aquel hombre, que hacía gestos de que no sentía nada. Mientras tanto, Jenny puso el cronómetro en su celular y, a los dos minutos, El Capitán agarró a Jéssica por las caderas y movió las suyas de manera especial, lo que provocó que la jovencita diera alaridos y entrara en un orgasmo. Después de darle una nalgada, el stripper sacó su pene de la vagina de Jéssica y solicitó que Sara pasara. Varias de las invitadas fueron pasando una a una, en el mismo orden en que estaban sentadas, hasta llegar a cinco. Con la habilidad del experto Capitán Frío, cada una llegaba inexplicablemente a los dos minutos y alcanzaba el orgasmo. La novia, Rocío, fue la siguiente en llegar. La miré con incredulidad, ya que no pensaba que le fuera infiel a su prometido, incluso si fuera una fiesta. En ese momento, ya me daría cuenta de que mis principios morales eran muy conservadores.
Le grité: «¡Rocío, no!», pero las demás chicas la animaron a pasar.
Rocío se quitó la falda y el calzón sin pensarlo; pudimos notar que estaba húmedo, lo cual no me sorprendió porque, a pesar de todo, mi tanga también estaba húmeda. Nuria se acercó a Rocío y le quitó la blusa y el sostén, revelando sus diminutos senos, que parecían limones.
Rocío se adaptó rápidamente a la verga del Capitán, y a pesar de que no era su primera experiencia, desde el principio se notó que carecía de práctica. Se notaba que el Capitán sabía que era la novia, ya que desde el principio le brindó un trato especial, levantando las piernas para colocarlas en sus hombros y contoneando sus caderas. Ella estaba indefensa ante esta situación; el semental logró que ella se viniera cada minuto, masajeando su clítoris con sus dedos y atacándola sin piedad. El Capitán sacó de la vagina húmeda de Rocío su miembro erguido como una roca; luego, con un velo de novia que Jenny le pasó, se puso junto a ella para que tomaran una foto. No entendía cómo mi amiga se había degradado así antes de casarse.
En ese momento, alguien gritó atrás: -¡Carol!…¡Que pase Carol! Me puse de pie como un resorte y, al ver que algunas de mis amigas se acercaban, comencé a dirigirme hacia la cocina con la intención de salir de la sala.
-No, ¡que! ¡yo no!-les dije, asustada. -¡Vamos Carol, tú puedes con él!- dijo Jessica, con evidentes signos de ebriedad, ya estás casada y tienes práctica.
– Oh, no, no. Mi intento de caminar hacia la cocina fue obstaculizado por las invitadas, las cuales me impidieron avanzar más de metro y medio del sillón donde antes estaba sentada.
Rocío se levantó del sillón y dijo: «No seas aguada, Carol; eres la única que falta…»
Sentí las manos de Nuria, la señora, entrar por debajo de mis brazos, para desabrochar mi blusa, puse las manos sobre las de ellas para impedirlo y fue cuando aprovecharon para bajarme la falda y la tanga, ya que no tenía forma de evitarlo, las demás me habían tomado de las manos.
Yo gritaba desesperada, sin éxito, porque ellas me desvistieron rápidamente, a pesar de mis esfuerzos por zafarme.
-¡Bueno, bueno!…-dije yo finalmente, ante la imposibilidad de escabullirme. Me sentía acorralada y las miradas de todas las personas sobre mí me pesaban mucho; poco a poco me soltaban, mientras caminaba despacio hacia el centro de la sala, donde el Capitán Frío alargaba sus brazos para recibirme. Me acerqué a él con dificultad, mientras las manos de las demás mujeres me empujaban. Encima de su descomunal miembro, que pude apreciar lleno de fluidos de las mujeres a las que había penetrado en el pasado, me obligaron a colocarme. No había nada que pudiera hacer, pero sentí un poco de repulsión por ello. Fui bajando gradualmente para sentarme en ese lugar, y Nuria abrió mis nalgas con sus manos para que todas pudieran ver cómo el falo del stripper entraba en mi cuerpo. A medida que lo experimentaba, se llenó gradualmente mi vagina, y para mi sorpresa, los fluidos de su miembro facilitaron la penetración, junto con mi propia lubricación. Recordé a mi esposo y cerré los ojos para no reflexionar sobre lo que sucedería si se enterara de lo que estaba haciendo.
Mientras me tomaba de las tetas, a las que amasaba sin precaución, el Capitán Frío comenzó a moverse. Sus acometidas me llegaban a lo más profundo y comenzaba a sentir placer. Los gritos de las asistentes, que me animaban, se combinaban con el ruido acuoso que producía la verga del hombre, que entraba y salía de mi vagina. Se me subía la sangre a las mejillas; debí estar roja debido a la excitación. Me excitó aún más ser el foco de atención y observar al cowboy y a César recibiendo sexo oral de Jenny de su mamá. Mi vulva estaba golpeada por el pubis del Capitán Frío. A pesar de que estaba cerca del orgasmo, continué aguantando sus acometidas y apreté los músculos internos de mi vagina para atrapar su verga. Jenny marcó medio minuto. No estaba tan relajado el Capitán Frío, lo noté cuando hizo una mueca y me miró a los ojos.
—¡Dos minutos! —exclamó Jenny. Las invitadas gritaron más fuerte y me dijeron que yo podía ser la ganadora.
«No te vengas!», advertían. «Tú puedes con él!»
Apreté mis labios para mantenerme en calma. Con una de sus manos en mi vagina, el Capitán Frío comenzó a masajear en círculos mi clítoris. Respiré profundamente, estaba completamente lubricada y cada una de sus caricias me llevaría en cualquier momento al paraíso, pero miré con atención a Rocío. Con las manos en la cintura y mordiendo mi labio inferior, tomé el control de la situación. Sintiendo cada milímetro del suculento miembro del Capitán Frío, comencé a contonear mis caderas hacia un lado y hacia el otro. El rostro del hombre se enrojeció cuando giré mis caderas mientras apretaba mi vagina; ahora estaba al borde de la excitación. Me movía de arriba abajo, como si me fuera a huir; me daba nalgadas y se aferraba a mis caderas, pero dejó de masturbarme porque perdía el control.
«¡Dos cuarenta y cinco!» Jenny exclamó. Me había dado cuenta de que lo tenía en mis manos, o en mis caderas. Le demostré con una sonrisa que tenía control sobre sus sensaciones, mientras yo estaba con las manos estaban en mi cintura. El Capitán Frío gemía y se movía frenéticamente, aunque seguramente me veía como toda una puta.
¡Tres minutos!
Después de sentir una descarga caliente, saqué su miembro que emitía abundantes chorros de esperma y lo masturbé con mi mano derecha para demostrar a todas que lo había logrado. Había logrado resistir durante los tres minutos, además de hacerlo eyacular. Mientras lo masturbaba, me incliné junto a él. El semen salpicaba por todas partes; cayó sobre mi rostro y mis pechos. El flash de una foto nos alumbró. Al final, dejé caer mi cabeza en su vientre mientras escuchaba los vivas y aplausos de las invitadas y me uní nuevamente al Capitán Frío en una mamada deliciosa que terminaría con una segunda eyaculación, esta vez menos abundante pero dentro de mi boca.
Me ayudó a incorporarme Jenny al final, levantó mi mano y me declaró ganadora. La vencedora de la noche. Siempre recordaré esa despedida de soltera de mi amiga Rocío, y sobre todo cómo pasé la noche compitiendo en un concurso inolvidable contra el Capitán Frío.